Luis Enrique abre el búnker a las familias

Luis Enrique tiene una preocupación extradeportiva en este campeonato: que a los futbolistas no se les haga pesada la convivencia. El seleccionador, que vivió tres Mundiales como jugador, es consciente de lo difícil que es lograr el buen ambiente que ahora mismo reina en la concentración de España. Por eso, el técnico asturiano abrirá este lunes por la tarde la Qatar University, donde se encuentra alojada España, a los familiares que se han desplazado hasta Doha. Los jugadores tendrán varias horas para estar con sus seres queridos, enseñarles la residencia y charlar con ellos.

Esta decisión se une al día libre que disfrutaron el pasado viernes, cuando todos los futbolistas se marcharon a comer a algunos de los mejores restaurantes de la ciudad y pasaron la tarde libre con sus familias, ya que muchas de ellas se organizaron para pasar toda la primera fase en suelo catarí.

La residencia de España tiene un punto muy positivo: los campos de entrenamiento están enfrente de las habitaciones donde descansan los internacionales. Apenas tardan unos minutos a pie (o en patinete) para llegar hasta el vestuario donde se cambian. Eso es muy cómodo, pero a la vez resulta monótono. Todos los días sin partido son casi idénticos para los jugadores, que hacen más amenos sus ratos libres con partidos al ping-pong o a la Play Station.

Luis Enrique, que está encantado con la actitud de todos los internacionales, no quiere que terminen saturados por pensar las 24 horas en fútbol. Por eso les dio el pasado viernes libre y ahora vuelve a tomar la decisión de dejarles varias horas para que puedan ver a las familias. La prioridad es que todo siga igual de bien dentro del campo… y también fuera.

Antes de la visita de las familias tienen programado un entrenamiento a las 12 de la mañana, hora local, en la que los titulares ante Alemania harán una suave sesión de recuperación y los suplentes se ejercitarán con normalidad para no perder ritmo de competición.