VILLARREAL CF

Las frases de la semana uno de Marcelino que marcan el camino del Villarreal: "Te la pito por ser el primer día", "ir hacia delante"…

El asturiano ha regresado fuerte al club amarillo, marcando rápido su libreto y poniendo a los jugadores desde el primer día sobre la báscula.

Marcelino dando indicaciones. /Villarreal C.F
Marcelino dando indicaciones. Villarreal C.F
Nacho Sanchis

Nacho Sanchis

Se cumple una semana desde que Marcelino García Toral regresara al Villarreal CF bajo todo un foco de medios de comunicación, expectativas y análisis deportivos que apuntaban en una misma dirección: el rescate a la difícil situación de la entidad amarilla. 'Marce' quiso rebajar desde el día uno las expectativas, "no me llamo Salvador ni me apellido Milagros". Además, se hizo el loco cuando se le preguntó por su método: "No sé qué hago, simplemente trabajo y hablo con el jugador". Una semana despuésese método que Marcelino dice desconocer ya se ha puesto en marcha.

De hecho no hizo falta esperar siete días para que la plantilla viviera en primera persona la 'firmeza' del sargento Marcelino. Tan pronto fue anunciado oficialmente como entrenador, convocó a sus jugadores en una doble sesión de entrenamiento, un hecho que no había sucedido en toda la temporada . Previo a esa doble sesión, todos y cada uno de los jugadores fueron citados a las 9:00 en punto para pasar por la báscula. Algunos jugadores pasaron por ella antes incluso de articular palabra con Marce.

Marcelino asegura no conocer "qué hace exactamente para levantar al jugador", pero en el fondo, lo tiene muy claro. Lo primero, explotar al 100% el físico del futbolista y para ello controla su alimentación en todos los aspectos. Al asturiano le gusta que su equipo desayune y coma en común y que para la cena se lleven la comida que les prepara el club. ¿Comida normal? No. Comida de deportista: arroz integral, verdura etc. Nada de asados y otros placeres. "Yo no soy exigente con el peso, simplemente la báscula no miente", ha dicho en alguna que otra ocasión Marcelino en los vestuarios que ha estado.

El segundo aspecto 'made in Marcelino' es el de apretar en los entrenamientos. Marcelino es fiel a la frase "se juega como se entrena" y de hecho en solo una semana se ha podido apreciar que eso es así. Frases como "hay que correr más", "te voy a pitar esa falta porque es el primer día, pero aunque te hayan pegado podías seguir corriendo", "ir hacia delante, joder", se han escuchado en las primeras sesiones de trabajo del asturiano, que ha elevado la intensidad de los entrenamientos a niveles que no se veían desde Emery.

Una plantilla acomodada con Setién y admirada por Pacheta

Esa exigencia de Marcelino llega tras dos etapas bien diferentes. En la de Setién, de sobra analizada y explicada en este medio, la plantilla estaba acomodada y en los entrenamientos predominaban los rondos y las acciones a escasa intensidad. Mientras que en asuntos como la dieta, el cántabro no se involucraba en exceso.

Con Pacheta la situación era diferente, de hecho como ya advirtió Relevo, en el vestuario no tenían la tensión con él que sí tuvieron con Setién. Pero el técnico, admirador de los jugadores que tenía porque no había entrenado a futbolistas de tal nivel, no consiguió transformar esa confianza en ellos en exigencia que les llevara a sacar el 100%.

Marcelino, al menos hasta la fecha, ha conseguido ganarse la confianza de sus futbolistas en todos sus vestuarios, prueba de ello es que ha mantenido charlas con el núcleo duro del vestuario tanto grupales como individuales. Pero a la vez el asturiano consigue mantener una exigencia elevadísima en el verde. El claro ejemplo es el caso de Dani Parejo, fiel amigo del asturiano, con quien se abrazó nada más reencontrarse y con quien en vacaciones han compartido mesa y mantel... Pero a quién ya lanzó un recado público: "Le voy a exigir como al resto, va a depender de él, no de mí".

De hecho la plantilla, principalmente los que ya le conocen como el propio Dani Parejo, Gerard Moreno o Coquelin, saben que el asturiano no se casa con nadie. Si no, que le pregunten a Cani quien fue importante para Marcelino en su primer año de amarillo, pero con quien 'rompió' con el paso de los meses.