REAL MADRID - CÁDIZ

Un último Nacho contra Álex para cerrar un círculo... ¿y abrir otro?

Los hermanos Fernández se enfrentarán por última vez en España. Nacho tiene tomada la decisión de irse del Madrid; el futuro de Álex en Cádiz, incierto.

Álex y Nacho Fernández disfrutaron de un tiempo juntos en la ida en el Nuevo Mirandilla./
Álex y Nacho Fernández disfrutaron de un tiempo juntos en la ida en el Nuevo Mirandilla.
Manuel Amor

Manuel Amor

Cada paso, cada entrenamiento y cada partido ya huelen a despedida para Nacho Fernández, que a sus 34 años y después de 23 vistiendo una sola camiseta ya empieza a vislumbrar un futuro lejos del Santiago Bernabéu. El central tiene tomada la decisión de marcharse a final de temporada y, como informó Relevo, su preferencia pasa por afrontar después una aventura exótica.

El canterano tiene este sábado una oportunidad más para hacer historia antes de irse. Si el Real Madrid gana al Cádiz (16:15) y el Barcelona pierde o empata en Girona a las 18:30, los blancos conquistarán su Liga número 36 y el 25º título en las vitrinas de Nacho. De ser así, el zaguero igualará a Marcelo y Benzema como el futbolista que más trofeos ha levantado de blanco (Modric, que ahora tiene 24, completaría el cuarteto).

De aquí al final de curso todavía tendrá la oportunidad de redondear su aventura con la Champions, que, además, levantaría desde el palco de Wembley por su condición de primer capitán, uno de los factores que le animaron a quedarse en el Madrid cuando las dudas le asolaban al término del pasado ejercicio. En ese caso, Luka y él dejarían atrás a Marcelo y Karim y se quedarían en lo alto del Olimpo.

Su último cara a cara con su hermano, al menos, en España

Nacho se postula para formar parte del once esta tarde, acompañado de Militao y dando descanso a Rüdiger, en una cita muy especial para él y para su familia: el último cara a cara en España contra su hermano Álex, al que ya se ha medido en siete ocasiones y con balance muy favorable para el madridista (cuatro victorias, dos empates y una derrota). Crecieron juntos en el Castilla, con un ascenso a Segunda a sus espaldas, y después sus caminos se bifurcaron.

Nacho y Álex, en la cantera del Real Madrid.
Nacho y Álex, en la cantera del Real Madrid.

Quién sabe si algún día se podrán volver a juntar. Toda vez que Nacho acapara intereses de equipos árabes y de la MLS, Álex también recibió meses atrás los cantos de sirena de proyectos en el extranjero (Japón y Arabia) que pretendían sacarle de Cádiz a mitad de temporada. Finalmente se quedó y, aunque todavía tiene contrato hasta 2025, su futuro en caso de descender a Segunda es una incógnita. El peso del centrocampista ha ido a menos esta campaña (sólo un 36% de presencias en el once inicial).

Sus motivos para marcharse serían diferentes a los de su hermano, que no ha perdido tanta importancia en los planes del entrenador. De hecho, y aunque gracias en parte a las lesiones de Militao y Alaba, es uno de los futbolistas con más minutos de la plantilla (2.594'), algo con lo que no se conforma. En Múnich fue titular, le sustituyeron... y recibió el cambio como un 'feo'.

Su caso empezó contra el Valencia en Mestalla. Después de tres titularidades, Ancelotti lo dejó en el banquillo para apostar por Tchouameni. Era la primera vez y al madrileño no le sentó nada bien. Dos semanas después, contra Osasuna en el Bernabéu, repitió Tchouameni junto a Rüdiger. Y también contra el Manchester City de nuevo en casa, en el partido más importante del curso. Había captado y aceptado el mensaje, no sin frustración al ver que no se contaba con él. Por ello, la vuelta contra los ingleses le sirvió como reivindicación.

Esa, entre otras causas, le han llevado a tomar la decisión de marcharse a final de temporada. Él es feliz en Madrid, la ciudad de sus amores, y en el club donde lleva 23 años y actualmente porta el brazalete de capitán. Pero mantiene intacta la competitividad y le duele cuando no juega. Lo dicho: no sólo se trata de lo deportivo. También existe una reflexión personal y familiar para probar nuevos retos. Lo hará... pero antes disfrutará de un último enfrentamiento nacional con Álex para, después, hacer historia si el Madrid es campeón.