Japón mató a España con la misma jugada: "Sus tres goles han sido calcados y perfectos"

"Ellas sabían a lo que jugaban y han sido muy efectivas". La frase de Misa Rodríguez en zona mixta resume a la perfección el encuentro de Japón ante España. "Japón ha hecho un partido muy inteligente", contaba Aitana Bonmatí. La del Barça iba más allá: "Es que nos han marcado, prácticamente, todos los goles igual". Y he ahí el quid de la cuestión.

Frente a las niponas, España encajó tres goles en 17 minutos. Y los tres fueron iguales. O "calcados" como dijo Irene Paredes en la zona mixta posterior al partido. "Calcaos y perfectos por su parte. Porque creo que han sido los contraataques perfectos y las definiciones perfectas, quitando creo que el segundo, que lo toco y eso despista a Misa, el resto es que... creo que han sido imparables", subrayaba la central del Barça.

A pesar de que tanto a Jorge Vilda como a sus futbolistas les sorprendió que Japón les cediese el balón -"Pensábamos más en quitárselo que en que nos lo diesen, casi nos lo han regalado", comentó Irene Paredes-, lo cierto es que el entrenador japonés ya lo avisó en la rueda de prensa. Futoshi Ikeda advirtió de que las suyas se iban a reforzar defensivamente y que se centrarían en aprovechar sus oportunidades. "Me ha sorprendido su planteamiento, con un bloque bajo y saliendo a la contra, que es ahí donde nos han matado", repitió Aitana.

Y en esas estuvieron. A Japón le bastó un minuto -que fue el tiempo (aproximado) que permaneció en el área de España durante la primera mitad- para marcarle tres a España. Con la precisión y la perfección que sólo Japón sabe darle a cada una de sus acciones.

Lanzaron balones en largo desde la defensa y desde el centro del campo. Y todo dirigidos a la espalda de la defensa de España. Miyazawa y Ueki hicieron el resto. Recogieron todos esos balones -como si de regalos se tratasen- y no les tembló el pulso ante Misa. Ni durante la primera mitad ni durante el segundo acto las de Jorge Vilda lograron subsanar el problema ni hacerle frente. "Sus contras han sido perfectas", confesó Irene Paredes. Miyazawa y Ueki

Una circunstancia que se unía a la frustración que sintieron las jugadoras españolas durante todo el encuentro. "Les ha salido el partido perfecto. Estábamos frustradas porque no nos salía nada", añadía Mariona. "Hay días en los que no sale nada", refrendaba Irene Paredes.