Szymon Marciniak, el árbitro de la final del Mundial
Será el primer polaco de la historia en dirigir una final mundialista. En 2018 arbitró la Supercopa de España con victoria para el Atlético.
Szymon Marciniak, de 41 años, será el encargado de arbitrar la final del Mundial entre Argentina y Francia. El polaco, además, se convertirá en el primer árbitro de su país en alcanzar este logro, confirmándose así como uno de los mejores de la actualidad. En este Mundial ha dirigido dos partidos y precisamente a las dos finalistas: Francia-Dinamarca (fase de grupos) y Argentina-Australia (octavos).
La temporada pasada ya logró alcanzar la cifra de ocho partidos en una misma edición de la Champions League, incluyendo una semifinal (Villarreal-Liverpool), la más alta de un árbitro polaco hasta la fecha. Acumula un total de 39 encuentros en la máxima competición europea, muy por delante de Ryszard Wójcik con 16, ya retirado. Este curso ya ha dirigido cuatro encuentros de la Champions, entre ellos el Barcelona-Inter (3-3) y el Atlético-Oporto (2-1).
De hecho, además de ser aficionado al ciclismo y de haberlo practicado en su infancia, su llegada al arbitraje se produjo como consecuencia de su amor al fútbol... y de su exceso de protestas injustificadas. A los 21 años, como jugador, Marciniak le dijo a un árbitro que era el peor que había visto en su vida. También se dio cuenta de que protestaba sin conocer el reglamento, lo que le llevó a estudiarlo en profundidad para acabar dirigiendo partidos al máximo nivel.
Como curiosidad, Marciniak arbitró la final de la Supercopa española de 2018 entre Real Madrid y Atlético de Madrid con victoria para los rojiblancos por 2-4 en un partido que tuvo que decidirse en la prórroga.
Marciniak, que alcanzó el rango más alto de la jerarquía internacional en 2015, estará ayudado en la banda por sus asistentes, Paweł Sokolnicki y Tomasz Listkiewicz.