SEVILLA FC

La vuelta a la rutina de Jesús Navas... con el dolor por dejar el Sevilla: "Cuando me acerco se me remueve todo"

"Es mi Sevilla, lo sufro más que nadie", reconoce el palaciego. La bicicleta y la familia, las bases de su 'nueva vida'.

Jesús Navas durante su despedida en el Sánchez-Pizjuán./Reuters
Jesús Navas durante su despedida en el Sánchez-Pizjuán. Reuters
José Manuel Rodríguez

José Manuel Rodríguez

Decir adiós no es fácil. En absoluto. Menos aún cuando aquello de lo que te despides es tu vida. Que se lo digan a Jesús Navas. Y al fútbol... y a su Sevilla. En pocas ocasiones se le ha podido ver públicamente junto a sus, ya, antiguos compañeros, pero el espíritu del palaciego sigue estando muy vigente. Aunque no de forma física.

Tras su despedida del Sánchez-Pizjuán, Jesús Navas comenzó una vuelta a la vida normal. Aunque para él no lo es tanto, pues lleva desde bien pequeño dedicándose en cuerpo y alma a su Sevilla, no está siendo sencillo para el palaciego. Con el ciclismo como gran aliado -fanático de Pogačar y aficionado a rodar con la bicicleta-, el eterno capitán de Nervión sigue dando pasos paulatinamente.

No hace nada especial con su vida, pues se trata de una persona que siempre ha destacado por su sencillez. La familia es lo más importante para él. Pero está cumpliendo con su palabra: no ha dejado solo al Sevilla. Aunque le cueste enormemente. "Intento ir de vez en cuando, al final ir todos los días para mí es difícil porque es mi vida y cuando me estoy acercando a la ciudad deportiva se me remueve todo", comentó en los premios de la Federación de Periodistas Deportivos de Andalucía.

Y es que únicamente en la semana en la que el Sevilla recibía al Barcelona se le pudo ver sobre el césped con sus compañeros. Vestido de calle y apoyando desde dentro. Va poco, pero cuando está todos le guardan un respeto mayúsculo, como no podía ser de otra forma. Nadie siente el escudo como él: "Al final, es mi Sevilla, lo sufro más que nadie y estoy siempre dándole fuerza para que todo vaya bien".

Jesús Navas, además, es el primero en mandar el mensaje de ánimo o felicitación por el grupo del equipo. Es único. Para todo. Pero sin un rol determinado por el momento. Prefiere dejar pasar el tiempo, alejarse para volver a encontrarse. "Estoy tranquilo ahora mismo, pensándolo y cuando me toque, pues ya llegará". Con calma y paciencia, midiendo los pasos exhaustivamente. Como cuando era futbolista.

Mientras, Navas se refugia en los suyos... y en lo suyo. "Siempre me gusta hacer deporte, bicicleta y estar con la familia. Al final es complicado, tras toda tu vida haciendo fútbol. Es una decisión por la cadera, que ya era complicado. Ahora, a disfrutar de esta nueva etapa".

Nadie le mete prisa. Su tiempo le pertenece. Se lo ha ganado a pulso. Más que nadie. Jesús Navas González, la mayor leyenda en la historia del Sevilla Fútbol Club.