REAL MADRID

Rodrygo se adueña del discurso de Benzema y del sitio de Vinicius: "El fútbol es confianza; él la ha recuperado"

El brasileño encadena tres partidos seguidos marcando, su mejor racha de blanco. No le asusta la responsabilidad que le pide el club.

Rodrygo celebra su segundo gol al Cádiz./Reuters
Rodrygo celebra su segundo gol al Cádiz. Reuters
Jorge C. Picón
Albert Blaya

Jorge C. Picón y Albert Blaya

20 minutos antes de salir a calentar, Carlo Ancelotti avisaba a Rodrygo. El brasileño, que iba a ser suplente, se tenía que cambiar para jugar contra el Cádiz. Sufría dolor en la rodilla y en los dientes, por lo que había pactado con Carletto descansar, pero no. Por segunda vez en cuestión de un mes le tocaba sustituir a un compañero enfermo. En el Nuevo Mirandilla fue Brahim y en Braga, Joselu. Ambos jugadores acusaron problemas estomacales y no pudieron comparecer. Por suerte para ellos, Rodry es especialista en esta clase de situaciones.

Desde sus primeras intervenciones se le vio suelto. Ha recuperado la seguridad en su juego en estas semanas, dejando atrás las dudas y el estrés por la falta de goles en los primeros meses de temporada. "El fútbol es confianza, y él la ha recuperado", comentaba a Relevo una persona cercana al jugador tras sus dos goles ante el Valencia.

Lo confirmó contra el Cádiz con un partido de bandera. Dos golazos, dejando a incontables rivales por el camino y con definiciones a la escuadra de Ledesma. Por último, le dio una asistencia a Bellingham, para que tampoco faltase a su cita con el gol.

Rodrygo sigue jugando para demostrarle al mundo que lo que más ha aprendido de Karim Benzema es su discurso: juega para los que saben de fútbol. El brasileño inició el curso gafado de cara a puerta, con una racha que parecía eternizarse en el tiempo y que repercutía de forma directa en su rendimiento. Brillaba menos porque la no llegada del gol entumecía sus primeros contactos, y la gente miraba con recelo a un Rodrygo que si algo tiene es paciencia. Su fútbol no varía. Ante el Cádiz, Rodry fue el MVP del encuentro como ya sucedió el pasado curso en el mismo estadio, y en ambos partidos hubo un punto en común: la ausencia de Vinicius Jr.

¿Cómo se aprovecha de la ausencia de Vinicius?

No es que Rodrygo juegue peor cuando está su compañero, sino que su rol es menor. En vez de lanzador, es un compensador, un jugador que vive dependiendo de hacia dónde va Bellingham y qué zonas quiere ocupar Vinicius una vez arranque, lo que le deja menos espacio de maniobra y le fuerza a tener que convivir en espacios que no le son tan amables para su juego.

Sin Vini, el perfil izquierdo queda liberado, y con un Mendy que no se prodiga demasiado, Rodrygo y Bellingham se reparten todo el perfil, intercambiando alturas en una cadencia que parece funcionar con naturalidad. Rodrygo ha firmado 6 regates en Cádiz con una precisión altísima, porque a diferencia de Vinícius, es menos autosuficiente, pero mucho más preciso en el último gesto. Sin Karim Benzema, Rodrygo se pone el traje de delantero que siente el juego como si no lo fuese, aunque cuando se acerca en el área nunca duda.

¿La mejor forma de contrarrestar su peor racha goleadora de blanco? Con la mejor. Nunca desde que llegó al Bernabéu había marcado en tres partidos consecutivos. Y no sólo son goles. La tendencia de líder ofensivo que pretende robarle a Bellingham se nota en su participación en los tantos del equipo. De los últimos once ha participado en nueve, recuperando influencia y acallando a los más críticos, que empezaban a dudar de su valía para el Madrid.

Rodrygo habla tras sus dos goles al Cádiz.Real Madrid TV

"Estoy muy contento. Es fruto de mi trabajo. Trabajo para eso, para marcar muchos goles y dar asistencias. Para ayudar a mi equipo como sea. La verdad es que están saliendo bien las cosas y espero seguir así", comentó en los micrófonos de Real Madrid TV tras el partido, confirmando él mismo su gran momento.

Por delante, dos meses en los que le toca mantener el ritmo. La baja de Vinicius le obliga a asumir aún más responsabilidades, pero esto no le asusta. De momento son siete goles y cinco asistencias, en búsqueda de mejorar las cifras del año pasado (19 y 11). El club esperaba de él un paso adelante esta temporada y lo está dando. Más tarde de lo esperado, pero ha llegado.