La muela de Mbappé eleva el runrún sobre su estado de forma

En el diagnóstico del Real Madrid de su duelo ante el Atleti comparten una sensación: luces y sombras. Lo mantienen en varios estamentos del club. Mientras en el cuerpo técnico son más optimistas, en el departamento dedicado al fútbol responden más críticos. Sacaron un resultado positivo sin un buen desempeño de sus estrellas, pero quedan aspectos por pulir.

Ni Vinicius ni Mbappé estuvieron finos frente al cuadro del 'Cholo' Simeone, y no pudieron contar con Bellingham, que sí estará en la vuelta. El brasileño al menos lo intentó, sin tino, pero en el caso del francés su actuación fue más preocupante. Desde la caseta lamentan en especial la última ocasión del encuentro, en la que Kylian tardó en exceso en darle el balón a Vini cuando estaba solo para batir a Oblak en área rival.

El partido de Mbappé dejó un regusto amargo por su lenguaje dentro del campo y también por sus números. Sin goles, sin asistencias, sin faltas provocadas, sin ningún centro ni balón largo con acierto, con cero recuperaciones, un tiro a puerta (pusilánime), dos de siete duelos ganados y catorce pérdidas.

Su actuación contra el Atlético de Madrid recordó a sus peores semanas de blanco, en las que tocó fondo fallando dos penaltis: uno en Liverpool y otro en Bilbao. Pero Mbappé ya le enseñó el camino a sus 'haters'. Se repuso de sus horas más bajas y coronó su ascenso con el 'hat-trick' ante el Manchester City el pasado 19 de febrero.

Medio mes después, sin rastro del francés. No ha vuelto a marcar desde su triplete en Champions, y encadena tres partidos seguidos sin ver puerta. Girona en casa, Betis fuera y ahora el derbi madrileño en Europa. Algunos elevan su sequía a preocupación: ¿le pasará algo a Kylian Mbappé?

La versión oficial responde con el problema que sufrió en una muela la pasada semana. Esto le impidió viajar a San Sebastián para jugar en Copa contra la Real Sociedad, y le lastró físicamente en los entrenamientos previos al choque contra el Betis en el Villamarín. Allí firmó unos primeros minutos fantásticos y luego se diluyó.

"Ha tenido este problema en una muela y no ha entrenado mucho. No estaba a su mejor nivel, estaba claro, y para evitar problemas he preferido quitarlo y meter a Endrick que está en buena dinámica. Mbappé ha entrenado poco y no estaba al cien por cien", contó Ancelotti sobre Kylian en la rueda de prensa posterior a la debacle en Sevilla.

Este miércoles contestó en la misma línea. "La verdad es que no ha podido trabajar mucho porque el dolor de muelas no le ha permitido entrenar tres días. Llegó al partido contra el Betis no en su mejor condición, le vino bien descansar minutos para estar bien en el siguiente partido".

El domingo Mbappé tendrá una nueva oportunidad de resarcirse y espantar cualquier fantasma. O simplemente reencontrarse con un estado físico óptimo, tras pasar unos días muy molestos por la muela, como comunica el club. La final del Metropolitano pasa por sus botas.