Qué le queda al nuevo Santiago Bernabéu antes de la inauguración en 2024
El estadio entra en su recta final. El evento de inicio será en 2024, cuando se pueda cuadrar el calendario deportivo con el de los artistas.

El Santiago Bernabéu apura los detalles para su finalización con sus obras. Las últimas semanas han servido para que los trabajadores de las obras den un empujón a todo lo que queda por pulir de un recinto que todavía está en obras en algunas zonas. Las máquinas, grúas y trabajadores que lo rodean día tras día delatan la situación, que no es ni mucho menos un problema para el club. Era lo previsto a estas alturas del año. Resulta fundamental cuidar cada detalle, tanto técnico como estético, para que el estadio esté a la altura de lo esperado.
Pero, ¿qué falta para su finalización? Bastante, según trabajadores de las obras consultados por Relevo. Principalmente, en las partes más visibles para el espectador, que todavía puede observar a simple vista andamios, maquinaria o zonas cerradas, incluso tapadas con lonas. Además, como es lógico, hay problemas que van surgiendo sobre la marcha y que hay que ir solucionando.
En la parte exterior, en lo que se refiere estrictamente al Bernabéu, falta por apuntalar la piel envolvente de acero. La fachada que da a Castellana ha necesitado un cambio de lamas, ya que el primer intento no había quedado como al club le gustaría. Además, se han de colocar por la zona superior de una parte del estadio, además de tapar algunas franjas que se dejaron vacías para facilitar los trabajos. La idea pasa por que todo quede uniforme y envuelto en acero. También se deben apuntalar los detalles de los accesos con pavimento para el suelo y embellecedores en las puertas.
En cuanto a las obras en la plaza de Sagrados Corazones, que están en curso, lo que se espera sea uno de los puntos neurálgicos convirtiéndolo en una zona comercial y de paso para viandantes y visitantes. Sin embargo, para esto queda todavía tiempo ya que se trata de una zona que se aprovecha para material, maquinaria o camiones. El club prefiere centrarse en lo que atañe directamente al estadio antes de construir fuera.
El videomarcador, por partes
Dentro, con el techo y suelo retráctil instalados y en un periodo de pruebas, queda por finalizar otro de los grandes atractivos: el videomarcador de 360 grados que rodea la parte superior. Las pantallas LED llegan en barco desde Estados Unidos, y se van instalando una a una hasta completar los laterales. De momento se ha empezado con el oeste, ya avanzado. Los fondos sur y norte ya cuentan con su pantalla, aunque falta unirlas. Es otra de las joyas del nuevo estadio.
Por otro lado, los operarios avanzan con el cambio de asientos. Siguen viéndose mezclados los antiguos, azules claros y fijos, con los nuevos, azules oscuros y reclinables, van cambiando día a día por secciones, pero los nuevos empiezan a teñir la mayor parte de las gradas. También progresan con los palcos VIP, los cuales han aumentado de número considerablemente. El club se encarga de taparlos con lonas durante los partidos. Otros detalles importantes que se pueden hacer esperar son el restaurante panorámico que se colocará en una esquina del Bernabéu y el skywalk, una pasarela que rodeará el estadio por su zona alta y desde la que se podrá ver tanto el interior como los alrededores.
Como sucede en el exterior, toca adornar la parte de dentro para que quede lo más bonita posible. En algunas plantas el club ha instalado baños químicos a la espera de finalizar los fijos. Láminas de vidrio o de metal son colocadas por los operarios en los últimos días para terminar de cerrar ciertas zonas. Y mucha pintura para unas paredes llenas de polvo y bocetos típicos de reformas.
Otro de los temas que preocupaba es el césped, que ya se guarda en el hipogeo. Después de los encuentros se sumerge dividido en planchas en unas cuevas subterráneas del Bernabéu. De este modo se espera que se solucionen los problemas que existieron el curso pasado, cuando hubo que cambiarlo constantemente. Aún falta por dar con la tecla definitiva y aún existe el problema del polvo de las obras (se usan ventiladores para intentar evitarlo), aunque el estado, sin ser perfecto, es mucho mejor que la temporada pasada.
La fiesta de inauguración, en 2024
En cuanto a la inauguración, será en 2024, aunque la fecha no está fijada ni depende de las obras. Es decir, el recinto estará acabado antes de que se produzca el festejo, porque lo difícil es cuadrar las fechas disponibles (debe ser en un parón de selecciones o a final de curso). El club quiere que actúen artistas de primer nivel en una fecha tan especial y lo más complicado es adaptar las agendas deportivas con la de los cantantes.
El departamento encargado de estos actos trabaja ya en la preparación de este evento, aunque todavía no está definido exactamente cómo va a ser. En cualquier caso, la fecha no estará marcada por el final de las obras, ya que lo normal es que todo esté terminado bastante antes de que se pueda celebrar.