Más detalles del divorcio Luis Enrique-RFEF: Twitch fue principio… y final

¿Qué ocurrió para que la historia de amor entre la Federación y Luis Enrique se rompiera tan rápido? Han pasado tres semanas desde que se anunciara que el asturiano no iba a continuar como seleccionador, en una decisión tomada de forma unilateral por parte de la RFEF, antes de saber si el técnico tenía o no intención de seguir. Tiempo suficiente para hacer balance y, también, para que se vayan conociendo más detalles de qué pasó en esas semanas de convivencia en Catar en las que todo dio un giro radical. De la confianza absoluta se pasó a la necesidad de cambio sólo 48 horas después de que Marruecos eliminase a La Roja en octavos.

El desencanto de la RFEF con Luis Enrique comenzó tres días antes de que arrancase el Mundial. Es entonces cuando el seleccionador les comunica su decisión de comenzar con los directos de Twitch. Aunque de puertas hacia afuera se aplaudió la iniciativa, lo cierto es que internamente sentó muy mal por dos motivos: lo realizaba sin importarle la opinión de la Federación y, además, desde su cuenta personal. Lo lógico, aseguran desde dentro, habría sido realizarlo desde los canales oficiales y de manera consensuada. Ahí empezó a extenderse la opinión de que al asturiano le encantaba darse autobombo y ser el centro de atención.

Se planteó, incluso, la opción de hablar con él para que cambiase su postura y no realizase esos directos en Twitch. Sin embargo, tras varias reuniones, se optó por dar normalidad al asunto. Generar un incendio interno a pocas horas de que echase a rodar el balón en Catar no era la mejor forma de comenzar. En la memoria de Luis Rubiales estaba lo sucedido en Rusia con Lopetegui, por lo que optó por enfriar el asunto. Pero quedó anotado…

Hay otro detalle que molestó, y mucho, dentro de la Federación. Luis Enrique aparecía normalmente en Twitch con su ropa y no con la de la Selección. En pleno Mundial, los vídeos del seleccionador nacional daban la vuelta al mundo sin ninguna prenda oficial de la RFEF. Otro tanto negativo que quedó pendiente de hablar tras el torneo..

El enfado alcanzó su punto más caliente tras la derrota contra Japón. Ahí, dos caras del técnico: bronca monumental en el vestuario… y chascarrillos en Twitch. A todo ello hay que unirle una conferencia de prensa previa al duelo contra los africanos muy tensa, retadora ante la Prensa. Luego, en sus redes, todo eran bromas. El desconcierto dentro de la RFEF crecía cada vez más.

Después, una vez consumado el divorcio, Luis Enrique tomó una última decisión que ha terminado por romper su historia de amor con la Federación: eligió el día de la presentación de De la Fuente para reaparecer en el Twitch de Ibai Llanos. Una fecha, dicen desde la Federación, que no fue escogida al azar, sino pensada para quitar protagonismo a su sucesor. Confirmó la sensación interna de que el asturiano sólo pensaba en el autobombo, además de ser un gesto feo hacia su sucesor, con quien siempre mantuvo una excelente relación.

Sus apariciones en Twitch fueron principio y fin del divorcio pero, entre medias, estuvo lo más importante: el fracaso deportivo. En este sentido, la RFEF y muchos jugadores comparten una crítica hacia Luis Enrique: la falta de plan B. Además, su grado de obsesión por el posicionamiento terminó por encorsetar demasiado a algunos futbolistas, como Pedri, que terminó más pendiente del inicio del juego que del último pase, donde de verdad es decisivo.

España tenía un plan A brillante, vistoso, efectivo… pero sin opción de cambiar de rumbo cuando no funcionaba. Lo de Japón se entendió como un aviso, jugadores y dirigentes esperaban que Luis Enrique cambiase algo ante Marruecos, un rival que le iba a plantear un partido casi idéntico. Nada varió. "Pecó de ser demasiado 'talibán' con sus ideas", aseguran quienes lo vivieron desde dentro. Su valía como entrenador está fuera de toda duda, aunque en el Mundial se echó en falta esa capacidad para probar caminos diferentes en la adversidad, algo que sí tuvieron otros seleccionadores, como los de Holanda (Van Gaal) o Francia (Deschamps) ante Argentina. Luis Enrique fue fiel a su único plan… y murió con sus ideas. Eso, unido al malestar por sus apariciones públicas, precipitó el divorcio final, que no ha sido tan amistoso como parecía…