GETAFE 0 - BARCELONA 0

Raphinha, MVP y puñetazo al banquillo: "Tengo que saber que hay un compañero listo para entrar..."

El brasileño se enfadó tras ser sustituido por Xavi. El técnico reconoció no tener problema, sino más bien admirar la ambición de sus jugadores.

Raphinha, enfadado por el cambio./
Raphinha, enfadado por el cambio.
Jonás Pérez

Jonás Pérez

Raphinha fue el MVP en el empate entre Getafe y Barcelona en el Coliseum Alfonso Pérez. El extremo brasileño fue desbordante, chutó al poste y protagonizó el poco peligro que tuvo el equipo de Xavi en la tarde de este domingo. Pese a ello, el desgaste llevó al técnico a sustituirle en el minuto 87 para dar entrada a Pablo Torres. Y el atacante volvió a mostrar su furia, pegando un puñetazo al banquillo en un visible gesto de enfado. Tras la conclusión del encuentro, habló con DAZN para mostrar los motivos por los que reaccionó así:

"La última vez que me enfadé dije que intentaría que fuera la última, pero es difícil. Te gusta estar en la cancha y ayudar al equipo a ganar. Necesitábamos un gol para conseguir la victoria. Es normal el enfado. Estábamos empatando y molesta un poco. Hay que seguir trabajando. Hay veces que tengo que saber que hay un compañero listo para entrar y ayudar al equipo".

Xavi, sobre el cabreo de Raphinha.

En su declaración, hay dos versiones que esconden autocrítica, liderazgo y ambición. Por un lado, Raphinha muestra naturalidad a su reacción y lo argumenta en sus ganas de ver al equipo sacar los tres puntos del Coliseum. Por otro, también reflexiona sobre su actitud y la perspectiva del jugador que entra a reemplazarle. Ese "hay veces que tengo que saber que hay un compañero listo para entrar y ayudar al equipo" es el primer paso para corregir sus impulsos.

Porque no es la primera vez que sucede. Xavi le sustituyó del partido ante el United, lo que provocó su primera reacción airada. Él se disculpó: "Quiero pedir perdón a todos, a Ferran, al míster, al equipo, a los aficionados. Sé que cometí un error y no volverá a pasar, somos seres humanos. Eran solo ganas de ganar. El míster sabe que esto luego se pasa, pero a veces no controlamos los sentimientos. Volveré a pedir perdón mañana al equipo por todo lo que pasó".

Y Xavi le restó importancia: "Entiendo el enfado de Raphinha. Lo he hecho por el bien del equipo. Nunca hago cambios para señalar a nadie. me ha pedido disculpas, pero no lo tiene que hacer. Siempre pido ambición a mis jugadores y él ha sido ambicioso. A mí también me molestaba que me sustituyeran". Al partido siguiente, contra el Cádiz, el entrenador le dejó en el banquillo, aunque sí le dio minutos en la segunda mitad. Este domingo, en la misma línea: "Sin problemas. Yo les digo que hay que cabrearse. Primero con uno mismo y después con el entrenador. Para mí es importantísimo y no tengo ningún problema con eso".