Piqué quiere volver a jugar al fútbol en su Andorra

"...Y ahora que los sueños de aquel niño ya se han cumplido, quiero deciros que he decidido que es el momento de cerrar este ciclo. Siempre he dicho que después del Barça no habría ningún otro equipo y así será. Este sábado será mi último partido en el Camp Nou...". El 3 de noviembre del ya año pasado, Gerard Piqué irrumpía sorpresivamente en la actualidad informativa anunciando su adiós. Su pérdida de protagonismo en el Barça de Xavi Hernández le habían hecho reflexionar que había llegado el momento. Así, de repente, en mitad de la temporada, en mitad de una semana. Un jueves de anuncio y un sábado de homenaje merecido, el 5 de noviembre, contra el Almería ante su afición. "Volveré", decía en su emotivo vídeo del adiós mirando al palco del Camp Nou.

Tres días después de ese partido, Piqué se sentó 90 minutos en el banquillo de El Sadar, con los suplentes, como venía siendo habitual en la temporada. En un partido caliente, él no quiso dejar de ser protagonista y acabó enfrentado en el césped con el colegiado Gil Manzano. Después llegó la sanción de cuatro partidos que todos pensamos que no cumpliría nunca.

Pero lo que Piqué quiere ahora es volver a jugar, aunque en Segunda. En su Andorra . Quiere autoficharse. Algo parecido a lo que ha conseguido Marc Gasol con el Bàsquet Girona, pero con algunas complicaciones sobrevenidas ya que el control económico del fútbol profesional implica muchas más restricciones que en el baloncesto.

¿Puede contratarse para el equipo que preside? Sí, pero es muy complicado. Hay dos impedimentos muy poderosos, ambos relacionados con el férreo control económico de LaLiga. El primero es el salario, que en el caso de Piqué esta última temporada superaba ampliamente los 20 millones de euros. De hecho, se acercaba bastante a los 30.

El Andorra, aunque su dueño -el propio Piqué- quiera, no puede pagarle el salario mínimo de Segunda división. Realmente puede, pero LaLiga tendrá que decidir en cuánto se lo valoran. No le dejarían inscribirlo. El sueldo de Piqué tiene que pasar por un Comité de Valoración de LaLiga que tendrá que decidir en cuánto valoran, a efectos de tope salarial de plantilla, qué le puede 'costar' al Andorra contar con un jugador así.

Este Comité de Valoración, compuesto por tres profesionales independientes ajenos a LaLiga, ya ha tenido que intervenir en otros casos. Futbolistas que aceptaron disminuir drásticamente sus salarios para fichar por el club que querían. Y no fue tan fácil. ¿Cómo funcionan? LaLiga le facilita a este Comité los contratos del jugador y los partidos que ha disputado para que ellos tengan todos los datos para elaborar su valoración, así como toda la información que requieran.

Normalmente este comité suele aceptar que fichen por la mitad del salario que venían percibiendo sin demasiado problema, pero en casos especiales como estos… exige mucha más revisión. Suponiendo que Piqué ganaba 20 millones, el Andorra nunca podría pagarle 10. Ni 5. Y aquí viene la segunda de las causas.

El Andorra tiene para este año un tope salarial de 6,529 millones de euros para pagar a sus jugadores. Aunque el Comité de Valoración aceptase que se autopagara una ficha de 2 millones de euros, no podría sostenerla. El equipo que entrena Eder Sarabia no ha gastando todo ese límite de plantilla de 6,5 millones, pero desde luego no les sobran 2 o 3 millones para hacerle hueco a Piqué.

¿Qué podrían hacer? "Se puede hacer, pero es laborioso y caro". Piqué, si se empeña, puede contratarse para el Andorra. Pero tendrá que hacer sus propias 'palancas'. La primera y más sencilla sería, casi seguro, una ampliación de capital.

Pero de nuevo la normativa no le favorece. Según la regulación de LaLiga no pueden ampliar su capital ilimitadamente. Como máximo permiten hacerlo en un 25% de tu volumen de negocio. El del Andorra rondará los 10 millones así que, como mucho, podrían ampliar capital unos 2,5 millones. ¿Sería suficiente eso para LaLiga? Seguramente no.

¿Y qué más podría hacer? Muy fácil: nuevos ingresos. Algún nuevo patrocinio que aumente el tope salarial del club. Haciendo estos dos movimientos que, repetimos, no son sencillos (una auditora externa, Nielsen, tendría que certificar el patrocinio y su valoración real), Piqué podría jugar en su Andorra.

 La 'retirada' leyenda culé todavía forma parte del Barcelona. Aparece inscrito tanto en la web oficial de LaLiga, como en la del Barça. Como se ha comentado, está sancionado con cuatro partidos. El reloj cuenta, los partidos pasan y si Piqué tarda en autoficharse por el Andorra y el Barça todavía no le da de baja oficialmente, la sanción desaparece. De momento, solo ha cumplido uno, el del derbi contra el Espanyol del pasado viernes. El choque de Copa de este miércoles ante el Intercity, el duelo liguero ante el Atlético de Madrid del próximo domingo y la semifinal de la Supercopa de España ante el Betis del jueves 12, serían los tres restantes. El 15 de enero, fecha en la que el Andorra juega en Burgos, estaría libre de sanción.

Luego está la realidad del día. ¿Podría Piqué acostumbrarse a viajes y concentraciones de tres días para jugar contra, por ejemplo, la Ponferradina? El club entrenado por Eder Sarabia muchas veces viaja primero cerca de Reus para concentrarse y volar el día antes del partido, entrenarse por la mañana y estar ya en la ciudad del encuentro.

No es una idea que se le acabe de ocurrir a Piqué hace unos días. Lleva rondando esa situación desde hace tiempo y él es el primero que tiene muy claras la dificultades y hasta los pasos que tendría que dar para conseguirlo (ampliación de capital incluida). Vamos a ver si consigue concretarlos.