Samu, el perverso verdugo que puede acabar con Paco López

La derrota del Granada ante el Alavés (3-0) puede ser la tumba de un Paco López que tiene a los suyos en penúltima posición, a dos puntos del Mallorca y a tres del Cádiz, teniendo ambos dos partidos menos. El técnico está contra las cuerdas y podría ser destituido en las próximas horas. Casualidades del destino, su posible adiós se empezó a gestar a los once minutos de encuentro y con Samu Omorodion como principal protagonista. Raúl Torrent marcó en propia portería en un centro lateral por el que pujó el delantero y acabó metiéndose en su red el centrocampista del conjunto granadino. Después ya fuera de todas dudas su autoría, anotó de cabeza el tercer gol, el que mataba finalmente al Granada.

Cruel en definitiva, ya que Samu Omorodion estaba llamado a ser un hombre clave en este Granada. De hecho, fue el propio Paco López el que insistió con él, se fijó en su valía, le subió al primer equipo y le alineó con éxito ante el Atlético de Madrid. Ya él mismo había avisado a la directiva que convenía blindarle, pero faltó tiempo ante el frenesí de los grandes equipos tras su exhibición en el Metropolitano. "Sabía que si metía hoy no iba a celebrarlo porque el Granada me lo ha dado todo y gracias a ellos estoy aquí también", expuso el delantero tras la conclusión del duelo en Mendizorroza.

El Atlético de Madrid, que le sufrió en sus propias carnes, abonó de forma exprés su cláusula de seis millones de euros. Un duro golpe para el Granada y especialmente para Paco López, que contaba con él y tenía una gran confianza en su desarrollo: "Me he quedado sin un jugador en una posición en la que andamos muy escasos. La dirección deportiva sabe que tenemos que reforzarnos".

Pese a ello, Simeone no tenía intención de quedarse en plantilla a Samu Omorodion y planteó una cesión a otro equipo de Primera para que continuara su desarrollo. Claro, que, por reglamento, no podía ser al propio Granada, por haber disputado ya minutos en partido oficial. Al no llegar a debutar con el Atlético, sí podía vestir la camiseta de otra entidad en la categoría, con lo que eso suponía para el conjunto nazarí.

El Granada no solo perdió a Samu Omorodion, sino que encima lo cedió involuntariamente a otro rival directo por la permanencia. Algo que ha pagado cruelmente en esta 14ª jornada, con una derrota que implica ocho puntos de separación entre ambos conjuntos y un 'goal average' difícil de remontar de cara a la segunda vuelta. Una historia que comenzó con un descubrimiento de Paco López, que acabó resultando una bomba de relojería en contra de sus intereses. El destino y sus cosas.

Paco López aún apura sus opciones como entrenador del Granada, aunque su situación es crítica y su negativa racha (no gana en Liga desde el 26 de agosto) no ayuda. Ni siquiera en Copa del Rey, con la eliminación forzosa por alineación indebida ante el Arosa. Solo instantes de inspiración, como el 2-2 frente al Barcelona han hecho creer en dar la vuelta a la situación.

Lo cierto es que las sensaciones no eran del todo malas, aunque los resultados son los que terminan mandando en el fútbol. Incluso Paco López ha mostrado carácter hasta el último segundo, como en la derrota por la mínima ante el Valencia (1-0), en la que se enfrentó a Hugo Duro ("como me vuelvas a mandar callar, te rompo la cara") o a un periodista por preguntarle sobre si su puesto corría peligro. Tras caer en Mendizorroza, no quiso hablar de su contrato: "Si pensara en mi situación personal, sería un egoísta. Pienso en mis jugadores y en mi afición y en lo que está sufriendo. Y en el Granada. Faltaría más que pensara en mí en la situación en la que estamos".

Queda por ver si todo ello será suficiente para seguir al menos una semana más en el puesto y asumir desde el banquillo el duelo ante el Real Madrid en el Santiago Bernabéu. En caso contrario, sería el quinto entrenador destituido de la temporada tras Setién (Villarreal), Vicente Moreno (Almería), José Luis Mendilibar (Sevilla) y Pacheta (Villarreal). También cayeron por el camino los interinos Miguel Ángel Tena y Alberto Lasarte.

Con el todavía técnico del Granada se ha mantenido una confianza plena y más cuando los resultados y las sensaciones recorrían caminos contrarios. Pero el fútbol es sumar de tres en tres y puede que a Paco López se le haya agotado el tiempo. El fútbol es así: hoy le empezó a sentenciar uno de sus pupilos aventajados...