El intento de aplazamiento del Espanyol-Barça de este miércoles refleja la irrelevancia de la Copa Catalunya

El derbi entre el RCD Espanyol y FC Barcelona de Copa Catalunya se jugará este miércoles en la ciudad deportiva Dani Jarque, aunque al principio corrió riesgo de no disputarse porque el FC Barcelona solicitó su aplazamiento. Hace días que el club perico empezó a organizar la logística del encuentro, preparando las acreditaciones para los medios de comunicación y decidiendo la fórmula de entradas para los socios.

Incluso esta misma mañana de lunes, la entidad perica abrió el proceso de retirada de boletos a sus socios, que asistirán al encuentro de forma gratuita simplemente descargando su entrada online. Pero horas después de lanzar esa comunicación, SPORT avanzó y Relevo pudo confirmar que el partido podría aplazarse por iniciativa del FC Barcelona, si es que la federación catalana (FCF) se lo autoriza, cosa que no hizo.

Para contextualizar, ya estaba decidido de antemano que ninguno de los dos equipos disputaría la semifinal de Copa Catalunya con su primer equipo, pues tratándose de una competición de carácter amistoso ni Barça ni Espanyol iban a arriesgar a sus futbolistas teniendo en cuenta lo mucho que ambos se juegan de aquí a final de temporada. Además, el partido se acordó disputar, hace semanas, durante el parón de selecciones, a petición precisamente del FC Barcelona. Y especialmente en el caso de los azulgranas, la mayoría de sus jugadores tienen compromisos internacionales.

Se pactó competir con los filiales, pero resulta que el FC Barcelona Atlètic, en posiciones de descenso, tiene partido de Primera RFEF el próximo viernes en Lezama contra el Bilbao Athletic, lo cual ya se sabía desde hace algunos días. Con todo, hasta hoy la entidad azulgrana no había planteado el aplazamiento del encuentro. Llegados a este punto, el Barça llegó a barajar la posibilidad de acudir a la Dani Jarque con su Juvenil A, que se acaba de proclamar campeón de la Copa del Rey de su categoría, pero sus jugadores tienen unos días de fiesta tras su primer título del curso. Pero el partido se jugará.

Visto lo visto la Copa Catalunya es irrelevante para los principales clubes catalanes, tal y como demuestra la petición del Barça, en una temporada en la cual, precisamente, la FCF había reformulado el formato de la competición para que los equipos profesionales compitieran con los amateurs. Eso sí, a partir de semifinales. Que un derbi entre Espanyol y Barça se decidiera jugar en la ciudad deportiva en lugar del estadio principal confirma la intrascendencia del torneo.

No surtió efecto el impulso que trató de darle la FCF a una competición, heredera de la Copa Macaya, el primer campeonato de fútbol que se disputó en el estado español, y que a día de hoy solo ilusiona a los equipos semiprofesionales y amateurs. A los grandes les molesta más que otra cosa a causa de su apretado calendario, que no les permite disputar la Copa Catalunya con sus primeros equipos como sucedía hace años, especialmente cuando se fijaba en verano.