Un Chelsea a medias: sin gol pero con Kanté

El Chelsea sigue atragantado. La última decisión fue prescindir de Graham Potter en el banquillo, vislumbrando un futuro mejor a corto plazo: hay unos cuartos de final de Champions League contra el Real Madrid y restan suficientes jornadas en liga para escalar puestos en la clasificación. El primer capítulo de Bruno Saltor como técnico interino, mientras en los despachos negocian otras opciones, constata que hay un problema que sigue latente (la ausencia de gol) y una buena noticia (Kanté).

El resultado de 0-0 contra el Liverpool deja a los blues en la 11ª posición de la Premier League, por el 8º puesto que ocuparán los de Klopp con un partido menos.

¿Y qué se puede concluir del primer partido de Bruno Saltor como entrenador en Stamford Bridge? Empezando por la alineación -y la convocatoria-, hay alguna conclusión. Aubameyang no se sentó ni en el banquillo, continuando así con la línea de Potter, Kanté saltó directo al once tras un pequeño cameo durante el fin de semana mientras que Mount o Mudryk fueron suplentes. Dicho de otra manera, la punta de ataque fue para Havertz y Joao Felix, manteniendo el esquema habitual de 3-5-2.

Los dos delanteros fueron protagonistas del partido, aunque sin resultados goleadores. Esto es: tuvieron ocasiones, incluso muchas, pero no metieron. El Chelsea acabó con 2.50 xG y tanto el portugués como Kovacic fallaron oportunidades muy claras. Havertz sí que marcó, pero lo hizo de rebote y con la mano, así que el VAR lo anuló.

Sin embargo, tanto el desempeño defensivo -un pletórico Fofana, el liderazgo de Koulibaly y el buen partido de Cucurella- como el regreso de Kanté traen motivos para la esperanza en Stamford Bridge. No hay goles a favor, es verdad, pero tampoco en contra. Con Thiago Silva fuera por lesión, la decisión de Saltor fue confiar en Cucurella por delante de Badiashile, puesto que el francés no está inscrito en la Champions League y prefirió seguir dando continuidad a su línea defensiva.

Y Kanté, claro, que esto es clave. El centrocampista cambia cualquier conversación al respecto del Chelsea. A este nivel sube el suelo competitivo de su equipo: roba como siempre, presiona como siempre, aparece en todos lados como siempre. O, al menos, como hace mucho tiempo: llevaba desde agosto lesionado. Su regreso es un motivo para el optimismo en los blues de cara a la Champions League. Kanté fue clave en el título de 2021 y llega en el momento perfecto para culminar la 2022/23.