De qué país es Camavinga: origen, dónde nació y la historia de sus padres
El futbolista del Real Madrid tuvo una infancia muy difícil.
Eduardo Camavinga se encuentra sentado en la cima del mundo. Futbolista importante en el Real Madrid e internacional absoluto con Francia, poco más se puede pedir a la carrera de un jugador de fútbol. Más todavía a la de un talento joven, que todavía se encuentra en el estadio inicial de su trayectoria. Sin embargo, la senda vital del centrocampista blanco no ha sido un camino de rosas ni mucho menos. Al contrario, varias son las dificultades que ha tenido que superar junto a su familia antes de estar en situación de patear un balón si quiera.
Evidentemente, Eduardo Camavinga posee nacionalidad francesa. Por ello defiende la camiseta del gallo desde septiembre de 2020, cuando debutó con la selección absoluta gala. Antes, además, lo había hecho en la Sub-21. Sin embargo, no nació en el país galo. Tampoco lo hizo en el país de origen de sus padres, ni siquiera en alguna de las varias antiguas colonias que el estado francés llegó a tener repartidas por el mundo. Su historia es mucho más intrincada y, a la vez, un reflejo de la realidad olvidada que viven miles de personas en el mundo.
Dónde nación Eduardo Camavinga
Eduardo Camavinga nació el 10 de noviembre de 2002 en Cabinda, Angola. Concretamente en un campo de refugiados situado en Miconje, donde sus padres habían llegado tras huir del horror de la guerra en su país natal: la República Democrática del Congo. La familia Camavinga pasó en Angola dos años antes de poner rumbo a Francia a buscar un futuro mejor en 2003. Inicialmente llegaron a Lille, aunque posteriormente se asentaron en Fougeres, una pequeña ciudad medieval situada en la Bretaña.
Ahí no acabaron los problemas para el pequeño Eduardo. Se inició en la práctica del judo aunque a los ocho años se cambió al fútbol, su nueva pasión. Sin embargo, cuando el centrocampista del Real Madrid apenas tenía 10 años, una nueva tragedia volvió a azotar a su familia. Un incendio arrasó con el hogar familiar, provocando que los Camavinga perdiesen todas sus pertenencias personales.
"En ese momento estaba en el colegio. Por la mañana vi pasar a los bomberos cerca de mi escuela. No me imaginaba que estaría pasando algo en mi casa. Un profesor nos dijo a mi hermana y a mí que nuestra casa se había incendiado. En un principio no lo creí", contó el propio Camavinga en una entrevista en Movistar+. "Fue la primera vez que vi llorar a mi padre", añadió.
El fuego arrasó con todo y dejó a los Camavinga en la miseria más absoluta. Sin casa, ahorros o, incluso, ayudas sociales. Fueron sus vecinos los que les echaron una mano para poder seguir adelante, encontrándoles un nuevo hogar de acogida o donándoles ropa y comida para que pudieran ir tirando. El propio Eduardo asegura que su padre entonces le dijo que sería él quien sacase adelante a su familia. Algo que hizo gracias a su buen hacer en el terreno de juego. Un año más tarde del incendio, Camavinga entró en la cantera del Stade Rennais y, a los 16 años, firmó su primer contrato profesional. Una carrera precoz que le llevó a firmar por el Real Madrid a los 19 años.
Quiénes son los padres de Eduardo Camavinga
Eduardo Camavinga es hijo de Celestino y Sofía Camavinga, una pareja de refugiados congoleños que huyeron de su país a causa de la cruenta guerra que estalló en su país en 1999. En total, el madridista es el tercero de los seis hijos que tuvo el matrimonio.
Cuando se mudaron a Francia, su padre, Celestino comenzó a trabajar en un matadero situado en la localidad de Saint-Brice-en-Coglès. Por su parte, su madre dejó de trabajar cuando tuvo a su tercera hija. La familia Camavinga ha permanecido muy unida durante todo el proceso. De hecho, cuando Eduardo fichó por el Real Madrid, se mudó a una casa junto a sus padres y varios de sus hermanos. Aunque no se sabe mucho sobre su vida, sí que ha trascendido que Sebastiao Camavinga es peluquero de profesión, y es el encargado de cortarle el pelo a estrellas blancas como Vinicius, Militao o Jude Bellingham.