¿Quién es Arne Slot? Jurgen Klopp 'presenta' en Anfield a su sucesor a voz en grito

Jurgen Klopp solo hay uno. Su autenticidad le permite improvisar en situaciones emocionalmente difíciles, como era su despedida desde el césped del Liverpool, este domingo, después de superar por 2-0 al Wolverhampton. Micrófono en mano, el alemán no se cortó en dar la bienvenida a su sucesor en el cargo, Arne Slot, haciendo que las abarrotadas gradas de Anfield corearan su nombre, incluso antes de que el club inglés haya hecho oficial su contratación, aunque es un hecho ya consabido.

La vida de Arne Slot cambió en el momento en el que su nombre empezó a sonar como futurible en un Liverpool que deberá olvidar a una leyenda para seguir caminando sin la gorra y las gafas del alemán. La ausencia de Klopp dejará una sombra que deberá tomar como referencia este técnico neerlandés de 45 años, tras varias etapas exitosas en el fútbol neerlandés que argumentan la decisión de la directiva a la hora de confiar en su pizarra y en su currículum.

En 2020, tras estallar ya la epidemia de Covid-19 en toda Europa, el fútbol paró para preservar las garantías sanitarias. Klopp y los suyos en Liverpool debieron esperar a que la situación mejorara, pero en Países Bajos, donde Arne Slot entrenaba, la liga no sólo paró, sino que se canceló. Eso privó a su AZ de poder conseguir un hito gigante, asediando el control de un Ajax de Ten Hag que parecía muy herido cuando la Eredivisie quedó anulada. Ahí empezó a tomar peso la silueta del entrenador que ahora llegará a Liverpool.

Nacido en 1978, Arne Slot es natural de Bergentheim, una pequeña localidad de Países Bajos a pocos kilómetros de Zwolle, donde el hoy entrenador del Liverpool empezó a acercarse al fútbol. Mediocentro por inteligencia más que por presencia física, su capacidad para evaluar los partidos parece que iba más allá del césped. Preguntón con todos sus entrenadores, el joven Slot ya evidenciaba que su camino en el fútbol no parecía acabar con su carrera de jugador.

Sin demasiado éxito con las botas puestas, con una carrera larga pero sin demasiado brillo dentro de las fronteras de Países Bajos (PEC Zwolle, NAC Breda y Sparta Rotterdam), esa curiosidad en torno al fútbol despertó a través de su úiltimo club y en esa ciudad cercana. Es en el juvenil del PEC Zwolle donde Arne Slot empezó a esculpir su figura como técnico y desde la que saltó, años después, a ser asistente en el modesto Cambuur, antes de que van den Brom lo llamara desde Alkmaar para ser su segundo en el AZ.

El salto era considerable, pero no asustó a un Arne Slot que también se atrevió con las riendas del equipo cuando en 2019 le ofrecieron ser primer entrenador. Desde entonces, es ascenso fue continuo. Esa misma temporada, el AZ fue segundo en la Eredivisie, posición en la que terminó en su segundo año, donde el Covid acabó con sus opciones para enfrentar las últimas jornadas ante un Ajax que parecía herido de muerte.

Ese rendimiento llamó poderosamente la atención en Rotterdam, desde donde contrataron al técnico para hacerse con el Feyenoord, su último equipo entrenado y con quien el brillo y los títulos acabaron por llegar. Desde 2021, siempre logrando que el Feyenoord estuviera en el TOP 3 de la Eredivisie, además de ser finalista de la Conference League en 2022 (cayó ante la Roma de Mourinho), ganar el campeonato liguero en la 22/23 y hacerse con la KNVB Beker esta temporada (ante el PSV), justo antes de dar el salto a Inglaterra.

Hay similitudes entre la propuesta de Klopp y la que ha llevado al estrellato a Arne Slot. Quizá por eso la decisión no ha sido para nada un secreto. Desde hace semanas, desde que el propio neerlandés afirmó que dejaba el Feyenoord, las alarmas empezaron a sonar, pues todas las papeletas del banquillo de Anfield parecían haberse vendido en Rotterdam. El sustituto no estaba lejos de anunciarse, tras la renuncia de Klopp en el Liverpool y la de Slot en el Feyenoord, pero el secreto a voces ya está confirmado.

Y es que la relación entre ambos va más allá de su gusto por la táctica incluso antes de colgar las botas. En su etapa en el AZ y, recientemente, en el Feyenoord, Arne Slot ha configurado una idea de juego que parece cuajar bien con la intención de que a la plantilla, actual y futura, no le cueste demasiado adaptar lo realizado con lo que vendrá. Con un 1-4-2-3-1 que se asemeja a la propuesta de Klopp, Slot ha dominado el fútbol neerlandés, siendo la piedra en el zapato de PSV y Ajax para ser amos y señores de la competición.

Presión alta, en dos bloques de presión diferenciados, mediocentros como eje de juego para reiniciar la jugada, laterales participativos en ataque… La propuesta de Arne Slot casa bien con la mayoría de los detalles tácticos que ha ido probando Klopp en estos años, para crear un Liverpool ganador que, si bien es cierto que deberá ir al mercado a relevar a algunas de sus figuras, sabe que podrá beber de algunos de sus mejores piezas presentes en estos últimos años con un director de orquesta que no moverá de manera radical los principios fundamentales de la pizarra del alemán.

A pesar de saber que la transición táctico será amable, suplir a una leyenda como la que ha conseguido levantar Jürgen Klopp en Liverpool no será nada sencillo. Si bien es cierto que los últimos dos años han reflejado algunos problemas poco habituales en equipos de esta altura competitiva, la sensación es que el mito de Klopp es ajeno a momentos de inestabilidad. Su figura es algo más que la de un entrenador, pues devolvió la calidez a una entidad que empezaba a oxidarse en las ascuas de un pasado brillante pero lejano.

Las comparaciones aparecerán durante una 24/25 que se antoja de transición, pero que deberá responder a la exigencia de un club potente, con gran inversión y a quien el propio Klopp ha colocado en ese escalón competitivo que obliga a luchar por todas las competiciones cada temporada. Un escalón en el que el Liverpool no estaba y que debe a una de las grandes figuras, sin duda, de la historia de Anfield. De ahí el duro papel que ha aceptado Arne Slot, en el que tendrá que convencer a su nueva parroquia de que que es digno de su legado.