EVERTON 2 - LIVERPOOL 0

El Liverpool patina en el derbi y dice adiós a la Premier League

El equipo de Klopp sucumbe contra el eterno rival y, salvo sorpresa, el alemán se irá del club sin una nueva Premier.

Klopp, desesperado durante el derbi. /REUTERS
Klopp, desesperado durante el derbi. REUTERS
Marcos Durán

Marcos Durán

La Premier League, en la última temporada de Klopp, se escapa. Matemáticamente es posible, sí, pero anímicamente, no. Porque son tres puntos menos que el Arsenal y el City tiene dos partidos menos. Además, la diferencia de gol es menor que la de los Gunners. El Liverpool se ha pinchado o, mejor dicho, se ha patinado en estas dos semanas.

Klopp se despedirá de Anfield sin otra Premier League y el hecho de que la pierda frente a su eterno rival, a pocos metros de su estadio, demuestra que un derbi es otro partido totalmente distinto a todos, que da igual que el Everton esté peleando el descenso (con este triunfo se aleja bastante), porque cuando en juego está dejar sin la oportunidad de ser campeón a tu archienemigo, todo cambia y el encuentro se convierte en una final.

Goodison Park fue un hervidero y vivió un partidazo. Y se llevó una alegría en casa, porque desde la temporada 10/11 que el Everton no le ganaba a los 'reds' como local y esos son muchos años, 14 temporadas, muchas bromas entre vecinos y familiares, muchas burlas de la parte roja de Liverpool a la azul. Pero hoy se acabó.

El Liverpool lo intentó de todas las maneras posibles, pero su máxima figura, Salah, no apareció. Darwin lo intentó pero más de lo mismo y el que más cerca estuvo de marcar fue Luis Díaz, pero tampoco tuvo suerte el colombiano y sus disparos fueron parados por Pickford o por el poste.

El portero inglés, poco a poco, se iba convirtiendo en figura. Más allá de los goles de Branthwaite y Calvert-Lewin (golazo de cabeza), el guardameta fue el que sostuvo a su equipo. El Liverpool se quedaba sin ideas, eran todo centros laterales que el Everton no tenía problemas en rechazar, sus centrales estaban cómodos y el triunfo, pasito a pasito, estaba más cerca.

Muchos de los aficionados que aplaudían a Calvert-Lewin cuando era sustituido lo hacían con una nueva sensación: ganarle al Liverpool en casa. Y eso, sumado al hecho de dejar al eterno rival sin opciones (casi) de ser campeón, hacía que el ruido fuese ensordecedor. Ni en la última jugada del partido Salah pudo, porque Pickford se volvió a lucir. Klopp, destruido, decía adiós a la Premier y todo el Liverpool veía cómo su oportunidad de ser campeón se iba desvaneciendo.

Mes de abril fatídico

A pesar de haber ganado dos partidos este mes, el equipo perdió ante el Palace, empató ante el United y quedó eliminado de la Europa League con la Atalanta. Los de Klopp se han quedado sin gasolina en el momento clave de la temporada y eso se ha notado en estos encuentros, donde la frescura no fue la misma que la de los meses anteriores.