GETAFE - ATLÉTICO
Los 20 minutos más frenéticos del VAR hacen que el Getafe pase de la ira al éxtasis
La caseta azulona vivió atónita el penalti señalado por Cuadra Fernández tras una mano que venía de rebote. Patricio Moreno, segundo del Getafe, fue expulsado por protestar.
Domingo caldeado en el Coliseum de Getafe. Cuando los azulones estaban haciendo de su defensa una gran virtud ante el Atlético de Madrid, una jugada desafortunada terminó condenando el resultado, o parecía. En un centro al área por parte de los colchoneros, Robin le Normand intentó remachar el balón que le pasó por encima de la testa.
El esférico, sin encontrar oposición, pasó por las manos de David Soria, guardameta del Getafe, que no consiguió embolsar el lanzamiento. Al portero se le escapó la pelota, que terminó conectando con la mano de Omar Alderete, tras un rebote en su compañero. El central sacó sus brazos porque en su trayectoria apareció el portero azulón y quería evitar un golpe mayor.
Bordalás: "Hay que vivir el momento".
Ese gesto natural acabó con un penalti en su contra. Cuando todo parecía que se iba a quedar en la anécdota, pues el contacto con la mano de un balón que sale de un rebote no se debería pitar según reglamento, el VAR intervino. Desde la sala VOR llamaron a Cuadra Fernández al monitor. Figueroa Vázquez, encargado del VAR, interpretó que el colegiado de campo debería valorar la mano del defensor paraguayo.
La valoración duró unos dos minutos, tras ver diferentes imágenes y repeticiones a cámara lenta, Cuadra Fernández señaló una pena máxima que convirtió Sorloth. Desde el primer momento que se paró el juego y desde que el colegiado fue llamado al monitor, los nervios en la caseta azulona se pusieron a flor de piel. Los jugadores rodearon al árbitro pidiendo unas explicaciones que no dio. Lo mismo ocurrió con el cuerpo técnico, que se comió al cuarto árbitro en búsqueda de un motivo para señalar penalti.
Cuando el colegiado señaló el penalti, los futbolistas del Getafe comenzaron a pisar el punto de lanzamiento y en el banquillo Patricio Moreno, segundo entrenador de Bordalás, entró en cólera. Tanto, que fue expulsado con una tarjeta roja directa. Otro que vivió una expulsión fue Ángel Correa. El delantero del Atlético de Madrid corría solo al contraataque, hasta que apareció Djené, que puso su bota izquierda para bloquear la carrera del argentino. En ese choque, Correa pisó el tobillo del defensa azulón y vio la roja directa, tras un chequeo del VAR.
De esas dos jugadas polémicas, habló el técnico getafense, José Bordalás, en el micrófono de DAZN. "El partido se ha visto condicionado con la acción del penal, pero es el futbol de ahora en el que se tendrían que pitar muchos penaltis. Al final es anecdótico porque hemos podido ganar", señaló. Sobre la roja a Correa para Bordalás fue clara. "La entrada es dura y estas acciones se están sancionando con tarjeta roja".
Acto seguido a la expulsión llegó el empate de Mauro Arambarri. El mismo hombre que logró el 2-1, previo paso por el VAR (de nuevo), después de un centro de Diego Rico que logró reconducir hasta el fondo de la red de Jan Oblak.