BAYERN 2 - REAL MADRID 2

Tres partidos, una lesión y unas declaraciones que despiertan las dudas sobre el estado de Bellingham

El inglés, desacertado en la eliminatoria ante el City, pasó de puntillas en Múnich. Varios factores le han hecho reducir drásticamente su nivel.

Bellingham, durante el calentamiento en el Allianz Arena. /AFP
Bellingham, durante el calentamiento en el Allianz Arena. AFP
Manuel Amor

Manuel Amor

Decidió el Clásico hace sólo 10 días con un remate en el 91' que abrochó la Liga, pero los goles no tapan que Jude Bellingham (20 años) ha bajado sensiblemente su nivel desde hace varias semanas. El inglés, que no se encontró ni en la ida ni en la vuelta ante el City, volvió a cuajar un partido gris en Múnich y fue sustituido en el 75'. Minutos atrás le habían acechado los calambres. "Le cambié porque no podía más", aclaró después Ancelotti. El jugador ya había deslizado que se sentía "agotado" durante la entrega de los Premios Laureus hace una semana, aunque en ese caso se refiriese a los "días de locos" que vivió el equipo tras eliminar a los de Guardiola y ganar al Barça.

La realidad es que la versión del británico ha descendido enteros con respecto a la de la primera mitad de la temporada, cuando maravilló con sus dianas y su aportación al juego. La merma numérica resulta evidente (17 tantos con el Real Madrid en 2023, cuatro en 2024) y también que su aportación al ataque y en la creación ha decrecido. En el Allianz no remató, generó sólo una ocasión y se mostró impreciso a la hora de enganchar y dar continuidad a los desmarques de Vinicius y Rodrygo.

En su pequeña caída, que puede entenderse como algo lógico por su edad, la carga de la temporada y porque sus cifras a comienzos de curso fueron simplemente de extraterrestre e imposibles de mantener, han influido varios factores. El primero, y al que el propio futbolista ha recurrido en sus últimas comparecencias, es la lesión de tobillo que sufrió en el mes de febrero. En el 4-0 al Girona estuvo "a un milímetro" de padecer una rotura de gravedad y se llevó a casa un esguince de alto grado que le apartó de la competición durante dos semanas. Desde su regreso nada ha vuelto a ser igual.

Ancelotti habla sobre el momento de forma de Bellingham tras el empate en Múnich.

Reapareció precisamente en Valencia, en la visita con polémica a Mestalla, y vio una roja por su 'it's a fucking goal' que le dejó otras dos semanas en la grada. El propio Jude ya se había referido a ello antes del choque frente al City en el Etihad: "Me mató la lesión contra el Girona en el tobillo. Cuando superé el dolor, jugué contra el Valencia y marqué un gol, pero me sancionaron. Me ha afectado al ritmo que tenía. He tenido que cambiar algunas cosas, ahora trabajo un poco más para el equipo, y eso me quita algo de eficacia. No me importa la crítica, me hace más fuerte".

El virus, la explicación del xG y un 'ogro'

El centrocampista también arrastra el virus que le azotó la semana pasada y que le hizo estar a punto de no viajar a San Sebastián para medirse a la Real. De primeras, de hecho, se quedó fuera de la convocatoria, pero su leve mejoría le hizo solicitar entrar en la lista... para no jugar ni un minuto. El club y el cuerpo técnico entendieron su gesto como toda una demostración de profesionalidad, compromiso y liderazgo.

En la entidad y en el vestuario nadie duda de Jude, ejemplar en su comportamiento desde que puso su primer pie en Valdebebas. Le adoran los veteranos; presume de su profunda amistad con jóvenes como Vinicius, Rodrygo, Tchouameni, su 'hermano' Brahim o Camavinga; y recibe como nadie a los canteranos del Castilla y el C que suben a entrenarse, siempre amable e integrador y sin aires de estrella. Por eso, y sobre todo por el talento y la inteligencia que ya ha demostrado y que le colocan entre los favoritos al próximo Balón de Oro, todos confían en que llegará en un buen momento al tramo final. Ancelotti, tras el empate en Alemania, mostró su plena confianza en recuperarle: "La lesión le ha afectado mucho, pero creo que va a recuperar una versión óptima muy pronto. En la vuelta estará al cien por cien".

LOS NÚMEROS DE BELLINGHAM YA NO SON EXCEPCIONALES

El bajón que más llama la atención, el de los goles, se explica (por muy simple que parezca) a través de una caída en sus porcentajes de efectividad. Los datos muestran que pisa el área prácticamente en idénticas proporciones que antes, y que en la primera vuelta presumía de cifras extraordinarias y ahora se queda en números simplemente positivos para un futbolista de su demarcación. Durante las primeras jornadas de Liga, Bellingham llegó a convertir un 77,7% de sus remates, unos datos sin parangón. Ahora se mueve en torno al 15%.

En atención a sus molestias y a la escasa importancia del duelo de este sábado frente al Cádiz (16:15, M+ LALIGA TV), no parece descartable que Ancelotti opte por una rotación masiva como la que practicó en el Reale Arena. Bellingham, en ese caso, tendrá todas las papeletas para descansar. El Madrid le necesita en forma ante el Bayern, el ogro particular de Jude: en nueve partidos no le ha metido ni un solo tanto... y tampoco le ha ganado (dos empates, siete derrotas).