La encrucijada de Sergio Ramos: último gran contrato o continuar en su Sevilla
Los sevillanos, en una situación de restricción económica, no pueden alcanzar sus pretensiones. La MLS aprieta, aunque de momento no tiene tomada una decisión.
La temporada para el Sevilla ha quedado prácticamente finiquitada tras el último derbi en el Benito Villamarín. Sin objetivos por cumplir, los andaluces no estarán en competición europea la próxima campaña, un duro revés para la maltrecha economía de la entidad que tendrá que recomponer la plantilla para ajustarla a su nueva realidad económica. Ha comenzado un periodo difícil y decisivo, con la toma de decisiones que marcará el futuro a corto plazo.
Tan solo queda por "conquistar" una posible plaza entre los diez primeros puestos. Objetivo mediocre, pero que permitiría a Quique Sánchez Flores, prolongar su contrato un año más, a la espera de que dirigentes y director deportivo, tomen una decisión definitiva sobre el inquilino del banquillo. Aquí surge la figura de Sergio Ramos, que ya sabe que el Sevilla contaría con él para el próximo curso.
El camero tiene que decidir si quiere continuar portando el escudo del Sevilla o firmar un último gran contrato que le aumente considerablemente su salario. Este año, el campeón del mundo ha percibido dos millones de euros brutos, una cantidad muy inferior a todas las ofertas que recibió en verano. He aquí el dilema entre el que se dirime el central, que todavía no ha comunicado su decisión.
Ramos ha logrado convencer con su rendimiento. Esta temporada, ha disputado 32 partidos entre LaLiga, la Champions League y la Copa del Rey. El excapitán del real Madrid ha disputado casi 3.000 minutos durante la temporada y tan solo se ha perdido dos partidos por lesión, un bagaje que ha convencido en la entidad andaluza.
El sevillano quiere saber cuál es el proyecto definitivo de cara al próximo ejercicio. Este año, tras su regreso, su ilusión se transformó en frustración tras la marcha del equipo. Eliminados de la Champions a las primeras de cambio, sin posibilidad de llegar lejos en la Copa y sobre todo, luchando por no descender, ha terminado por hacer dudar de la propuesta futura de su Sevilla.