Borja Mayoral se reivindica, da el triunfo al Getafe y no cierra la puerta a una salida
El delantero asumió la responsabilidad de lanzar un penalti en los minutos finales ante el Alavés tras un verano inmerso en dudas.

Borja Mayoral se reivindicó en el Coliseum Alfonso Pérez con un gol de esos que puede cambiarlo todo. El delantero, después de un verano en el que se quiso ir por ausencia de 'feeling' con Bordalás y con la sensación de falta de confianza en el nuevo proyecto del Getafe, asumió la responsabilidad de lanzar un penalti en los minutos finales para decidir el partido. No se puso nervioso, miró a Sivera, amagó y lo marcó con la tranquilidad que le caracteriza. Un gol que valía los tres puntos y que permitió a los locales disfrutar defendiéndose los últimos minutos como mejor saben.
El exjugador del Real Madrid fue el gran protagonista del choque, no solo por su tanto. Ya había avisado en el primer tiempo, asumiendo todo el peligro. Cerca estuvo de abrir el marcado a los 25 minutos, cuando fue el más listo para aprovechar un error de Guevara en un pase atrás. Tras recortar a Sivera, su golpeo se estrelló contra el palo. Una piedra más en su mochila ya que llevaba sin marcar desde el pasado mes de abril y, sobre todo, por dejar pasar una oportunidad tan clara en uno de esos partidos en los que los duelos y las interrupciones eran más protagonistas que las ocasiones.
El primer tiempo, por qué engañarnos, fue duro de ver. Más allá de la mencionada ocasión de Mayoral, no hubo mayor peligro en las áreas. El paso por vestuarios mejoró levemente el ritmo, con un Alavés más atrevido que fue pisando campo contrario poco a poco. Abqar, a balón parado, estrelló un balón al palo y Guevara lo intentó en un par de ocasiones desde la media distancia. Sin embargo, eran los locales los que más peligro generaban con un arma rudimentaria pero efectiva: Saque de banda de Iglesias, peinada de Latasa y remates en segunda instancia de otros grandes rematadores como Domingos Duarte o Mitrovic.
Ni siquiera el debut de Samu Omorodion revolvió el partido. Apenas pudo correr y demostrar sus virtudes, sobre todo porque a los pocos minutos llegó la acción que marcó el partido. En un balón aéreo, Benavídez soltó el brazo de forma clara sobre el rostro de Latasa y el VAR avisó Martínez Munuera. El penalti no dejaba dudas, aunque también pudo haber otro en favor del cuadro alavés. De lo que no hubo dudas fue de la frialdad de Mayoral para transformarlo, darle los tres puntos al Getafe y ganarse a Bordalás y, quién sabe, el interés de algún club que se lance a por él en los últimos días del mercado. "Hasta el 31 todo puede pasar, sabemos cómo son los mercados", declaró el madrileño tras el choque en los micrófonos de Dazn.
"Yo el año pasado vine con la ambición de hacer buenas temporadas, de poder ayudar al club y que el club me ayude, pero ya veremos qué pasa de aquí al 31", insistió. Además, destacó el trabajo que ha realizado en la sombra para mejorar en los lanzamientos de penalti: "Lo que me caracteriza es trabajar mucho y aquí está el resultado: gol y victoria".