El Tottenham protege y mima a Richarlison: "Te queremos"

Todo ha sido cariño desde que Richarlison confesó que algo no iba bien, que su cabeza no estaba en orden. Lo dijo hace unos días, explicando que iba a buscar ayuda psicológica. "Para trabajar en mi mente", añadió. Y dio los motivos: "La gente que sólo tenía un ojo puesto en mi dinero se alejó de mí. Ahora las cosas empezarán a fluir, estoy seguro de que tendré una buena racha en el Tottenham. Esta semana me voy a sentar a hablar con ellos, necesito una buena racha, coger ritmo de partido. Esta mala fase pasará. Pero es parte del fútbol, se trata de seguir trabajando duro".

El brasileño fue criticado durante su primer año en los Spurs: un gol en la Premier, tres entre todas las competiciones. Números insuficientes. Pero había algo más, y no era sólo su conflictiva relación con Antonio Conte, que ya se fue, sino un algo más que se encargó de enseñar en público. Desde entonces, la reacción del Tottenham ha sido la de mostrarle cariño y apoyo. A todos los niveles. Y empezando por su entrenador.

Ange Postecoglou, en rueda de prensa, dejó un mensaje lleno de humanidad y cercanía a su futbolista. Fue el primer paso. "Lo que diré es que nadie tiene una vida perfecta. La gente cree que los futbolistas hacen cosas bien y que tienen todo el dinero que necesitan, pero eso no los hace inmunes para la vida", explicó.

Con la ausencia de Kane, la responsabilidad goleadora del Tottenham se ha repartido. A Richarlison le toca una cuota, pero el brasileño no ha sido el elegido para ser delantero en las últimas jornadas. Heung-min Son, en su lugar, ha ocupado la posición de nueve. Como también sucedió ante el Sheffield United, que en la quinta jornada de la Premier League se colocó con un 0-1 en el marcador en el minuto 80.

La decisión del técnico de los Spurs fue prescindir de Son e introducir a Richarlison en punta. También metió a Brennan Johnson -debut- y a Perisic, luego a Hojbjerg y a Emerson. Contó con el beneficio de un descuento largo: hasta 12 minutos de añadido, muchos por la lentitud de los futbolistas visitantes en cada balón parado y otros tantos por las veces que salieron las asistencias al campo. Y llegaron los goles.

Richarlison entró enchufado. Lo que más le hacía falta a su equipo, que había creado ocasiones y había llegado al área pero no había superado a Foderingham.

Primero, remató de cabeza un córner. Impecable, letal. 1-1. Poco después, encontró espacio entre líneas y asistió a Kulusevski. Remontada, 1-2. La locura. Con goles en los minutos 108 y 100 (la remontada más tardía en la historia de la Premier) lograron tres puntos que mantienen invicto al Tottenham: cuatro victorias, un empate.

El mensaje del Tottenham en redes sociales se centró en Richarlison. Un momento tan decisivo, un momento tan especial, un momento para su jugador: "Te queremos, Richy". Artífice de la remontada de los Spurs, marcando y asistiendo, y poniendo la primera piedra en su recuperación a todos los niveles: "Es un poco la parte fuera del campo que acabó interponiéndose en mi camino. Aunque quieras hacer las cosas bien, acaba saliendo mal", dijo hace unos días. Ya empiezan a salir bien.