REAL MADRID - VILLARREAL

La semana que cambió el destino de Jorge Cuenca: "El Madrid nunca se tomó en serio el interés del Barça"

El central del Villarreal estuvo en la órbita del club blanco, pero finalmente fichó por el FC Barcelona en 2017.

Jorge Cuenca, durante un partido del Villarreal./GETTY
Jorge Cuenca, durante un partido del Villarreal. GETTY
June Lavín

June Lavín

Verano de 2017. Un imberbe y prometedor Jorge Cuenca (Madrid, 1999) destacaba en las categorías inferiores del Alcorcón. Era una rara avis. Sabía que a su edad (17 en aquel entonces), con esas condiciones, lo normal era estar en el Atlético o en el Real Madrid. Pero él destacó en el conjunto alfarero, donde "estaba bien valorado" pese a unos inicios complicados: "Cuando era pequeño, antes de llegar al Alcorcón, era un poco como el 'patito feo', porque al principio estaba gordito y era un poco torpe". Quemó etapas a un ritmo vertiginoso y su eclosión no pasó desapercibida.

"Los primeros equipos en interesarse fueron el Atlético y el Valencia", recuerda su entorno. Sin embargo, las propuestas económicas no cumplieron las expectativas del Alcorcón y otros clubes entraron en escena. El Real Madrid monitoreó al central durante toda la temporada, consciente de su potencial y proyección. Pero los blancos en ningún momento presentaron una oferta en firme que certificase su interés. Hasta que apareció el Barça. 

El equipo azulgrana apostó por él, le prometió minutos en el filial ("Gerard nos aseguró toda la temporada en el Barça B y algunos partidos en Youth League", explican) y realizó una propuesta que, económicamente, satisfizo al Alcorcón. Previamente había estado dos meses apartado de la dinámica del club alfarero por no renovar. "Estuvo entrenando con el primer equipo para un partido de Copa del Rey y, al final, deciden no convocarle", cuentan.

"El Madrid no se tomó en serio el interés del Barça"

El Real Madrid no dio credibilidad al interés del Barça: "No se lo tomaron en serio hasta la última semana. Esos últimos días, el Madrid le invita [a Jorge] a Valdebebas para conocer las instalaciones y tenemos que parar en un VIPS a medio camino porque ya había firmado por el Barça y decidimos no ir". Incluso directivos del conjunto blanco estuvieron a punto de desplazarse a Ávila para charlar personalmente con Jorge Cuenca después de firmar por el Barça: "Querían ir a Ávila, donde Jorge pasa las vacaciones, para hablar con él, pero el padre [de Jorge] no les dejó".

Finalmente, el central recaló en el Barça y dejó alrededor de 400.000€ en las arcas del Alcorcón. Firmó un contrato de tres años y otros dos opcionales con el club azulgrana (y una cláusula de 30 millones), se revalorizó y su rendimiento, al igual que su eclosión años atrás, tampoco pasó desapercibido. Ante la dificultad para llegar al primer equipo culé, decidió apostar por el Villarreal, que abonó una cantidad cercana a los 3 kilos por hacerse con sus servicios. "Los equipos grandes van por otro lado, pero tenía nivel de sobra para haber llegado al primer equipo", reconocen.

Fijo en los planes de Marcelino en el Villarreal, tuvo que salir cedido en busca de minutos y rodaje: primero probó suerte en el Almería y, después, en el Getafe. Allí hizo la mili y demostró estar preparado para retos mayores. Ya en las filas del submarino amarillo, esta temporada se ha convertido en un fijo para el técnico asturiano. Eso sí, el inicio fue complicado y la competencia en el eje de la zaga, feroz: Gabbia y Mandi también se postularon como acompañantes de Albiol. Esta temporada ha participado en 14 encuentros (1.176 minutos) y anotado un gol. Esta jornada, así, se reencontrará con el equipo por el que pudo fichar hace seis años.

David, su hermano, juega en el Real Madrid C

Cuando el Real Madrid tuvo en el radar a Jorge Cuenca, su hermano David militaba en el Cadete A blanco. Comparten posición, pierna hábil (izquierda) y conceptos defensivos, aunque el pequeño de la saga también puede jugar como lateral izquierdo. De hecho, el curso pasado regresó a La Fábrica tras una etapa de dos años en las categorías inferiores del Almería, club en el que también estuvo Jorge.

El padre de Jorge, además, también estuvo estrechamente ligado al deporte y formó un club de fútbol sala para participar en una liga amateur de Madrid. Vestía de amarillo, de ahí que la familia del central le comprase las equipaciones del Villarreal para animar a su padre.