André Silva, la undécima apuesta en una década para el 'nueve' realista
El club txuri-urdin vuelve a incorporar un delantero, algo que se ha convertido en habitual en los últimos diez años de consolidación en la élite.

La Real tiene nuevo delantero: André Silva. Una gran apuesta en una posición que ha visto pasar a muchos 'nueves' y que explica el crecimiento del club. El internacional portugués llega en calidad de cedido con una opción de compra, como ha hecho oficial el conjunto donostiarra esta mañana, que este curso disputará la Champions League y ha querido tener en su nómina a un futbolista contrastado a nivel europeo. Para llegar hasta aquí, hay que retroceder una década.
Todo comenzó con Imanol Agirretxe. Con un delantero de la casa que se destapó como un gran goleador en la temporada 2012-13, consiguiendo llevar a la Real Sociedad a la Champions League junto a otros dos atacantes de máximo nivel: Antoine Griezmann y Carlos Vela. Aun así, el salto a la máxima competición europea exigía un refuerzo y llegó un joven, quizá desconocido aún. Haris Seferovic, que debutó a lo grande en una previa europea ante el Olympique de Lyon y que después se fue apagando con el paso de las jornadas. Desde el suizo hasta hoy han pasado diez años y once delanteros en busca de una Real de Champions.
Hoy, en 2023 y a las puertas de una nueva participación en la élite continental, aterriza André Silva, un internacional portugués que ha combinado excelentes temporadas en Portugal o Alemania, con otras más discretas. Pero con fútbol en sus piernas y en su cabeza -es un excelente rematador de área- para ser referencia de un equipo grande. Y la Real lo es hoy en día gracias al trabajo minucioso de un club que ha ido creciendo con los años.
🔥 Hay un nuevo 𝐊𝐈𝐋𝐋𝐄𝐑 en la ciudad#AurreraReala pic.twitter.com/UdiaFg4vWD
— Real Sociedad Fútbol (@RealSociedad) August 2, 2023
Volvamos una década atrás. Con la sensación de que Seferovic había fallado, el club apostó la siguiente temporada por Alfred Finnbogason. El islandés llegaba de Países Bajos, donde se había destapado como un extraordinario goleador. Tampoco funcionó en San Sebastián. Frío, siempre quedó la sensación de que había más jugador que gol en sus piernas y como con Seferovic, se apagó la ilusión con los partidos. Las dos apuestas de la dirección deportiva que entonces lideraba Lorenzo Juarros no habían funcionado y se cambió el patrón.
De firmar jugadores semi desconocidos de ligas extranjeras, la apuesta fue la de futbolistas contrastados en LaLiga. Jonathas de Jesús firmó como nuevo jugador de la Real Sociedad en 2015, tras un fructífero paso por el Elche, en el que anotó 14 goles. Por momentos convenció su fútbol, pero apenas un año después de firmar un contrato por cinco temporadas fue traspasado al Rubin Kazan. El elegido, ahora, era Willian José, con paso por la cantera del Real Madrid y un buen rendimiento en Zaragoza y en Las Palmas.

En este caso, el brasileño sí cumplió con las expectativas. Cinco temporadas y 62 goles hablan bien de él en su paso por San Sebastián, aunque las últimas temporadas comenzase a desaparecer de los onces iniciales. Compartió ataque con otra apuesta española, Juanmi, quien disputó tres campañas en la Real y celebró una treintena de goles antes de abandonar el club dirección Sevilla. Casualmente, ambos comparten vestuario en el Betis.
Cambio de dirección deportiva
Sin embargo, en la Real llegaron cambios importantes en 2018 con el aterrizaje de Roberto Olabe como Director de Fútbol. Hubo un cambio de guion y se comenzó a una 'limpieza' de nombres, con nuevas apuestas. De nuevo, la delantera recibiría apuestas jóvenes. Sandro Ramírez fue el primer intento, pero no funcionó. Y llegó el gran acierto.
Un nombre destaca por encima de todos en esta lista por el superávit que supuso en materia económica y por su rendimiento. Alexander Isak aterrizó en San Sebastián como un joven con muchísimo potencial, alternando titularidades con Willian José hasta que se hizo con el puesto de manera fija. Su crecimiento fue tal que el curso pasado fue vendido al Newcastle por 70 millones de euros, siendo una de las mejores operaciones de la historia del club txuri-urdin.
Alexander Isak fue la apuesta de Roberto Olabe y funcionó a la perfección con 44 goles y un traspaso de 70 millones de euros al Newcastle, el más alto de la historia del club.
El sueco también compartió delantera con Alexander Sorloth y Carlos Fernández. El primero en calidad de cedido durante dos campañas, siendo importante sobre todo en la pasada, y el segundo como una apuesta firme con un contrato hasta 2027. Las lesiones han lastrado su rendimiento y han obligado al club a seguir haciendo apuestas en esa demarcación, más allá de la de Umar Sadiq.

El nigeriaro llegó para tapar el hueco que dejó Isak el curso pasado. Una operación rápida, con un desembolso importante (20+5 millones de euros, el más caro de la historia) para fortalecer al equipo. La lesión de ligamentos cruzados sufrida en septiembre tampoco le dejó brillar, algo que ha generado dudas para este curso. Así se ha llegado a la situación actual, con un club en crecimiento necesitado de goles que se ha abrazado a André Silva como la undécima apuesta para la delantera en una década. ¿Funcionará? El tiempo dirá si brilla y el club hace efectiva la opción de compra que incluye su cesión desde el Leipzig. Por lo menos, ya sabe lo que es marcar en el Reale Arena.