Di María vuelve al Benfica para cerrar su círculo europeo

Julio de 2007, el Benfica le hace llegar una oferta al representante de un chico muy flaquito llamado Ángel Di María. Rosarino él, de familia humilde, hincha del 'Canalla', club que defendía. Bajo las órdenes de Carlos Ischia, histórico ayudante de Carlos Bianchi en Boca, Di María fue entrando poco a poco en el once inicial del equipo, disputando 18 encuentros en el Clausura 2007. 16 como titular, dos como suplente de los 19 del campeonato, con su equipo en mitad de tabla pero él destacando, metiendo cinco goles.

Pero volvamos a la oferta del Benfica. Di María le dice a su familia: "O nos vamos todos o no me voy". 'Fideo' no quería dejar a su gente atrás y les pide que viajen a Lisboa con él. Tenía solo 19 años, era un niño todavía. La familia asiente y viajan a Portugal, dejando una cifra de ocho millones de euros en Rosario Central. Varios años después, Di María se despedía de Lisboa y viajaba a Madrid a cambio de 33 millones de dólares.

Hoy, 13 años después de abandonar el país luso, vuelve como jugador libre, como campeón del mundo, como uno de los grandes de las últimas décadas, para jugar en la liga portuguesa y despedirse (con casi toda probabilidad) del fútbol europeo.

Di María movió 179 millones de euros en traspasos durante toda su carrera. Benfica, Real Madrid, Manchester United, PSG y Juventus fueron los clubes en Europa del futbolista. Varios de los mejores equipos del mundo disfrutaron de su zurda y ganaron torneos gracias a sus goles y asistencias. En todos fue clave, aunque el último paso por la 'Vecchia Signora' terminó con un sabor agridulce.

El rosarino vuelve al Benfica porque el club portugués le ofrece un equipo serio, ganador de la última liga de su país y uno de los más atractivos equipos de la Champions en su última edición. Además, Roger Schmidt ha demostrado carácter para afrontar situaciones complicadas.

También le ofrece convivir con un amigo suyo como Nicolás Otamendi y disfrutar, con su familia y su esposa Jorgelina (clave en la carrera de Ángel) de su ¿último? año en Europa.

Pero el futbolista también fue sondeado por otros clubes. Cuando el Barcelona seguía pensando en Messi, también estuvo la opción de reunirlo con Di María en la Ciudad Condal, pero era algo complicado. Varios mercados emergentes también pujaron por él, ya que llegaron ofertas de Arabia Saudí o sondeos del Galatasaray, pero la decisión no iba a ser económica, lo deportivo (y familiar) primaba sobre ello.

Di María y su familia querían volver donde todo empezó. Pero también querían disfrutar de un equipo y una liga que le permita competir al 'Fideo' pensando en la próxima Copa América que se jugará en Estados Unidos al término de la próxima temporada. El argentino, cada vez que concede una entrevista, cuenta que ahora quiere aprovechar la oportunidad y disfrutar de los momentos que puede vivir con sus compañeros en el predio Lionel Andrés Messi situado en Ezeiza y de los aplausos de la gente cada vez que vista la albiceleste.

No sabemos si el futuro de Di María, tras jugar en Europa, estará en Rosario (siempre lo manifestó), en la MLS o en algún otro país. Él siempre dijo que quiere llegar vigente a jugar en Rosario Central, que quiere competir, que quiere devolverle al club todo lo que le dio, al igual que los hinchas del 'Canalla', donde finalmente se cerrará el círculo de su carrera, pero antes quiere cerrar su círculo europeo.