Pedri comunica que el Barça va a por LaLiga
En un recital del canario, los blaugrana lograron minimizar al Sevilla y acabaron pasando el rodillo una vez más.
En un ambiente cada vez más tóxico, Pedri construyó una burbuja en el Sánchez Pizjuán y puso el balón en el centro. El nivel del canario es un escándalo. Ante un serio y correoso Sevilla, se apoderó de la pelota y dejó los debates fuera del estadio. El Barça de Hansi Flick ya lleva más goles que todos los que anotó la temporada pasada. Pedri coloreó el fútbol blaugrana y comunicó que los culers van a por LaLiga. En octubre parecían claros favoritos, luego se desengancharon y ahora vuelven a estar en la pomada.
Inició el Barça con el fuego que quemó Mestalla. Con un Pedri soberbio en el último tercio que asistió a un Lamine exageradamente pulcro en el primer toque. Nyland quebró lo que habría sido un bonito gol mandando la pelota a córner. Y en el saque del mismo, tras una prolongación de Iñigo, apareció Lewandowski para firmar el primero. No se cortó el Sevilla. En el mismo saque de centro, encontró rápidamente a Saúl al espacio. Araujo, reincidente en este tipo de fotografías, rompió milimétricamente el fuera de juego y el centrocampista del Sevilla encontró la navaja suiza en el segundo palo. Fue el primer gol de Vargas con su nuevo equipo.
Nada que guardarse
Con poco que guardarse, Barça y Sevilla pactaron divertir al espectador neutral y tensar al propio. El campo se agrandaba y quedaban espacios para el que los quisiera. En un acción que no remató limpiamente, Isaac Romero acarició el 2-1. Le sacó el balón Szczesny de un manotazo y el rebote le cayó a Araujo y tratando de despejar recibió una dura entrada de Saúl. Con el tobillo tocado, Flick optó por dar entrada a Cubarsí. Los blaugrana se han acostumbrado a que Pedri sea respuesta a todo. El canario es la brújula en los ataques estáticos, el receptor cuando el colectivo pide ingenio y el dibujante de últimos pases. Influye en todas las alturas del campo. Habla la lengua de los pocos elegidos que pueden trazar aquello que imaginan. Ante planteamientos densos, es la frescura de abrir una cerveza en verano.
Sabía Garcia Pimienta que solo podría competir si convencía a sus jugadores de sacar su versión más generosa. Vargas y Lukebakio estuvieron siempre cerca de Pedrosa y Juanlu. En el sector izquierdo era obligatorio que el suizo ayudara a vigilar a Lamine. Después de robar les esperaban 60 metros de carrera hasta Szczesny. A pesar del reto, el Sevilla mandaba avisos, encontrando resquicios por donde desajustar a la defensa culer. Al filo del descanso, 'Tek' salvó un remate acrobático de Lukebakio. Los atacantes del Sevilla sabían que tras muchos minutos de trabajo defensivo era posible encontrar recompensa.
La sutileza de Pedro
En Nervión fueron capaces de borrar la posibilidad de una nueva goleada blaugrana empatando rápidamente. A pesar de la imaginación de Pedri y la insistencia de Lamine de encarar, no estuvieron incómodos sin la pelota. Aunque el canario es capaz de cambiar escenarios de un plumazo. Nada más arrancar en el segundo tiempo, con Fermín haciendo de Gavi, Pedri mandó un balón suave al corazón del área para que el andaluz convirtiera el 1-2. Se juntaron el instinto de un Fermín que recuerda al de Thomas Müller y la arquitectura del pase de Pedri. Que este lleve tres asistencias habla de lo injusto e inútil que es valorarle puramente por las estadísticas.
A la que el Barça descorchó la botella, su fútbol ofensivo fue imparable. Después de que el Sevilla pidiera penalti en una acción de Koundé sobre Sow, Cubarsí encontró a Raphinha entre líneas y el brasileño, sobrado de confianza, golpeó con la derecha para hacer el 1-3. Pau se empeña a decirle al mundo partido tras partidos que tiene una diestra más fina que muchos mediapuntas. A media hora para el final, con el Barça empezando a oler los tres puntos, en una entrada de Fermín sobre Sow el canterano acabó con la pierna levantada y el VAR le sugirió la tarjeta roja. Se quedaron con diez los de Flick.
El Sevilla quiso revolucionarse, con Ejuke como comodín, y el Barça aplicó cloroformo. Bajó el ritmo, dejando a Pedri hacer y deshacer, y cuando tuvo la posesión poco se notó estar compitiendo con una pieza menos. A los de Pimienta ya no le quedaron ni piernas ni ideas para acercarse en el marcador. El partido lo sentenció Eric, que entró para jugar pivote y evidenció que desde aquel tanto en Lisboa su historia como blaugrana ha cambiado radicalmente. Este Barça va a por todos los títulos.
Ficha técnica
- 1 - Sevilla FC : Nyland,; Juanlu, Badé, Kike Salas, Pedrosa (Marcao, min. 87); Gudelj (Agoumé, min. 75), Sow (Suso, min. 63), Saúl (Manu Bueno, min. 75); Lukebakio, Vargas (Ejuke, min. 63) e Isaac.
- 4 - FC Barcelona : Szczesny; Koundé, Araujo (Cubarsí, min. 22), Íñigo Martínez, Balde; De Jong (Eric García, min. 70), Pedri, Gavi (Fermín, min. 46); Lamine Yamal (Gerard Martín, min. 89), Raphinha y Lewandowski (Olmo, min. 70).
- Goles: 0-1, min. 7: Lewandowski. 1-1, min. 8: Vargas. 1-2, min. 46: Fermín. 1-3, min. 55: Raphinha. 1-4: min. 89, Eric García.
- Árbitro : Alejandro Hernández Hernández (Comité de Las Palmas). Expulsó con roja directa al barcelonista Fermín (min. 62). Amonestó a los locales Saúl (min. 17), Isaac (min. 45), Badé (min. 67), Marcao (min. 88) y Suso (min. 95); y a los visitantes Gavi (min. 38) y Eric García (min. 80).
- Incidencias : Partido correspondiente a la vigésima tercera jornada de LaLiga EA Sports celebrado en el Sánchez-Pizjuán ante 40.500 espectadores. En los prolegómenos, se guardó un minuto de silencio en memoria del exjugador del Sevilla Santos Bedoya.