El parón más agitado de Mbappé está planeado al milímetro por el Real Madrid

Días de mucho ruido en torno a Kylian Mbappé. No ir a la convocatoria de Francia para los partidos contra Israel y Bélgica de Nations League le ha salido caro a nivel mediático, con su país levantado en armas contra su estrella. "A partir de ahora la selección será a la carta para él", decía L'Equipe en uno de sus últimos editoriales. También le daba un palo Daniele Riolo en RMC: "Hoy vemos algo que Mbappé tiene claro desde hace mucho tiempo: hace lo que quiere, no le importa lo que diga la gente y hace lo que es importante para él".

Este enfado generalizado de la afición francesa se ha calentado con las fotos de una supuesta salida nocturna por Suecia durante sus días libres con el Real Madrid, publicadas por el medio Sportbladet. No ha trascendido en el club blanco, donde no ha molestado para nada. Estaban al tanto del viaje y tenía libertad para hacerlo aprovechando el descanso que les ha otorgado Ancelotti.

Deschamps, principal defensor del delantero en Francia, ha salido al paso de la polémica. Durante la mañana del domingo, en una entrevista con Telefoot, el entrenador le exculpó. "Kylian está en un programa con su club, el Real Madrid. Tengo que gestionar a los que están aquí. Kylian me envió un mensaje antes del partido. Como todos los jugadores, sigue el programa de su club, el Real Madrid. Si los jugadores están en sus días libres, tienen la libertad de hacer lo que quieran", sentenció.

Cuando se refiere a "programa" el técnico francés sabe bien que el Madrid está llevando a cabo un plan en estas semanas que tiene un objetivo claro: recuperar la mejor versión de Mbappé a nivel físico. Esto pasa por mucho trabajo en Valdebebas y descanso cuando toca. Como el resto de compañeros, disfruta de cinco días libres y se incorporará el martes a los entrenamientos.

El programa establecido para estas dos semanas consta de dos bloques de trabajo, uno antes de las minivacaciones y otro después. Trabajo específico para un futbolista que no ha tenido prácticamente pretemporada y que, aunque en dos semanas es imposible recuperarlo del todo, puede servir para ponerle a tono. "Está a un 60%", aseguraban desde el club respecto a la forma de su nueva estrella hace sólo un par de semanas.

En el conjunto merengue no pueden estar más contentos con su nuevo futbolista. Ha llegado con un perfil bajo, dispuesto a adaptarse lo antes posible. Lejos todavía de su mejor versión ha podido marcar siete goles en sus primeros once partidos. Se le pide más, pero todavía necesita un subidón a nivel físico y terminar de encajar como delantero centro, posición en la que le utiliza Ancelotti. Estas dos semanas que le han provocado un lío en Francia pueden ser claves para lo que queda de temporada.