¿Cómo es enfrentarse al Barça?: "Es mejor no intentar robarles el balón porque te hacen un rondo"

"Desde hace un par de temporadas, la sensación es que ya no es que sea imposible ganarlas, es que lo es hasta puntuar", comenta al otro lado del teléfono una de las voces autorizadas del vestuario del Villarreal. Sus frases desvelan un sentimiento común en la mayoría de las plantillas de la Liga F: el Barça es imparable. "Les tenemos envidia sana, a todo el mundo le gustaría jugar allí, son el ejemplo a seguir", añaden desde el norte. Profundizamos en el sentimiento que genera el Barça en sus rivales -"Tienen el poder, te sugestionas cuando las tienes enfrente"- a través de los testimonios corales de algunos de los vestuarios de la Liga F.

El domingo pasado, las de Jonatan Giráldez ganaron al Sporting Huelva y se alzaron con su cuarto título liguero consecutivo, el octavo de su historia, a tres jornadas para el final. Sus números hablan por sí solos: 108 goles a favor, cinco en contra y 26 victorias en 26 partidos. "Cuando planificas el mes y ves que te enfrentas a ellas, su partido lo restas. Es decir, no cuentas ya con esos tres puntos. Es verdad que, a medida que se acerca el día y preparas el partido, piensas: '¿Y si justo somos nosotras las que sacamos algo? Intentas motivarte, pero luego sabes que aunque tú tengas tu mejor día y ellas el peor, te van a ganar", apostillan desde la Comunidad Valenciana.

Además de por su fútbol, las jugadoras del Barça también impresionan por sus condiciones físicas. "Son como robles, chocas contra ellas y están durísimas". Ves a Oshoala y dices: '¿Pero cómo voy a ganarle a esta persona?', cuentan las jugadoras del Villarreal.

Las castellonenses -que marchan antepenúltimas y están tan solo un punto por encima del descenso- son unas de las que más han sufrido ante el Barça. En el partido de ida, perdieron por 1-4 y en la vuelta sucumbieron en el regreso de Hansen (5-0). "Es increíblemente habilidosa, dispara con la fuerza de un chico", comentan desde el 'submarino amarillo'. En todos los vestuarios consultados, la opinión sobre la noruega es unánime: "Es como jugar con una más". Además, desde el de la Real Sociedad añaden: "Es increíble que nunca haya ganado un premio ni haya estado nominada, está infravaloradísima y es de las mejores del mundo".

Volviendo al aspecto físico, las 'txuri-urdines' saben bien de lo que hablan. Este curso, el Bayern de Múnich las privó de jugar la fase final de la Champions y la superioridad física de las germanas fue diferencial. "Es como si te chocases contra un muro, es brutal", resaltan sobre el poderío culé. "Hasta Aitana, que puede parecer que está menos fuerte... tiene unos brazos y unas piernas. Y lo de Geyse...", añaden en el centro de España, en otro de los vestuarios consultados.

El aura que rodea a las jugadoras del Barça cuando están enfrente de sus rivales lleva a algunas futbolista a "sugestionarse". "Tienen el poder, provocan ese efecto en ti", indican en el Villarreal. Y también señalan a las futbolistas del Real Madrid. "Creo que si me chutase otra jugadora que no fuese de ninguno de esos dos equipos, mi confianza aumentaría y mi toma de decisiones sería mejor", asegura una de las porteras que más ha sufrido el potencial del Barça en este curso.

"Sabes que siempre que te enfrentas a ellas, vas a sufrir el doble. La comunicación y la intensidad entre nosotras se multiplica", dicen desde la Real Sociedad. A priori, un centro del campo formado por Aitana Bonmatí, Patri Guijarro y Alexia Putellas -o Keira Walsh, como hasta ahora- parece difícil de parar. Ellas lo confirman: "Es casi imposible", "Es mejor no intentarles robar el balón porque te hacen un rondo", "Su movilidad es de locos, lo mires por donde lo mires siempre consiguen crear la superioridad", destacan las jugadoras consultadas.

La Real Sociedad es uno de los equipos que más cerca ha estado de "rascar" algo positivo ante el Barça. En el partido de ida, se adelantaron en el 44' y tan solo los goles de Marta Torrejón (62') y Lucy Bronze (89') les privaron del triunfo. El próximo sábado (18:15h, DAZN), ambos se volverán a ver las caras. "Para sacarles algo, para empezar, tienen que tener un mal día, que no les salgan las cosas. Después, que a tu portera le salga todo y -por supuesto- aprovechar todas las que tengas", señalan desde el vestuario realista.

Otro de los factores que destacan de este Barça es su gen competitivo. Hace unos meses, Sánchez Vera -el técnico del Levante- lo destacaba en una entrevista en Relevo. "Si me diesen un cheque en blanco, ficharía a Aitana Bonmatí. Le pondría mi sueldo y el de mi plantilla (risas). Es esa futbolista que tiene esa capacidad técnica- táctica, esa capacidad física, ese carácter, ese gen Barça, ese gen competitivo, agresivo, que yo creo que marca a todas las jugadoras culés. El cómo compiten, mas allá del nivel futbolístico", señalaba. Su segunda, Erika Vázquez -leyenda del Athletic y que colgó las botas el año pasado- también se ha 'rendido' en más de una ocasión a la superioridad culé.

"Nunca se cansan, aunque te hayan metido unos cuantos. A veces, da la sensación de que compiten entre ellas por ver quién es la mejor del equipo, sin contar con el rival", subraya una exfutbolista que también ha sufrido en sus carnes a Patri Guijarro y compañía. "Tienes la esperanza, como el otro día contra el Sporting Huelva, que saquen a gente que no juega demasiado, pero es que esas jugadoras también te ganan. Y si van un pelín apuradas, pues hacen dos o tres cambios y listo", señala otra jugadora que se ha enfrentado recientemente a ellas.

"Mira, el otro día estábamos con la sesión de vídeo y nos pusieron su salida de balón y yo pensaba: 'Claro, pero eso lo hacen Sandra Paños y sus defensas. Pones a otras y no sale'", confesaba otra de las futbolistas que se enfrentará próximamente a ellas. Y lanzan una advertencia y un sentimiento que parece estar generalizado: "Nadie se atreve a invertir en el fútbol femenino como el Barça".