Roberto Fernández, el chico de Puente Genil por el que preguntan en Primera y Segunda, llena de ilusión al Málaga: "Lo vamos a hacer"

El Málaga jugará la final de los playoff de ascenso a Segunda División. Lo hará después de superar al Celta Fortuna, en un partido agónico que contó con emoción hasta el final y un nombre propio: Roberto Fernández. El delantero nacido en Puente Genil se vistió de héroe en el partido más importante de la temporada para los de Sergio Pellicer, que supieron reponerse al gol inicial del conjunto celeste gracias a una demostración de coraje y orgullo que les llevó a remontar el encuentro en el minuto 88, cuando tan sólo restaban dos y el añadido, y la prórroga parecía ya inevitable.

El segundo tanto del delantero, que recaló en la cantera del Málaga en categoría cadete procedente del Córdoba, desató la locura en La Rosaleda. El aspecto del feudo malagueño ("no hay entradas", lucían sus taquillas) fue inmejorable, con gente de todas las edades en las gradas y un objetivo común: conseguir el ascenso y dar un paso más para salir del pozo que supone Primera Federación.

"Quedan dos partidos para cumplir el objetivo, pero tranquilidad, porque son dos finales y lo vamos a hacer", respondió al término del partido. A modo de curiosidad, inmediatamente después de anotar el 2-1, amagó con quitarse la camiseta y, al recordar que ya había visto una cartulina amarilla, frenó su impulso y se abrazó con el resto de sus compañeros.

La eliminatoria llegó a La Rosaleda con todo por decidirse y Roberto Fernández, por el que han preguntado equipos de Primera y Segunda, dictó sentencia. Su doblete permite a Málaga seguir soñando y convierte al equipo de Pellicer, por su experiencia y poso competitivo en momentos complicados, en uno de los favoritos para el ascenso. "Estoy centrado en hacer lo que tengo que hacer para que el Málaga pueda volver a donde se merece", mencionó, preguntado sobre su futuro.

El Málaga se medirá al vencedor del partido entre el Nástic de Tarragona y el Ceuta (2-2 en la ida). Lo hará, eso sí, con su goleador con la flechita hacia arriba: Roberto Fernández ha anotado 18 goles y repartido cuatro asistencias (22 tantos producidos) esta temporada, después de militar en el filial del Barça el curso pasado.