Milene Domingues: "En el colegio no tenía muchas amigas, no se veía bien que una mujer jugara al fútbol"
La brasileña, conocida en nuestro país como la 'Ronaldinha', fue la una de las pioneras y primera extranjera en jugar en España.

Milene Domingues (Sao Paulo, Brasil, 18/06/1979) no ha podido evitar que durante años le conocieran como la 'Ronaldinha'. Sin embargo, más allá de por ser la mujer de Ronaldo Nazario, fue la primera futbolista en darse a conocer al mundo y abrir puertas a muchas mujeres que soñaban con jugar a fútbol. "En el colegio no tenía amigas, me veían como una mala compañía, y los niños no me dejaban jugar con ellos. Así que empecé a hacer toques yo sola y batí el récord mundial", recuerda en su entrevista con Relevo.
En Brasil es la referente del fútbol femenino que ella no tuvo: "Hasta 1979 en mi país estaba penado con cárcel jugar a fútbol siendo mujer". Por lo que a sus 44 años sigue luchando por el fútbol femenino. También analiza el próximo Mundial, donde vería a España como una de las favoritas si no fuera porque cree que mentalmente lo que ha sucedido con Jorge Vilda les puede afectar mentalmente.
Reflexiva, alegre y con la sonrisa de siempre, Milene nos atiende desde Sao Paulo, donde ha vuelto y las niñas le siguen parando por la calle.
¿Sigues jugando al fútbol, Milene?
Sigo, pero no como profesional, ya tengo 44 años, aunque el año pasado estuve en las Olimpiadas judías. Yo no lo soy, pero formo parte de la comunidad del club. Ganamos la medalla de bronce, las disputaban más de sesenta países y las rivales tenían muchas chicas jóvenes. Mi equipo tenía una media de 34 años, creo que fui yo la que aumentó esa media (risas).
¿Cómo está el fútbol femenino en Brasil?
Ha evolucionado muchísimo, aunque no tanto como en España. Aquí vemos las ligas europeas femeninas y me doy cuenta, pero estamos empezando a trabajar el fútbol base. Ahí está la clave. Las niñas empiezan a jugar cada más pequeñas. Los campeonatos también se televisan, entran patrocinadores… soy embajadora del Corinthians, que es el mejor y el que gana prácticamente todo. La infraestructura ha mejorado y ellas son profesionales, y si dejan de jugar a fútbol, tienen sus derechos como trabajadoras.
Cuando eras una niña, ¿qué te decían cuando te veían con el balón de fútbol?
Mi familia siempre me ha apoyado. Yo empecé a jugar por mis hermanos porque no había niñas con quien hacerlo. Pero en el colegio no tenía muchas amigas, no se veía bien que una mujer jugara al fútbol y me tomaban como una mala compañía. Pensaban que yo podría mirarlas con los ojos de un hombre, hoy en día ya la homosexualidad no está asociada al fútbol.
De niña no podías tener referentes en el fútbol femenino, ¿en quién te fijabas entonces?
Con el tema de los toques empecé porque los niños no me dejaban jugar con ellos, y como estaba sola, empezaba a hacer toques. Quien me inspiró fue Maradona, porque parecía que se divertía mucho haciendo aquello, le veía feliz. Después me encantaban Zidane e Iniesta, incluso antes de vivir en España. Me fijaba en los centrocampistas, como yo. El fútbol de ahora es más físico. Aquí se dice que el fútbol femenino es como el masculino de antiguamente.
¿Cómo recuerdas tu llegada a España?
Mi hijo Ronald era muy pequeñito, veníamos de Italia, que era un país muy cerrado para hacer amistades. Escuchaba que España era como el Brasil de Europa, más receptivos, de los que enseguida te invitan a su casa… Cuando llegué a Italia estaba embarazada y encima era invierno, que para los brasileños es muy duro. A España llegué en otoño y Ronald ya tenía 2 años.
¿Por qué el Rayo y no el Atlético de Madrid?
Rony iba para el Madrid y el Atlético se interesó por mí, pero era rival del Madrid. No hubiese sido bueno que yo jugase en el Atleti y mi marido en el Madrid. Luego me gustó que el Rayo tuviese a una mujer como presidenta porque, aunque ahora se ve a mucha mujer en el fútbol, hace veinte años no. Teresa Rivero me tiraba mucho, y la gente hablaba muy bien del Rayo como equipo de barrio. Tengo cinco hermanos y mi mamá nos ha criado prácticamente sola, así que ella me recordaba a lo que viví en Brasil.
¿Te siguen llamando 'Ronaldinha'? ¿Te molesta?
En España me conocían por ser la mujer de Ronaldo, pero aquí me conocen desde los 14 años por el fútbol, los toques… En Brasil nunca me han llamado Ronaldinha. La gente cambió bastante cuando participé en el programa Mira quien baila, la gente me paraba por la calle preguntándome y empezaron a verme como persona y no como futbolista o exmujer de Rony. Nunca me ha molestado.
"Gracias a 'Mira quien baila' la gente empezó a verme como persona y no como ex de Ronaldo"
¿Ronaldo te apoyaba? ¿Le gustaba que jugaras al fútbol teniendo tanta exposición?
Sí, siempre, cuando empiezas una relación esa persona ya sabe cómo eres y no puede intentar cambiarte. Él me entendía, ya me había conocido así.
¿Sentías el machismo?
Mucho. Ya una mujer en el deporte se veía raro. Es un cambio de cultura. En Brasil, hasta 1979, estaba prohibido que la mujer jugara al fútbol y podías ir a la cárcel. A lo largo de los años hemos luchado para que las mujeres puedan ser lo que les dé la gana.
¿Qué escuchabas?
Yo era muy joven y eso de que tenía que estar en casa cuidando de mi marido no he escuchado, pero sí que debía jugar con muñecas y practicar otros deportes, como el voley. Cuando me separé la gente decía de todo, pero yo siempre he contestado con actitudes. Escucho, respeto y quiero que respeten mi decisión de jugar al fútbol, aquello nunca me hizo desistir. Si gasto energía escuchando a la gente, la pierdo para hacer algo que quiero.
"En Brasil, hasta 1979, estaba prohibido que la mujer jugara al fútbol y podías ir a la cárcel"
¿Cómo crees que hubiese sido tu carrera si jugaras ahora?
Por supuesto que financieramente seguro que mejor, porque yo nunca he ganado dinero por jugar al fútbol. Trabajaba más por mi imagen. Fui el traspaso más caro con el Rayo porque tenía un contrato con publicidad, por eso los anuncios con flanes Dhul. Hoy pueden ser profesionales. Yo gané mucho más dinero con la publicidad que con el fútbol. La preparación también hubiera sido distinta también, con 14 años me enfrentaba a mujeres de 30 y saltarse fases no es bueno. En el Mundial 2019 femenino ya vimos un cambio muy grande en la parte técnica, táctica y física. Ahora están preparadas desde niñas.
¿Las niñas te reconocen?
Mucho, porque sigo en el escenario del fútbol femenino y porque en el Corinthians hay mucha hinchada. Las chicas también están ganando todo. Yo empecé a jugar de forma profesional con el Corinthians, así que, al volver, mucha gente se sigue acordando de verme siempre con el balón, o se lo cuentan sus madres.
¿En el fútbol femenino de Brasil también son recurrentes las noticias por cuestiones extradeportivas?
Aquí apenas sucede eso, se habla mucho del juego y cada vez más. Corinthians por ejemplo tenían 80.000 seguidores y ahora pasa de 1,3 millones. La prensa en Brasil tiene mucho peso, entonces las niñas a través de sus redes sociales dan mucha voz. La federación y los medios están muy atentos y la voz de las chicas es muy escuchada. Si hubiera pasado lo de España y Vilda en Brasil, yo creo que el entrenador no iría al Mundial. Yo nunca viví ninguna situación abusiva de ningún tipo.
"No hubiese sido bueno que yo jugase en el Atleti y mi marido en el Madrid"
¿Sabes que David Aganzo es uno de los que más está luchando por el fútbol femenino?
Hace unos cuatro años estuve en Madrid en un Summit de fútbol y le vi, también a Ronaldo, como presidente del Valladolid. David estuvo hablando de la AFE. Aquí el sindicato no funciona mucho, las chicas tienen que pedir a través de las redes sociales. David Aganzo me comentó que había varias brasileñas en España y que quería que pudiesen votar en su sindicato. Siempre está pendiente de los derechos de las niñas.
Durante vuestra relación, ¿ya te mostraba interés por ello?
Siempre me apoyó mucho, y cuando estábamos juntos creo que le dio más ganas de cambiar el fútbol femenino. Además tiene una personalidad de ayudar y estar al frente de todo. Sabía lo que pasaba en el fútbol femenino y nuestra relación le ayudó para conocerlo mejor.
¿Qué futbolistas te gustan más?
Alexia es buenísima, yo iba con el Barça en la final de la Champions. Un español no lo puede entender, pero yo soy del Barça y del Madrid, me gusta el fútbol. Marta es una jugadora que ha marcado mucha diferencia, ha llevado el nombre de Brasil por el mundo. Es su último Mundial y estaremos muy pendientes de ella. Sam Kerr, la delantera de Australia, marca la diferencia, es fuerte, inteligente, define bien… Y Alex Morgan, la americana, por supuesto.
¿Y tu selección favorita para llevarse el Mundial de Australia?
Estados Unidos siempre es la favorita, aunque tiene un equipo muy renovado. Lo que sucede es que las americanas tienen el fútbol como algo muy normal en sus vidas, es natural que las niñas con 12 años jueguen al fútbol. Si juegas desde pequeñita, tienes una cabeza muy distinta cuando vas con tu selección. España es de las favoritas, aunque no sé con el problema del entrenador, porque las mujeres somos fuertes, pero también más influenciables mentalmente, es decir lo externo nos afecta más. Tendré que ver el primer partido de España y Francia para ver cómo están. Puede que jueguen más porque tienen el problema, o que estén peor por ello. Como deportista, sé que estar o no con tu entrenador marca la diferencia.
El Mundial masculino nos ha dado esperanza a Brasil, porque viendo la fuerza de otras selecciones, no creo que nadie pensara que Argentina pudiese ganarlo.