Pellegrini saca pecho de la "ambición del club" y avisa: "El partido del Villarreal es de seis o siete puntos"
El técnico verdiblanco, con todo a por los de Marcelino. El objetivo es "seguir dependiendo de nosotros mismos" en la lucha por la Champions.

Todo en juego. El Benito Villamarín volverá a ser el escenario de un partido grande. Así ha querido Manuel Pellegrini que sea hasta final de temporada. La ilusión desborda Heliópolis, que ya le resta los minutos a la cuenta atrás de la lucha por la Champions. Sí, la entidad va a por todo. Y ese es el mayor orgullo para un entrenador que ha logrado cambiar la mentalidad de todo el ecosistema verdiblanco: "Es un gusto ver que la ambición de la gente, del club y de todo el mundo es cada vez mayor".
"¿Molestarme por las críticas del partido ante el Celta? A mí personalmente no me dolieron. Al revés. Para mí es un gusto ver que la ambición de la gente, del club y de todo el mundo es cada vez mayor. Lo que yo decía es que estábamos a tres puntos de Europa y que la diferencia con las campañas anteriores era muy poca. Que había que mantener la calma y el convencimiento de lo que se hacía", remató.
Y es que Pellegrini y las crisis se entienden a la perfección. La frase 'nunca se le cae el equipo' no para de resonar cada temporada en Heliópolis. Y con razón. Desde aquella derrota en Vigo, el Betis suma nueve victorias, dos empates y una única derrota. Ha pasado de estar más discutido que nunca en la era del técnico chileno... a soñar despierto con la Champions.
Recibirá al Villarreal en el Benito Villamarín. Empatados a puntos... y con la posibilidad de hacer una machada histórica. "Es un partido de seis o siete puntos incluso, porque si ganamos nosotros sumamos tres puntos, ellos pierden tres y le ganamos la diferencia de goles", afirmó Pellegrini. La importancia del encuentro es máxima, aunque ni un hipotético triunfo haría que el técnico rebajara la intensidad.
"Pero también, como dijo Marcelino, después de eso quedan muchos puntos por jugarse, así que no va a ser un partido final. Pero para nosotros es muy importante poder posicionarnos tres puntos por arriba para seguir dependiendo de nosotros". Ahí está la clave.
El Betis quiere depender de sí mismo. Sabe que jugar cada tres días se sobrelleva mejor con el triunfo. Y ahora mismo tiene una relación muy íntima con la victoria. Ambos se buscan. Se desean. Pero el domingo tocará otra pelea. Sin el Chimy Ávila ni Ez Abde, pero con Isco, Diego Llorente y un Jesús Rodríguez "con muchas condiciones para el uno contra uno, pero que tiene que tener mas tranquilidad para definir las jugadas". Suerte la del canterano de encontrarse con Pellegrini en su camino. También la del club verdiblanco. Mentalidad competitiva y ambiciosa. Heliópolis quiere las estrellitas.