Enigmas y certezas de la nueva Francia: "Dominarán el fútbol mundial durante la próxima década"
La selección gala tiene garantizado el relevo para los Griezmann, Giroud, Lloris o el recién retirado Benzema.

El día después de la derrota ante Argentina se sobrelleva en Francia con sentimientos encontrados. La decepción por el resultado convive con el orgullo por una nueva actuación sobresaliente de los pupilos de Deschamps, a un penalti de repetir la gesta de la Brasil de Pelé. Les Bleus ganaron en Rusia y lo rozaron en Catar, pero, al contrario que otras selecciones campeonas, sus éxitos recientes no conducirán en ningún caso a un fin de ciclo. El diagnóstico es más bien el contrario: su dominio no ha hecho más que comenzar.
Con ausencias de tops mundiales como Benzema, Kanté, Pogba, Lucas, Kimpembe o Nkunku, los franceses alcanzaron la final del Mundial con una suficiencia pasmosa. Ante la Albiceleste les bastaron dos chispazos para llevar el partido a la prórroga. Física y técnicamente parecen muy por encima. Y las bajas, curiosamente, han acelerado el proceso de cambio generacional.
"Tienen una combinación muy interesante de jugadores en edad de absoluto rendimiento, entre 24 y 29 años, y otros que están por debajo de esa franja pero que ya juegan en clubes grandes. Saben lo que es la presión y la élite. Tienen bases para seguir dominando el fútbol mundial durante la próxima década", comenta a Relevo el jefe de scouting de uno de los siete clubes galos con más títulos en su palmarés. El apogeo de los Griezmann (31), Lloris (35) o Giroud (37) se apaga y Karim se retira, pero Francia tiene garantizado el relevo.
Continuidad y dos incógnitas: el '9' y la portería
El esqueleto de la selección del futuro es el mismo que sostiene a la Francia del presente. Mbappé (23), Tchouaméni (22), Kounde (24) o Upamecano (24) llegarán al Mundial 2026 en un momento de máxima madurez. "Analizando la foto general, diría que pocos jugadores van a cambiar. Tchouaméni, un 2000, ya ha superado un montón de situaciones de presión. Es un jugador hecho. Upamecano, Konaté, Saliba o Fofana, igual", traslada una de las personas que mejor conoce la realidad del fútbol francés. "Van a llegar con naturalidad y se van a imponer con naturalidad. No se va a notar claramente un cambio".

Los sucesores ofrecen garantías en prácticamente todas las líneas, pero nadie se impone de forma clara en un puesto que exigirá soluciones: el '9'. "Es la gran incógnita. Francia, históricamente, ha tenido problemas para generar delanteros de altísimo nivel. Desde Henry no disponen de esa figura. En los dos últimos Mundiales que ganaron, sus delanteros no marcaron ni un solo gol (Guivarc'h en 1998 y Giroud en 2018). Ahí va a abrirse un espacio".
Una de las soluciones podría pasar por recolocar a Mbappé, como sucedió cuando Deschamps retiró a Giroud ante Argentina. Parece, en cualquier caso, un recurso más puntual que con vocación de continuidad. "Mbappé solo puede jugar con otro '9' en un 4-4-2 o en banda. Si no, lo limitas un montón". En el abanico de candidatos gana peso la opción de Marcus Thuram, estrella en la Bundesliga y revulsivo en Catar. Otros nombres empiezan a pisar fuerte.
"Para mí, el delantero joven francés con más proyección es Ekitiké, del PSG (20 años). Habrá que ver lo que juega en París. Gouiri (22, Stade Rennais) es lo más parecido a Benzema. Kalimuendo (20, Stade Rennais) tiene otro estilo, pero viene jugando muy bien y le darán oportunidades, como a Kolo Muani (24, Eintracht). Martial va a seguir ahí y podrá tener otra posibilidad si elige bien sus pasos. En cualquier caso, ninguno es un jugador de área como Giroud", cuenta el especialista.

Deschamps (o su recambio) tendrán que atinar con la elección del ariete. La tarea que no exigirá tanto esfuerzo será la de encontrar al sustituto de Lloris. "Su sucesor va a ser claramente Mike Maignan (Milan), que se perdió este Mundial por lesión. Por detrás, los mejores son Lafont (Nantes) y Chevalier (Lille)".
Deschamps o Zidane: el banquillo marcará el estilo
Más allá de nombres o esquemas, el futuro de la selección francesa pasará irremediablemente por el entrenador que la capitanee. Deschamps aseguró el domingo que decidirá su continuidad a comienzos de 2023. La sombra de Zinedine Zidane, siempre alargada, pulula en el ambiente. Dirigir a Les Blues es el gran sueño del exmadridista y su oportunidad podría llegar el próximo año.
"Será el punto clave. Pongo un ejemplo. Si sigue Deschamps, los laterales que van a llegar serán de un perfil lateral-central, más amarrategui; si fichan a Zidane, apostará por Mendy y por jugadores más ofensivos", traslada el técnico. En cuanto se solucione el problema del '9', el resto de posiciones están más que cubiertas. Sobre todo la de central. En cada línea irá llegando el relevo de forma paulatina.

"Rabiot, tarde o temprano, va a necesitar un reemplazo. Para mí va a ser Khépren Thuram (Niza) o Caqueret (Lyon)". La enumeración de futbolistas con potencial parece interminable. El experto consultado por Relevo se queda con varias apuestas: "En el lateral derecho apuntaría a Malo Gusto (Lyon, 19) para llegar a la absoluta a corto plazo. Es joven, pero lo tiene todo. Manu Koné (Borussia Mönchengladbach, 21) será el suplente o el compañero de Tchouaméni. Es un perfil de recuperador que juega. Y ojo a este: Zaïre-Emery (PSG, 16). No me la jugaría a que no vaya a aparecer en alguna convocatoria. Es uno de esos jugadores superdotados que aparecen antes que el resto y que ya están preparados a nivel mental".
En cuanto Deschamps tome su decisión, la nueva Francia comenzará a caminar. Sin cambios bruscos ni golpes de timón, pero con un equipo capacitado para seguir gobernando con puño de hierro el fútbol mundial. Mbappé puede dormir tranquilo: le sobrarán oportunidades para ganar.