BETIS

Así se crearon (y desaparecieron) 'La finta y el esprint, Joaquín' y otras rimas inolvidables del Betis

"Se me ocurrió de repente por su forma de jugar", dice Manuel Melado, el 'speaker' más recordado de la historia del club bético.

Manuel Melado canta un gol en la cabina del Benito Villamarín./M.M.
Manuel Melado canta un gol en la cabina del Benito Villamarín. M.M.
Samuel Silva
Alonso Rivero

Samuel Silva y Alonso Rivero

Peluquero, periodista, letrista, compositor, poeta, escritor, speaker… Casi como si de un hombre del Renacimiento se tratara, Manuel Melado Prado (Sevilla, 1940) ha cultivado el arte que fue aprendiendo en la calle Amor de Dios. 96 años cumple la peluquería que abrió su padre, en la que Melado comenzó a trabajar con 11 años y que ahora regenta su hijo. "La cultura que he adquirido ha sido en este Ateneo que es la peluquería. Aquí se sientan catedráticos, gente del mundo del arte, y eso te enriquece", cuenta Melado, que a sus 83 años sigue acudiendo puntual cada mañana a ese lugar donde modeló su personalidad.

Melado recuerda sus rimas más célebres.Relevo / A. R.

Con más de 100 sevillanas grabadas, con auténticos pelotazos como Mírala cara a cara, Quiero cruzar la bahía, Que no nos falte de ná o A bailar, con El Pali, Albahaca o Cantores de Híspalis poniendo voz a sus composiciones, a Melado aún se lo recuerda hoy por su etapa de speaker del Betis. Sus pareados aún están en la memoria de los aficionados, después de que durante 17 años ejerciera su magisterio en el campo del equipo verdiblanco. "Todavía me piden fotografías o vienen aquí a la peluquería a visitarme", rememora Melado, que guarda con cariño esa etapa que vivió en el club bético.

Artista de cuna, con una capacidad innata para cultivar cualquier actividad. "Siempre me dicen que hubiera triunfado en lo que hiciera", dice Melado, que llegó al Betis casi por casualidad. "Yo soy simpatizante, pero tampoco entiendo mucho de fútbol", cuenta para justificar ese rocambolesco inicio en el Betis, que lo obligó a dejar la playa de La Antilla a toda prisa para llegar al primer partido de Liga. Todo se había gestado semanas antes, en un festival que se celebró en el Benito Villamarín y que presento junto a Marifé de Triana. "Después de aquello me llamó Gregorio Conejo de parte de Lopera. Le puse unas condiciones pensando que no me llamaría. En aquellos tiempos tenía mucho trabajo y el domingo era el día libre", señala Melado, que indica que no lo pasó bien en su primer día en Heliópolis. "Me temblaba todo el cuerpo. Allí estaba Ray Palma, que era un enamorado del fútbol y era speaker del Betis y del Sevilla. Me fijé en cómo funcionaba aquello, pero con mucho miedo de enfrentarme a 40.000 personas", añade.

Melado habla sobre cómo empezó como speaker.Relevo / A. R.

Pero su vena de artista salió a relucir pronto. "No conozco la métrica literaria, pero tengo una intuición que es la música", comenta Melado, que pronto comenzó a destacar por esas rimas con las que anunciaba la alineación del Betis. "Fue funcionando, con Finidi, la sombra juguetona; cerrojo Prats; filigrana Alfonso; pepinazo Jarni; aunque el campo sea muy grande, él lo cubre, Luis Fernández... A cada uno le hacía la rima según lo viera jugar", afirma Melado, que se muestra orgulloso de ese pareado que preparó para Joaquín y que ha dado la vuelta al mundo. "'La finta y el esprint, Joaquín'. Se ha quedado para toda la vida y en todos los sitios en los que ha jugado", señala emocionado Melado, que pidió una camiseta del portuense en el homenaje que recibió del Betis, pero que se tuvo que conformar con el dorsal 15. "Yo veía que se iba por la banda y se me ocurrió de repente por su forma de jugar. Eso son reflejos, no es elaborar ni son cosas machacadas para que sean frescas", añade sobre ese proceso que necesitaba para componer las rimas que causaban furor entre los béticos.

¿Se atrevería Melado a ponerle una rima a Fekir o Canales? "Me llaman para preguntarme '¿tú que les pondrías?'. Pero yo les digo que nada. No estoy allí. Ni a Canales, y mira que los admiro. Soy simpatizante del Betis, pero el Betis tampoco es mi vida", dice Melado, que cortó ese ciclo con la llegada de José Antonio Bosch -administrador judicial- al Betis. "Estaban acabando con todo lo de la época de Lopera. Para mí no fue doloroso, ya pensaba salir por mis hijos. No se atrevían a decirme que me tenía que ir, pero dije yo que me iba y les di un alivio", recuerda sobre su despedida del Betis, en el que vivió también momentos inolvidables como la final de Copa del Rey de 1997 en el Santiago Bernabéu.

Melado recuerda su experiencia en la final de Copa de 1997.Relevo / A.R.

"Nunca he visto dos aficiones más hermanadas que la del Barcelona y la del Betis aquel día. Llegué al campo y había medio de cada equipo. Por antigüedad le tocaba dar las alineaciones a Manuel Vich, que era el speaker del Barcelona. Las dio con ese tono suyo, que yo le decía: 'Manuel, tú estás para dar la alineación en un tanatorio'. Cuando me tocó a mí, de un chispazo me salió aquello de 'Béticos del universo, pedazo de Betis'. El estadio se volvió loco. Los mismos béticos me lo han seguido recordando, que se les pone los vellos de punta. Fue algo inenarrable", rememora Melado, que no tuvo tanta suerte en la de 2005. "Me dejaron sin trabajar. Se puso enfermo el speaker de Osasuna y entonces me dijeron que yo no podía recitar las alineaciones. '¿Si se lesiona el portero de Osasuna tampoco puede jugar el del Betis?', les dije. Pero no hubo forma".

Tampoco pudo colaborar en el homenaje a Joaquín. "Estuve en Fondo como un bético más", señala Melado, a quien si le hubiera gustado participar. "Estaban muchos de los futbolistas de mi época y les podría haber hecho su rima sin entorpecer el acto, pero no me llamaron. No hubiera sido ni dos minutos", lamenta Melado, ese speaker inolvidable para el bético y para Joaquín, la finta y el esprint.