La Real encuentra un 'filial' en Vitoria para sus potrillos

Eras las últimas horas del mercado de fichajes y la Real Sociedad buscaba acomodo a cuatro jugadores de su plantilla. Este mercado ha sido especial en San Sebastián, con la Champions League como gran aliciente y con un cambio de rumbo buscando futbolistas contrastados que exigían salidas de canteranos. Y así fue, aunque se le hiciera tarde a Roberto Olabe. Sobre la bocina salieron Diego Rico (Getafe), Robert Navarro (Cádiz), Álex Sola (Alavés) y Jon Karrikaburu (Alavés). Los dos últimos representan una nueva fórmula en San Sebastián, con el conjunto alavés como principal destino de los 'descartes' txuri-urdin.

No es casualidad. Ambas entidades mantienen muy buenas relaciones y el éxito de Jon Guridi en Mendizorroza ha abierto las puertas a otros futbolistas de la cantera de Zubieta para probar suerte en un proyecto al alza. El Alavés regresa a la máxima categoría y ha conformado una plantilla ilusionante, quizá únicamente falta de un jugador de banda derecha, pero que ha mejorado notablemente respecto a la campaña pasada y que buscará salvarse en la máxima competición.

De esta forma, Sola y Karrikaburu completan el equipo babazorro más realista que nunca con seis jugadores. El mencionado Guridi y el extremo Xeber Alkain ya estaban el curso pasado y celebraron el ascenso en la Virgen Blanca el pasado mes de junio, a los que se han ido uniendo poco a poco otros ex compañeros de la factoría guipuzcoana. Ander Guevara (nacido en Vitoria) aterrizó el primero, traspasado y con un contrato hasta 2027; Andoni Gorosabel repitió fórmula, aunque con un acuerdo corto de una temporada; y sobre la bocina llegaron Sola y 'Karrika'. Media docena de ex txuri-urdin -un 25% del plantel- defenderán la elástica alavesa conformando una especie de 'filial'.

El mejor ejemplo de esta situación se da en el lateral derecho. La Real consiguió la temporada pasada la cuarta posición en LaLiga con Andoni Gorosabel y Álex Sola compartiendo demarcación en el lateral derecho. Dos apuestas de Olabe, que dejó marchar el año pasado a Zaldua al Cádiz. Un año después, los dos vuelven a ser compañeros pero a 100 kilómetros de San Sebastián.

En la mayoría de casos, tanto los jugadores como la Real están encantados con la fórmula. Un equipo que les proporciona minutos, con un estilo que les obliga a reciclarse y mejorar en ciertas facetas, como la defensiva, y que en definitiva les permite continuar sus carreras. Sin embargo, contrasta la cesión del delantero Karrikaburu. Ahí no hubo consenso y el conjunto txuri-urdin hubiese deseado otra plaza para que el joven goleador pueda recuperar la confianza con minutos.

"Nosotros le podemos recomendar y lo tenemos claro: Lo que necesita es jugar y demostrar que está capacitado para volver y aportar lo que entendemos que nos puede aportar. Si él o sus representantes tienen otras pretensiones por nivel de equipo y va a tener menos minutos o va a tener menos protagonismo no sirve de mucho. Ahí son ellos son los que tienen que pararse a pensar de cara al futuro porque es vital e importantísimo que pueda tener minutos y demostrar lo que tiene dentro", dijo Imanol Alguacil horas antes del cierre de mercado.

La realidad es que en Vitoria, Karrikaburu tendrá mucha competencia. Kike García ha comenzado como titular y con un doblete, pero además el Alavés consiguió la cesión del joven Samuel Omorodion. Un delantero contrastado y una joven promesa, cedida desde el Atlético de Madrid, que suponen una competencia muy alta y que le complicará ser importante. Eso sí, si lo consigue regresará a Zubieta con la moral por las nubes y con un caché mayor del actual y más cercano al que se le presuponía tras su explosión en la cantera, donde se convirtió en una gran esperanza que le llevó a firmar un contrato profesional hasta 2026.