Detrás de los momentos que han llevado a la Selección a alcanzar la madurez
Tras su clasificación para los Juegos Olímpicos, las de Montse Tomé volvieron a hacer historia.
Para explicar la madurez y el carácter que derrochan las futbolistas de la Selección hay que remontarse al 20 de julio del 2022. Concretamente, al minuto 96 del partido que midió a Inglaterra y a España en los cuartos de final de la Eurocopa. El gol de Stanway rompió los sueños de las nuestras y, a la vez, marcó su destino. El combinado nacional se volvía a casa y la sensación se repetía: podrían llegar más lejos, pero...
Porque esa derrota empujó a las jugadoras de la Selección a pedirle al expresidente de la RFEF, Luis Rubiales, cambios. Unas propuestas que fueron ignoradas en un inicio y que sembraron la semilla de 'Las 15'. El final del cuento es de sobra conocido y acabó con Luis Rubiales y Jorge Vilda -entre otros- fuera de la RFEF y con mejoras en las condiciones de las futbolistas (aunque todavía quede mucho por hacer).
Vinieron días muy duros que, aunque en un principio separaron a las jugadoras en dos bandos, el trascurso de los acontecimientos -con un Mundial de por medio- acabó uniéndolas y forjando esa madurez que, a día de hoy, caracteriza al combinado nacional. De otra forma, sería imposible explicar cómo la Selección conquistó su primer Mundial, los abrazos entre Misa y Alexia Putellas, el story de Athenea del Castillo con el Balón de Oro de Aitana, el #SeAcabó o la histórica clasificación para los Juegos Olímpicos. Un repaso a los momentos que han convertido a España, tras un largo periplo por el desierto, en una de las selecciones más temidas del mundo y a sus futbolistas en auténticas referentes. Un relato con luces y sombras, con detalles dentro del verde y fuera de él. Cómo ha cambiado el cuento.
«Se crecen ante las grandes»
"Se crecen ante las rivales grandes. De hecho nuestros dos mejores partidos fueron los dos frente a Suecia y el de hoy", confesaba -orgullosa- Montse Tomé en la rueda de prensa posterior a la victoria ante Países Bajos. La Selección desprende una sensación de invencibilidad y confianza nunca antes vista en el combinado nacional.
Antes de esos dos partidos ante Suecia, fueron varios los encuentros que forjaron esa madurez, tanto deportiva como social. Después del partido ante Inglaterra o del de Estados Unidos, por ejemplo. Cuando, prácticamente, acaba de estallar el conflicto de 'Las 15', la 'nueva España' (como fue acuñada por el exseleccionador nacional, Jorge Vilda) se plantó en Pamplona y venció a Estados Unidos. Si bien es cierto que la selección estadounidense viajaba con muchas bajas, nunca antes España le había ganado. Silenciando el ruido y centrándose en la pelota.
Después de esa, vinieron más victorias y una derrota: la de Australia (3-2) en la Copa de las Naciones. Aquella concentración en la que volvía Jenni Hermoso y se avecinaban cambios en 'Las 15'. Llegó el Mundial y la Selección se enfrentaba al 'partido' más importante: el regreso de parte de 'Las 15'. Después de todo lo que había pasado, se especuló mucho sobre cómo sería el ambiente en el vestuario. Un grupo que llegó a estar roto y acabó reinventándose. "Antes nos mezclábamos para comer y aquí sabías quién se sentaba en cada mesa", confesó Andrea Pereira en Relevo.
En pocos días, las jugadoras se encargaron de dejarlo claro: "Lo que hace especial a este equipo es que somos un equipo". Las palabras corresponden a Irene Paredes, una de las voces más autorizadas del vestuario. "No hace falta que todas seamos amigas para ser un equipo", añadía Jenni Hermoso. Más maduras, más fuertes y dejando atrás las rencillas que un día las separaron por un bien común: el Mundial. Vaya, hacer de tripas corazón. Precisamente, esos sentimientos fueron el que les permitió sobrevivir tras la estrepitosa derrota ante Japón (4-0), en el último partido de la fase de grupos.
Ese partido se une a la lista de los mencionados anteriormente. España se repuso y sobrevivió a varios cambios en el once y a las críticas. Uno de ellos, el más llamativo fue el de Misa, hasta ese momento la titularísima, por Cata Coll. El día de la final, y cuando la colegiada pitó el final del encuentro, la portera del Real Madrid corrió a abrazar a la del Barça. El fiel reflejo de en lo que se había convertido España, en un equipo. En lo deportivo, en ese Mundial, España ganó a Países Bajos, a Suecia y a Inglaterra y superó la barrera de los octavos de final por primera vez en su historia. Todas, por delante de España en el ranking FIFA y campeonas del mundo o de Europa en alguna ocasión.
El culmen: el #SeAcabó y las victorias ante Suecia
Y, por si había dudas de la madurez del combinado nacional, llegó el asunto Rubiales y el #SeAcabó y puso todo patas arribas. Sin embargo, ellas siguieron firmes y se plantaron. Una unión representada en Oliva, en una de las noches más extrañas -e importantes- en la historia del fútbol español. Por la importancia de los acuerdos que se alcanzaron, sobre todo. También, aprendieron de 'Las 15', también de Mapi León, Patri Guijarro y Claudia Pina, entre otras, y sin las que es imposible explicar el proceso. A diferencia de en aquella ocasión, todas se unieron y fueron a una.
Las primeras palabras de Mapi León en su llegada a la concentración de la Selección en Valencia.
— Relevo (@relevo) September 19, 2023
💬 "¿Arropadas por la gente? Sí, pero igual no por quien deberíamos".
💬 "Tendríamos que hablar claro y tendido de si es un lugar seguro o no".
🎥 @SalvadorFenoll pic.twitter.com/H2hSzbrMmD
Tras ese partido, España comenzaba su andadura en la Nations League, y le tocaba bailar con la más fea: Suecia. Con pocas horas de sueño, muchos problemas en la cabeza y, para más inri, el debut de Montse Tomé como seleccionadora nacional, España jugó uno de los mejores partidos que se le recuerdan, y con muchas personas esperándolas verlas perder. Habían hecho mucho ruido. Demasiado, para algunos. "Y a la gente que espera que nos vaya mal, pues ya lo siento", decía Mariona, con una sonrisa, tras el partido.
Antes del triunfo, Irene Paredes y Alexia Putellas, protagonizaron una rueda de prensa que será recordada para siempre. Por su emotividad y por la claridad con la que hablaron: "Lo único que queremos es jugar al fútbol en unas condiciones dignas y en las que se nos respete. Hasta ahora ha sido imposible. Demandamos cambiar cosas para que en algún momento llegue el punto en el que las jugadoras sólo se dediquen a jugar".
El culmen de este largo proceso fueron los partidos ante Suecia (en La Rosaleda) y de ayer frente a Países Bajos (en La Cartuja). En el primero de ellos, y sin nada en juego, las de Montse Tomé remontaron ante las suecas y acabaron ganando por 5-3. En el último, Jenni Hermoso y compañía pasaron por encima de las neerlandesas con una seguridad y solvencia propia de la mejor selección del mundo. El próximo paso: ganar la Nations League. Y, a juzgar por el fútbol de España y sus resultados, sin duda alguna, el combinado nacional es el rival a batir. A las Alexia, Ona, Olga Carmona y compañía se les está poniendo cara de marcar una época. Tanto dentro como fuera del campo.