Dani Olmo y una final soñada: "Mi primer país contra mi segundo, tengo que estar"
En Zagreb siguen llamando al español "nuestro Dani". Sigue atento a todos los partidos del Dinamo.

Róterdam (Países Bajos).- Verano de 2014. Dani Olmo (Terrassa, 1998) toma una de las decisiones más arriesgadas de su vida: deja el Barcelona, el club de su vida, para marcharse al Dinamo. Coge las maletas y se presenta en Zagreb, donde pasa la primera noche solo en casa de Andy Bara, su representante. Con sólo 16 años dejaba todo atrás para comenzar una aventura que muchos calificaron de locura, pero que con el paso de los años se ha convertido en el mayor acierto de su vida. ¿Por qué se fue? Porque el Barcelona no puso sobre la mesa el proyecto deportivo que él quería y el Dinamo sí lo hizo (y lo cumplió).
Casi una década después, Olmo es un fijo en la Absoluta de España y recuerda con cariño aquellos años en Croacia (entre 2014 y 2020) en los que pasó de niño a adulto, aprendió el idioma e hizo de Zagreb su segundo hogar. "Es una final, se enfrenta mi primer país contra mi segundo… Es un cuento de hadas, tengo que estar", dice Dani en una entrevista concedida a Sportske Novosti. En Croacia sigue siendo un ídolo, hasta el punto de que los seguidores del Dinamo le llaman "nuestro Dani" y la selección croata trató sin éxito de convencerle hace años para que defendiese sus colores.
Por todo esto, esta final de la Liga de Naciones que jugarán España y Croacia en Róterdam este domingo es mucho más que un partido de fútbol para Dani. De ahí su empeño en llegar al 100% al duelo, a pesar de las molestias musculares en el aductor que sintió el pasado domingo en el entrenamiento y que le apartaron de la semifinal frente a Italia. Desde el primer minuto su vista estaba puesta en esta final, trabajando día y noche con los fisioterapeutas y preparadores físicos para conseguir el objetivo de estar disponible para De la Fuente, algo que ha logrado.
A falta de saber si está para ser titular o como revulsivo, Olmo es importante para contrarrestar el potencial croata en el centro del campo. "La pelea más grande se librará en el mediocampo, ahí se romperá el partido", reflexiona el jugador.
Clave para De la Fuente
Su presencia es importantísima para De la Fuente, el técnico que más confió en él cuando jugaba en el Dinamo: le convocó para la Eurocopa Sub-21 de 2019, en la que terminó siendo MVP de la final a pesar de tener dos años menos que el resto de jugadores. Eso le puso en el escaparate y poco después, en enero de 2020, abandonó Zagreb rumbo a Leipzig, donde acaba de renovar hasta 2027 tras convertirle el club alemán en la estrella de su ambicioso proyecto.
Dejó atrás Zagreb, pero sin olvidar al Dinamo: sigue viendo todos los partidos, siempre que el calendario del Leipzig se lo permite. "Me pone muy contento cuando los jugadores del Dinamo juegan tan bien", dijo Olmo sobre el gol que marcó Petkovic a Países Bajos en semifinales. Cuando no participa España, quiere que gane Croacia. Pero no este domingo, cuando Dani sueña con levantar su primer título absoluto con La Roja aunque eso provoque alguna lágrima entre sus queridos croatas.