RAYO MAJADAHONDA 0 - PONFERRADINA 1

Ejemplar protesta del Rayo Majadahonda contra el racismo: 30 segundos sin jugar en homenaje a Sarr

El equipo posó junto a la Ponferradina con una enorme pancarta en apoyo a su guardameta.

El homenaje del Rayo Majadahonda y la Ponferradina a Sarr./
El homenaje del Rayo Majadahonda y la Ponferradina a Sarr.
Jonás Pérez

Jonás Pérez

El Rayo Majadahonda ha demostrado que en la batalla contra el racismo no hay excusas. El club ha posado junto a su rival, la Ponferradina, antes del arranque con una enorme pancarta negra sujetada por todos los futbolistas con el mensaje: "Un equipo, una familia. Con Cheik, contra el racismo". Pero no se quedaron ahí.

El equipo majariego ganó el sorteo y le correspondía sacar de centro. Al escuchar el pitido inicial, decidieron echar el balón atrás y estar 30 segundos sin jugar, para los aplausos del público presente en el Cerro del Espino. Un tiempo, por supuesto, que fue respetado de forma íntegra por su rival, que acompañó la causa en señal de apoyo a Sarr.

El fútbol se cerró con una nueva derrota del Rayo Majadahonda, por cero goles a uno, con Costa como artillero. El triunfo deja a la Ponferradina como quinto clasificado, a cinco puntos del líder Deportivo y a los majariegos como más colistas. Tras 31 jornadas suman solo 21 puntos (24 menos los tres de la sanción) y se encuentran a 13 de la permanencia. Casi un imposible.

No obstante, ni la drástica situación clasificatoria ha impedido al Rayo Majadahonda seSarrr firme a sus principios y negarse a continuar en el campo tras los presuntos insultos racistas a su guardameta Sarr. El Juez decidió imponer una contundente sanción al club en lo que consideró como retirada injustificada. De hecho, enfatizó en la necesidad del club de asumir su responsabilidad.

La entidad asumió las consecuencias y fue severamente castigada, a falta de la posibilidad de apelar. El Majadahonda ya emitió un comunicado informando de que estaban estudiando junto a los abogados del club presentar una reclamación en defensa de sus intereses. Una postura certera, que se ha vuelto a aplicar este sábado, negándose a jugar durante treinta segundos.

Sarr, presente

Pese a ser la víctima de toda esta historia, Sarr fue expulsado por el árbitro tras saltar la valla de seguridad y enzarzarse con un aficionado, del que agarró de la bufanda. A posteriori, tras ver la roja, se revolvió contra el propio colegiado, que expuso en el acta que el futbolista trató de agredirlo. El Juez desoyó esta última parte y le aplicó dos partidos como castigo al entender como "leve" su comportamiento. Una pena suave en relación a que se enfrentaba hasta a ocho encuentros de sanción por sus infracciones.

Sarr estuvo acompañando al equipo a lo largo del encuentro y fue el gran reclamo de las cámaras de televisión, que tuvieron más presencia que la habitual en el estadio del Rayo Majadahonda. Pese a que los resultados siguen sin acompañar, el club ha vuelto a dar una lección con una condena masiva y contundente al racismo al que tuvo que hacer frente su guardameta la pasada semana.