MERCADO DE FICHAJES

Dudas y certezas sobre el caso Dembélé: ¿Por qué el PSG no paga la cláusula al Barça?

Los franceses están obligados a sentarse a negociar con el Barça.

Dembélé celebra su último gol como jugador del Barcelona./AGENCIAS
Dembélé celebra su último gol como jugador del Barcelona. AGENCIAS
Jordi Cardero
Sergio Fernández

Jordi Cardero y Sergio Fernández

Las Vegas (Estados Unidos).- El FC Barcelona ha llegado a Las Vegas con retraso, pero lo ha hecho todavía con Ousmane Dembélé en sus filas. El club atrasó su salida de Dallas y todo parecía indicar que sería para dejarse en el hotel al francés. Pero no. Seguirá en dinámica de primer equipo hasta que se resuelva su situación. Durante el domingo, el club fue aceptando que se marcharía al Paris Saint-Germain. Finalmente, no obstante, la cláusula de 50 millones no fue abonada y los parisinos tendrán que sentarse a negociar con Joan Laporta.

El Barça llega a Las Vegas con Dembélé.Jordi Cardero

Desde la cúpula barcelonista se transmitía una sensación de hartazgo con el futbolista. Un año y medio después de una renovación que ya se complicó, se volvió a repetir la misma situación. "Cláusula o nada", comentaban desde el club. Hay varias certezas, como que Xavi pierde a un "jugador estructural", que Mateu y el mismo entrenador intentaron detenerle o que fue su agente, Moussa Sissoko, el detonante de la situación. Pero también quedan muchas dudas todavía por resolver.

Corría los últimos días por el hotel Thompson de Dallas un rumor extraño. A pesar de que tanto desde el cuerpo técnico como desde esferas más altas se mandaba un mensaje de tranquilidad con Dembélé, insistiendo en que se estaba trabajando en la renovación, poco a poco el clima fue cambiando. El Paris Saint-Germain mejoró la propuesta a Ousmane y su agente trató de empujarle hacia Francia. El Barça ya había recibido una carta formal del club francés en el que revelaban su intención de ir por la vía de la cláusula.

El «mareante» Sissoko, clave en su salida

Los que han negociado con Sissoko comentan que es un "mareante", que trata de llevar las negociaciones al límite y que juega con varios clubes al mismo tiempo. Fue el actor que intentó llevarse a Dembélé en invierno de 2021 a pesar de la amenaza de Mateu Alemany de quererle sentar en la grada durante el resto de temporada. Terminó renovando, pero sin una mejora sustancial del contrato. Percibe unos ocho millones limpios por temporada. Eso sí, la rebaja de la cláusula a 100 millones y a 50 en junio y julio de este mes (que se habrían repartido a partes iguales entre jugador y Barcelona) hacían indicar que una salida no parecía algo descabellado.

Unos días atrás, en Dallas, Mateu se sentó con Dembélé para hacerle ver que la noticia que salió desde Francia sobre la propuesta de intercambio del Barça de Gavi y él por Mbappé eran 'fake news'. Xavi habló regularmente con el jugador y éste era consciente de que era un futbolista fundamental para el equipo. Además, es feliz en Barcelona.

¿Por qué Dembélé pide una salida amistosa?

A petición del jugador, como avanzó Sport, Dembélé pidió una salida amistosa a su agente y al PSG. Es decir, que no se abonase la cláusula. Con el plazo de la cláusula superado en la noche del lunes a las 23:59 -vuelve a ser de 100 millones-, Barcelona y PSG tendrán que negociar por el futbolista al que todavía le queda un año de contrato.

Desde la cúpula catalana se vivió con cierta impotencia que Dembélé se quisiera ir. Y más que eso, que el PSG se viera con fuerza para convencerle. Tal y como explicó la SER, el Barça quiere "ir a la guerra" contra los franceses. A pesar de que están condenados a entenderse. El club quiere presionar a la UEFA para que sea contundente con el PSG y el cumplimiento del fair play, que ellos mismos están sufriendo. Al Khelaifi, presidente de la ECA, es uno de los principales opositores a la Superliga. Queda por esclarecer por tanto qué gana el PSG sentándose a negociar con el Barcelona en vez de ir por la vía del clausulazo.

Los beneficios fiscales de la 'salida amistosa'

Hay una ligera diferencia entre los 25 millones que habrían recibido Dembélé y Sissoko en caso de haberse marchado tras abonar la cláusula de rescisión y que se vayan tras negociaciones entre clubes. De haber cobrado los 25 millones, habría tributado como residente en España, lo que supone un 50% aproximadamente en impuestos. En cambio, todavía sin saber qué prima de fichaje le puede presentar el PSG, en caso de cobrar una parte de la prima ahora, en España, y diluir la otra de cara a un futuro, tendría algunas mejoras financieras por el hecho de ser ya residente en Francia. No se trataría de una cifra mucho más significativa, pero sí ligeramente superior.

El Barça mejorara su situación financiera

Con la repalanca que el Barça está trabajando en cerrar desde Barcelona, el club podrá inscribir a todos los renovados y fichados. El objetivo es que puedan estar todos disponibles ya la primera jornada de Liga. En cuanto a Dembélé, su salida le aplicará al Barça una mejora en su límite salarial. Al ser un jugador que cobra más del 5% de la masa salarial del club, los beneficios serían: 35% del dinero ingresado por el traspaso y el 60% de su sueldo. En caso de haber salido por 25 millones, el Barça habría mejorado su situación pero seguiría excedido. Según cálculos aproximados, de haberse ido por la cláusula habría reportado una mejora salarial de unos 13 millones.

¿Y cuánto le queda al Barça para volver a la regla del uno uno? Las cifras son confidenciales, sólo las saben el club y LaLiga, por lo que todo son aproximaciones. Si lo logra de cara al mercado de invierno, no se descarta la incorporación de Vitor Roque. Tras la salida de Dembélé, desde el cuerpo técnico transmiten que todavía no se ha definido cuál será la hoja de ruta en el mercado durante el próximo mes. Aunque la directiva ya sabe que, en caso de querer ir a por un extremo, el que más le gusta a Xavi es Bernardo Silva. Hasta que no se cierre la salida de Ousmane, el Barcelona no se moverá.