Sampaoli: "A Bryan Gil ya lo quise en Marsella. Lo llamé personalmente"

El Sevilla tiene este sábado otra final. En este ejercicio de escasez de resultados, cada victoria te ayuda a salir de la quema, a pegar ese pequeño pero gran salto que te haga ver la cornisa más lejana. Y para solucionar algunos de los problemas, su entrenador sigue reclamando fichajes, aunque desde hace semanas de manera interna. No alza la voz. Sabe que esa presión pública genera tensiones y evita pronunciarse ante los medios. Si ha hablado claramente de un viejo anhelo, Bryan Gil: "Ya lo quise en Marsella. Hablé personalmente con él en aquel momento. Es un jugador que aportaría cosas por bandas. Del deseo a la posibilidad hay una diferencia". Recientemente el Sevilla ha recibido otra negativa del Tottenham para dejarlo salir.

El gran objetivo para este mes de enero era muy claro, amarrar los puntos de casa y sacar el máximo posible de ellos fuera, algo que sólo pudo hacer en Balaídos. Jorge Sampaoli sabe que es un partido fundamental y que el cansancio tras el partido ante Osasuna, un handicap que tendrán que superar: "Hay cosas fisiológicas que no tienen solución. Desde el dominio del balón debemos correr menos. A ver qué futbolistas están en mejores condiciones. El partido es muy importante. Habrá que hacer rotaciones".

Volvió a insistir el argentino en la contundencia en las áreas. Esa falta de pegada que está condenando al Sevilla en los últimos partidos. Un problema que esperaba solucionar en este mercado pero que ha día de hoy solo puede atajarlo desde el trabajo diario con sus futbolistas: "Tenemos que mejorar en las áreas. De nada sirve dominar el desarrollo si no somos contundentes. Son situaciones donde se ganan y se pierden los partidos. Hay que trabajar con lo que tenemos para mejorar. A veces los jugadores resuelven los partidos por sí sólos. No sólo es el delantero, sería injusto pensar eso. Hay otros factores. Hay que generar más volumen y que los 6 jugadores que tienen peso en el ataque lo hagan"

Es por ello que el de Casilda sigue buscando que aquellos jugadores que regresan de lesiones, vayan entrando poco a poco la dinámica del equipo, incluso acelerando esos procesos por la necesidad. Delaney y Papu son dos ejemplos. Ambos siguen en la rampa de salida aunque de momento no han llegado ofertas concretas a la entidad sevillista. Sobre su compatriota, Sampaoli confía en que en caso de no salir, pueda recuperarlo para la causa: "Tenemos que optimizar a nuestros jugadores. Él estando bien puede hacer cosas importantes y la mejor versión viene por los entrenamientos".