REAL MADRID - FC BARCELONA

El 'piperío' resiste en el Nuevo Bernabéu: "No vamos a animar en un Real Madrid-Getafe"

Varios aficionados merengues charlan con Relevo acerca de este término que vivió su máximo auge en la etapa de Mourinho.

Los aledaños del Santiago Bernabéu, antes del Real Madrid - Dortmund./RELEVO
Los aledaños del Santiago Bernabéu, antes del Real Madrid - Dortmund. RELEVO
Rodra P
Manuel Amor

Rodra P y Manuel Amor

"Pipero": aficionado, en este caso del Real Madrid, que va al campo a ver los partidos y nunca anima. Pero sí se queja. Y suele hacerlo mientras come pipas y escucha una pequeña radio. Así se define al denominado piperío del Santiago Bernabéu, un grupo social del público merengue que aún sigue muy presente en el estadio blanco.

El término se acuñó y vivió su máximo auge durante la etapa de José Mourinho como entrenador del Real Madrid, en la que convivían dos maneras de sentir al equipo. El madridismo beligerante, liderado por el portugués, y el madridismo más pasivo, en el que sobresalía el 'piperío'. Los mourinhistas se quejaban de toda esa parte del estadio que no animaba a los suyos.

Eloy Lecina, periodista y fiel seguidor del Real Madrid, recuerda una anécdota para describir a este sector del madridismo. "Viajé de Barcelona a Madrid para ver el partido de vuelta contra el Borussia Dortmund, el famoso día de la remontada que nunca llegó, con Mourinho y contra Lewandowski, en el año 2013. Yo no paraba de animar y un hombre sentado a mi lado diciéndome que no me levantara, que le molestaba. Eso es un pipero".

Roberto Gómez, hijo de Juanito y otro ilustre madridista, los define así: "Los piperos son los que más se dejan influir por la prensa. Los madridistas con menos personalidad". Siguen vigentes. Y Relevo se acercó al Santiago Bernabéu para hablar con alguno de ellos.

Los testimonios del madridismo 'pipero'

En los aledaños del estadio, en la previa del duelo de Champions entre el Real Madrid y el Borussia Dortmund de este pasado martes, se distinguían varios grupos comiendo pipas. "Yo no como pipas. Como cacahuetes", respondió uno de ellos, sin mucho ánimo de contestar.

Otro, sin embargo, sí se prestó a ello. "Yo no había escuchado esta palabra, lo de pipero. Lo que te puedo decir es que nosotros sólo venimos a los partidos de Champions, al derbi y al Clásico. Al resto de partidos no venimos", comentaba. Otro colega, que también rondaba los 60 años, le respaldaba. "Se quejan de que en este estadio no animamos, pero no hay otro campo que retumbe tanto en los momentos decisivos".

La previa en el Bernabéu del pasado Real Madrid - Dortmund.EFE

"No vamos a animar en un Madrid-Getafe. Es lo normal. Ahora además hay más 'guiris' que antes y los precios tampoco ayudan. Los jóvenes no pueden pagar tanto dinero y son los más activos en la grada", explica Luis, un aficionado de 55 años que lleva más de quince abonado.

En un banco, al lado del restaurante José Luis, dos amigos comparten bolsa de pipas. "Las pipas las tomamos fuera del estadio. Dentro, no", sentenciaban. Salva Martín, otro aficionado merengue, cuenta una historia del partido contra el Borussia Dortmund del pasado martes: "Estaba sentado al lado de un hombre que comía pipas y estuvo insultando a Vinicius todo el partido, hasta la segunda parte, en la que rápidamente dijo que era el mejor".

El 'piperío' sigue en el Nuevo Bernabéu, y continúa con su 'modus operandi'. No animan, salvo en ocasiones muy especiales. La de este sábado contra el Barça, una de ellas.