CHAMPIONS

El Real Madrid se la juega en la encerrona que prepara el Vålerenga: hierba artificial, frío y 5.000 entradas vendidas

Las madridistas ganaron por 2-1 en el partido de ida de la ronda previa a la fase final de la Champions.

El Real Madrid posa antes de partido ante el Vålerenga en el estadio del club noruego. /Real Madrid CF
El Real Madrid posa antes de partido ante el Vålerenga en el estadio del club noruego. Real Madrid CF
Sandra Riquelme

Sandra Riquelme

En unas horas, el Real Madrid se enfrenta a su futuro en la Champions (19:30h, Real Madrid TV). Aunque parezca mentira, por la altura del curso a la que nos encontramos, el conjunto madridista se juega media temporada. Las de Alberto Toril disputarán el partido de vuelta de la ronda previa a la fase final de la máxima competición continental ante el Vålerenga. Y las noruegas preparan una trampa. 

La que se presuponía como una eliminatoria tranquila, un mero trámite, se ha convertido en una prueba de fuego. Y son varios los condicionantes que han acabado convirtiendo el partido ante el Vålerenga en un choque trascendental para los intereses del club blanco que, de caer eliminado, sería la primera temporada que se quedaría sin jugar la Champions. Además, tampoco ingresaría los 500.000€ que la UEFA otorga a todos los participantes en la fase de grupos de la Champions League.

El primero de ellos, fue el partido de ida. Aunque las de Alberto Toril vencieron por 2-1, este resultado les deja sin margen de error en el encuentro de ida. El gol de Claudia Zornoza, en el minuto 4, aventuraba un partido sencillo para las madridistas. Sin embargo, las noruegas empataron el partido y les metieron el miedo en el cuerpo, destapando uno de los grandes lunares del Real Madrid en este inicio del curso: su fragilidad defensiva. Finalmente, Rocío Gálvez anotó el 2-1. Pero no impidió que le sabor de la victoria fuese amargo.

El frío, el césped y cerca de 5.000 entradas vendidas

A la mañana siguiente del partido, el Vålerenga ya puso en marcha toda su maquinaria. En menos de 24 horas, ya se habían vendido 3.000 localidades para el encuentro de ida. A pocas horas para el encuentro, las entradas vendidas ya superan las 5.000. Si bien es cierto que el Intility Arena cuenta con una capacidad para más de 16.000 personas, su aspecto se asemeja al de un estadio inglés, con las gradas muy cerca del terreno de juego -a diferencia de lo que ocurre en el Di Stéfano- creando una atmósfera muy especial.

Además, otro dato a tener en cuenta: el campo es de hierba artificial, una superficie a la que no está habituada el Real Madrid, que juega y entrena en hierba natural. El frío será otro de los condicionantes. A la hora del partido, a las 19:30h, se prevén unos cinco grados, que descenderán a los cuatro a medida que transcurra el encuentro.

En cuanto a lo deportivo, la buena noticia es que Alberto Toril tienen a todas sus futbolistas disponibles. Menos, por supuesto, a Caroline Weir, que fue recientemente operada de su rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda. A pesar de sus triunfos, el Real Madrid la echa mucho de menos.