El 'querido' Ivan Toney vuelve a lo grande y toca a la puerta del mercado

260 días más tarde, el Brentford ha recuperado a Ivan Toney. Casi nueve meses han hecho falta para ver de nuevo en acción al que, en el momento de su 'adiós' a la competición, era el tercer contendiente a la Bota de Oro de la Premier League, por detrás de dos auténticos obsesos del gol como Harry Kane y Erling Haaland. Sumaba 20 dianas, por las 26 del ahora ex artillero del Tottenham Hotspur y las 35 del noruego, cuando en la jornada 35 de la pasada edición le aplicaron la sanción que lo mantuvo apartado del verde hasta ayer. Llegó y besó el santo, 19 minutos le hicieron falta para ejercer como el capitán que es.

Toney fue inhabilitado el 17 de mayo del año pasado, acusado de cometer apuestas ilegales durante febrero de 2017 y enero de 2021 por un total 262 ocasiones. A raíz de esta suspensión, no pudo trabajar con el resto del equipo hasta pasados los cuatro primeros meses de los ocho que la constituían en total, por lo que no fue hasta septiembre que se unió a la dinámica del grupo. Durante este tiempo, solo ha podido disputar partidos a puerta cerrada, como el viral encuentro del pasado 6 de enero en el que contribuyó con hat-trick a la victoria por 5-1 del filial del Brentford.

En ausencia del británico, que vivía un momento lúcido debutando recientemente con Inglaterra, los Bees se aprovecharon de la inercia de su impacto para ganar los tres partidos restantes de la temporada 2022/23. West Ham, Tottenham y Manchester City, casi nada. Sin embargo, esta campaña sólo han arañado cinco victorias en las 19 jornadas que se han visto obligados a sobrevivir sin su estrella. De hecho, desde el 2 de diciembre (3-1 contra el Luton Town) acumulaban cinco derrotas consecutivas. Tal fue la felicidad de la afición por volver a ver a su querido Toney como punta de ataque, que el Brentford Community Stadium lo recibió como si se tratara de un fichaje multimillonario. Aunque, prácticamente, lo es.

Su regreso es casi de película. De un film con final anunciado. El viernes su entrenador confirmó lo que el entorno rojiblanco esperaba. "Mañana será titular y será el capitán", dijo Thomas Frank en la previa. Y tal como muchos se olían, el hambre de Toney tras meses de parón se tradujo en un gol reivindicativo que efectivamente certifica su vuelta por todo lo alto.

Por si no estuviera perfectamente rematado el cuento, el '17' cerró el círculo volviendo a la casilla de salida. Donde dejó su relato antes de apartarse. Su último gol, en una victoria en casa ante el Nottingham Forest el 29 de abril de 2023, fue de falta directa. Ayer se pidió el balón para en poco más de un cuarto de hora dar un pase a la red por fuera de la barrera y firmar una maravilla para los fans. También en casa y también contra el Forest. Poético.

La alegría, eso sí, puede durar bien poco en Brentford. Toney tiene un cartel inmejorable en las islas a pesar de su suspensión. El Brentford no consideró en ningún momento deshacerse de su estrella, ni tampoco apartarlo de la dinámica una vez tuviese de nuevo permiso para volver. Tampoco ha salido de los planes futuros de los gigantes ingleses y el propio futbolista no hace ni mucho menos ascos a esa vía de salida.

"Es obvio que quiero jugar en grandes clubes y pelear por títulos. Si alguien llega y paga lo necesario, quién sabe. En enero o cuando sea, estoy listo", explicó esta semana ante los micrófonos de Sky Sports. Aunque para él lo importante sea "disfrutar y jugar ya". Lo malo, que es el más deseado.

El inglés de 27 años, valorado en unos 35 millones de euros, es un caramelo en los últimos diez días de mercado invernal que restan. Ha demostrado que físicamente no ha perdido ni un ápice del potencial que mostró el año pasado y que, desde luego, el olfato lo tiene más afilado que nunca. Mientras, Arsenal, que en palabras de Mikel Arteta necesita "un killer", y Chelsea son los dos clubes que andan en una búsqueda incesante de un delantero centro que les aporte ese instinto en área rival. Y Toney, para dos clubes pudientes, se pone a tiro.