FUNDACIÓN XANA

La Fundación Xana de Luis Enrique va mejor incluso que el PSG: "Nuestra vida cambió de repente y su acompañamiento es increíble"

Hace un año que el técnico asturiano presentó en sociedad su proyecto benéfico.

Luis Enrique es uno de los patronos de la Fundación Xana. /FUNDACIÓN XANA
Luis Enrique es uno de los patronos de la Fundación Xana. FUNDACIÓN XANA
Marc Mosull

Marc Mosull

El Paris Saint-Germain va como un tiro. Sin Kylian Mbappé, pero con la fuerza del colectivo y un Ousmane Dembélé estelar, el equipo de Luis Enrique está jugando y compitiendo mejor que nunca. Y apenas ha perdido un partido en lo que va de 2025; además, intrascendente porque fue contra el Liverpool en casa y terminó clasificándose en Anfield. La machada de los parisinos contra los reds les metió en cuartos de Liga de Campeones y les convirtió en uno de los principales favoritos a levantar la Orejona, que sería el colofón a un año de ensueño en el que podrían ganarlo todo, pues ya tienen la Supercopa francesa en sus vitrinas, la Ligue 1 en el bolsillo -el OM, segundo, está a 19 puntos- y están en semifinales de la Copa.

El año de la Fundación Xana, que se presentó en sociedad el 21 de marzo de 2024, es incluso mejor que el del equipo que dirige Luis Enrique, patrono de la fundación junto a su mujer Elena Cullell. "Ha sido muy intenso y durante este tiempo hemos podido acompañar de forma integral a más de 30 familias que sufren el impacto de la enfermedad de sus hijos e hijas", explica Bela Cullell, hermana de Elena y directora del proyecto, de carácter familiar.

"Inspirado en la sonrisa de Xana", la hija del entrenador del PSG que falleció en 2019 cuando apenas tenía nueve años, la fundación se creó para ofrecer asistencia integral y acompañamiento a niños y jóvenes afectados por enfermedades oncológicas y otras dolencias graves, y al resto de miembros de la unidad familiar, que suelen ser los grandes olvidados cuando una enfermedad golpea a un ser querido. "En nuestro caso, tuvimos la suerte de poder dejar nuestros trabajos y dedicarnos cien por cien a Xana en su proceso, pero muchas familias no tienen recursos para hacerlo. Queremos ayudarles", manifestó el asturiano, cuando presentó la iniciativa, hace justo un año, a través de su canal de Twitch.

Acompañamiento a todos los niveles

El acompañamiento es integral y se lleva a cabo a través de diferentes programas de intervención; desde proporcionar alojamiento -actualmente, hay cuatro familias, con pocos recursos, que viven en pisos financiados por la fundación-, contribuir en la economía y logística familiar y atender a los diferentes miembros de la unidad familiar hasta hacer un acompañamiento emocional durante la enfermedad o el final de la vida y la gestión del duelo.

La Fundación Xana ofrece sesiones de fisioterapia y arteterapia, una innovadora actividad creativa y espontánea dirigida por terapeutas para los niños y niñas afectados por enfermedades severas, que les permite expresarse a través de la plástica, serenar sus emociones, conectar con sus emociones y, por encima de todo, desconectar de su padecimiento. A lo largo de este año, la fundación ha llevado a cabo 70 sesiones de este tipo y 52 de fisioterapia. "Hemos realizado mucho trabajo y somos conscientes de que nos queda por delante muchísimo más por realizar", declara Bella Cullell.

La fundación también financia un pediatra especialista en acupuntura oncológica en la Unidad de Oncología Pediátrica Integrativa del Hospital Sant Joan de Déu, cuya filosofía es compartida por la Fundación Xana, y destina el 15 por ciento de su recaudación anual al Pabellón de la Victoria, impulsado por la Fundació Enriqueta Villavecchia, que será el primer hospice infantil del país, un lugar dedicado a las curas paliativas y al acompañamiento de los más pequeños y sus familias durante los últimos días de la enfermedad.

"Todo el equipo de la fundación y los patronos, Elena, Luis, Pacho y Sira, estamos muy contentos y felices de ver que en solo un año la fundación ha sido capaz de arrancar muchos proyectos y ayudar a tantas familias", lo sintetiza Bela Cullell, con satisfacción por el trabajo realizado.

«Estás luchando con tu vida»

Las familias que se ven golpeadas por una enfermedad grave no solo aprenden a lidiar y convivir con el sufrimiento y la angustia de la propia dolencia, sino que también deben adaptar su vida y modificarla para focalizar sus esfuerzos. Lo sufrieron en sus propias carnes Ximena, la primera niña que fue acompañada por la fundación, y sus seres queridos.

"No sabíamos qué hacer. Es un cambio total, lo dejas todo y te concentras en luchar para salir adelante, en luchar por una vida. Yo acompañaba a mi hija, que día a día luchaba por sobrevivir. La enfermedad afecta de forma directa a una persona, pero cambia todo el círculo, en nuestro caso a nuestros otros dos hijos y por supuesto a nosotros, los padres. Cuando aparece una enfermedad dejas tu vida normal y te adaptas a la nueva hasta que la niña se recupere", cuenta Rosa, madre de Ximena.

"Nosotros hemos recibido de la Fundación Xana un acompañamiento global, el apoyo que necesitábamos en este momento. Nos han asistido a muchos niveles y nos ha ayudado un poco a salir del círculo en el que estábamos. Estamos muy agradecidos porque además de ayudarnos lo han hecho con mucho amor. La enfermedad que mi hija sufre apareció de un momento a otro. Nuestra vida cambió de repente y desde el primer momento nos han brindado un acompañamiento increíble. Todas las personas de la Fundación que se acercan a nosotros lo hacen con mucho amor y cariño, y no solo a Ximena, sino a todos nosotros", desgrana con agradecimiento Rosa, la madre de la pequeña, que el pasado mes de febrero pudo regresar al colegio. Una auténtica victoria para la Fundación Xana.

La reflexión de Luis Enrique que se hizo viral

No son pocos los que conocieron la Fundación Xana a través de la serie documental de Movistar Plus+ sobre Luis Enrique, No tenéis ni **** idea, cuyos beneficios fueron destinados a la fundación. En el último capítulo de su serie, el asturiano hizo una valiente reflexión sobre la pérdida de la pequeña y el posterior duelo.

"Los procesos de la vida son los que más te enseñan. ¿Yo me puedo considerar afortunado o desgraciado? Yo me considero afortunado. Muy afortunado. 'Pero sí se te ha muerto tu hija a los nueve años'. Mi hija vino a vivir con nosotros 9 años maravillosos; tenemos mil recuerdos, vídeos, cosas increíbles. Mi madre no podía tener fotos de Xana, hasta que llegué un día a casa y le dije '¿por qué no hay ninguna foto de Xana, mamá?'. 'No puedo, no puedo'. 'Mamá, tienes que poner a Xana. Xana está viva'. En el plano físico no está, pero sí en el espiritual. Cada día hablamos de ella, y nos reímos, y recordamos. Pienso que Xana todavía nos ve. ¿Cómo quiero que Xana piense que vivimos esto?", manifestó Luis Enrique, con una sonrisa.

Las palabras del entrenador español calaron hondo entre los telespectadores y se viralizaron en redes, donde el clip alcanzó más de cuatro millones de visitas. Y la sonrisa de su hija inspiró a una fundación familiar que, apenas un año después de presentarse en sociedad, ya ha acompañado a más de 30 niños y niñas con enfermedades graves y a sus familias. Y las que quedan.