El trabajo de Valencia y Real Madrid para bajar la tensión antes del regreso de Vinicius a Mestalla: "Muy bien, Carlo, ahora sí"

La semana ha sido tensa como se podía esperar. Vinicius vuelve hoy a Mestalla y desde hace días solo se habla de eso tanto en la capital de España como en la capital del Turia: que si polémicas racistas recordando el episodio del año pasado, exageraciones de lo ocurrido, rechazo del Valencia a Netflix, discusiones en redes sociales entre aficionados.... Esa tensión que se ha vivido fuera de lo que son Real Madrid y Valencia como tal dista mucho de lo que han intentado los clubes.

Porque como bien se dice "la noche es más oscura justo antes del amanecer" y al episodio oscuro que han vivido Valencia, Real Madrid y el propio Vinicius, le han acompañado en los últimos días los primeros rayos de luz por parte de los verdaderos implicados: los clubes. El Valencia ha sido implacable contra el racismo desde el día uno, esta semana en todas las entrevistas de los jugadores el discurso ha sido el mismo: Vinicius fue la víctima del incidente. No ha habido conato de caldear el partido por parte de los che... Y el Real Madrid no se ha quedado atrás.

"El Valencia lo hizo muy bien expulsando a los racistas, los localizó y los echó", señalaba ayer Carlo Ancelotti en sala de prensa. Las palabras sentaron como flores en el club blanquinegro. "Muy bien Carlo, ahora sí", esgrimían a este medio fuentes oficiales. En Mestalla sentó especialmente mal que el italiano dijera al término del partido en 2023 que fue "todo Mestalla" el que gritó "mono" a Vini, y no los tres implicados que fueron expulsados. Carlo ya se disculpó en su día y ayer incidió en su mensaje para aligerar tensiones.

A todo ello se le suma que las relaciones entre directivas de Valencia y Real Madrid están lejos de ser malas. De hecho, son notables. Durante el verano y en enero, el Madrid no puso problema alguno en la negociación por Peter Federico a pesar de que tenía mejores ofertas sobre la mesa. Es más, aceptaron la rebaja de opción de compra que propuso el Valencia de cuatro a dos millones. Las directivas de ambos clubes y LaLiga han trabajado en común durante todo el mes para tratar de rebajar tensiones cara al partido, con contactos fluidos entre las tres partes durante el mes de febrero para que a la cita se llegue con la crispación reducida. Es un día importante para la patronal, que este viernes celebró en Valencia un evento con la mayoría de sus patrocinadores, que acudirán al encuentro. Será, por tanto, una noche de exposición y, por eso, la implicación ha sido aún mayor a la habitual.

En adición a todo lo dicho, el ambiente cogerá un tono más dulce y emotivo cuando antes del partido se homenajee a las víctimas del trágico incendio vivido en Valencia hace unas semanas. No solo habrá un minuto de silencio, sino que los bomberos que atendieron el incendio así como el conserje que avisó puerta por puerta a los vecinos, asistirán gratuitamente al feudo a presenciar el partido: "Nos solidarizamos mucho con ellos", señaló ayer Ancelotti tratando de nuevo de rebajar las tensiones.

Así que viendo el trabajo del propio Valencia CF, del Real Madrid, de LaLiga e incluso de Carlo Ancelotti por rebajar las tensiones, ahora solo queda que la grada de Mestalla y Vinicius hagan lo que mejor saben hacer. Rubén Baraja lo definió a la perfección: "Espero un Mestalla que apriete como siempre ha hecho durante 104 años desde el respeto", espetó, "y un Vinicius que es un extraordinario jugador, de los mejores de su equipo, que se centre en lo deportivo". Que se así sea.