CRISIS EN LA FEDERACIÓN

Pedro Rocha se verá con FIFA en los próximas días para conocer la inminente hoja de ruta en la RFEF

Sondeó a los barones para arrancar los comicios ya, pero todo dependerá de estas directrices. Su presencia en la Copa, en el aire.

Pedro Rocha, presidente de la Gestora de la RFEF (derecha), al lado de Alejandro Blanco (COE). /GETTY
Pedro Rocha, presidente de la Gestora de la RFEF (derecha), al lado de Alejandro Blanco (COE). GETTY
Alfredo Matilla
Jonathan Ramos

Alfredo Matilla y Jonathan Ramos

En mitad de la maravillosa aventura que está viviendo Pedro Rocha al frente de la Real Federación Española de Fútbol a sus 70 años, cuando ni en sus mejores sueños se veía ahí en la poltrona, asoma en breve otra semana especial marcada en rojo en su calendario. La final de la Copa del Rey, la fiesta por excelencia del fútbol español y del mundo federativo y que enfrentará a Athletic y Mallorca, se celebra en Sevilla el próximo 6 de abril y el actual presidente de la Comisión Gestora no se quiere perder una cita tan golosa. El problema es que la crisis galopante en la RFEF igual le impide llevar a cabo su agenda.

El extremeño sabe que en este partido en La Cartuja, estadio puesto en solfa por las autoridades judiciales por presuntos contratos irregulares en su remodelación, entregaría nada más y nada menos que un título al lado del mismísimo Rey. Y ese plan tan solicitado invita a no saltárselo por nada del mundo. La pre-campaña empezó hace muchos meses. Sabe que por unas u otras razones pueden ser sus últimos días de gloria al frente de la nave y no quiere perderse una jornada así de notoria. Por eso mismo, aún con despachos precintados en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas, la semana pasada se marchó a Londres para estar con la Selección y volvió a repartir con su mejor sonrisa insignias y abrazos en el antesala del encuentro del Santiago Bernabéu frente a Brasil. Como dicen alguno de sus asesores de máxima confianza, "lo que está saliendo en prensa es el pasado y nosotros somos el futuro". Así que él, jaleado, sigue a lo suyo, sin aplacarle demasiado que hasta ya sale en los últimos titulares.

Aun así, sus deseos permanecen en estos momentos en al aire. De hecho, se puede decir que sus planes ya han saltado completamente por los aires. Tiene pensado reunirse con FIFA en los próximos días, como adelantó Cope y ha confirmado Relevo, para analizar la crisis actual en la Federación y conocer la hoja de ruta del máximo organismo mundial para solucionarla. Pedro Rocha se ha puesto a su servicio, una vez que ha asimilado la carta conjunta desvelada por AS que le llegó con la firma de FIFA y UEFA. Incluso se ha prestado voluntario para viajar a su sede en Suiza con tal de mantener un encuentro cuanto antes, algo que no está confirmado que vaya a ser así hasta el punto de que la ciudad elegida aún está por cerrarse. Desde la RFEF recalcan que esta cita ya estaba pactado, pero otras fuentes dentro de la casa aseguran que es ahora, en los últimos días, cuando se ha acelerado todo.

Mientras, ayer mismo, Rocha telefoneó a los presidentes territoriales más afines para compartirles su intención de convocar de inmediato a la Comisión Gestora que debe arrancar de una vez las elecciones. Un proceso para elegir al presidente que sustituya oficialmente a Luis Rubiales para agotar el mandato 2020-2024 y que luego, después del verano, derive en unas elecciones completas para votar a la persona que deberá liderar la institución de 2024 a 2028. Sin embargo, la lluvia de acontecimientos alrededor de la RFEF le impidió oficializar esa convocatoria de Gestora vía email y ya, salvo sorpresa, no lo podrá hacer hasta el próximo lunes si es que no cambia de estrategia o alguien le hace ver que no es el momento de tensar más la cuerda.

De confirmarse la celebración de la Gestora, hay muchas opciones para que la fecha elegida sea el 3 de abril (miércoles), ya que se necesitan 48 horas de días hábiles entre la citación realizada electrónicamente y al celebración de esa reunión, sea de manera presencial o telemática. La última reunión fijada de este órgano de gobierno, para dar el pistoletazo de salida a las elecciones, fue la de la semana pasada, coincidiendo con la entrada de la UCO en Las Rozas, hecho que obligó a suspenderla, a retrasar las elecciones y a que más de un directivo se diera la vuelta sobre la marcha. Unos por carretera, en plena A-1, y otros no saliendo ni de la estación de Atocha a la que llegaron a primera hora para coger otro AVE que los llevara de vuelta a casa.

De ser así, y convocarse la Gestora a inicios de la próxima semana, habría que esperar al orden del día que se comunica. Según anunció la propia RFEF, se le iba a elevar la petición de una auditoría forense de todo lo que está sucediendo en la Federación. Así que ése será uno de los puntos clave de la reunión. Pero el otro debería ser las convocatoria de elecciones. Un paso que obligaría a Rocha a dimitir protocolariamente como presidente de la Gestora (una vez que ya aseguró no presentarse a la reelección en la federación de Extremadura y dejar la Comisión Económica y la Mutualidad) si quiere dar el paso y presentarse dentro de los siguientes cinco días hábiles como marcan las normas. Rocha, según los que mejor le conocen, se ve con fuerza y su gente airea tener apoyos detrás (conocidos y en algunos casos sorprendentes) que le animan. Pese a que hay gente dentro de la RFEF que desliza que medita no seguir hacia delante, más para dar una imagen de sensatez como guiño a UEFA y FIFA que como un deseo real. Y ahí, en ese momento revelador de la convocatoria si es que se llega a ese punto próximamente, entrará en juego su debate interno y el de sus guías: si hacerlo de manera inmediata (miércoles, jueves o viernes) y dejar de representar a la Federación en la final de Copa, o esperarse al lunes o martes siguiente... Tiempo tiene.

El manejo de los tiempos

Otra opción, que gana peso, es que FIFA entre de inmediato en Las Rozas con los tanques imponiendo un gobierno normalizador y disolviendo la Comisión Gestora actual en la institución con el objetivo de que se garantice la estabilidad y la limpieza del próximo proceso electoral, que habría que ver en ese caso si sigue la hoja de ruta actual (dos procesos diferentes) o se modifica (uno solo). De ser así, a Rocha podrían quedarle días en su actual posición y por tanto ver el Athletic-Mallorca por la tele.

Palco de honor del Santiago Bernabéu en el pasado España-Brasil.  RFEF
Palco de honor del Santiago Bernabéu en el pasado España-Brasil. RFEF

Como también sucedería si el Tribunal Administrativo del Deporte lo inhabilita tras la denuncia de Miguel Galán que el CSD ya ha elevado al TAD y que, seguramente, resuelva el próximo jueves 4 de abril con su informe no vinculante. Según algunos expertos de la máxima solvencia no se espera una sanción a Rocha por el mero hecho de que el CSD no se ha mojado de nuevo en su traslado del caso, debido a que aquí nadie quiere arriesgarse a cometer algún tipo de prevaricación administrativa y porque fue el propio Víctor Francos (antecesor de Uribes en el Consejo) el que le dio cuerda durante meses para no hacer elecciones sólo a presidente.

Aunque otras fuentes no descartan que la sanción tenga más sentido que nunca y sea un acuerdo más dentro del pacto del Gobierno y la FIFA que llevan semanas consensuando para limpiar la casa, poner un interventor y empezar de cero. Hay datos reveladores de que nadie quiere cuentas con la RFEF hoy, asegura un presidente territorial: "Uribes y Pilar Alegría no estuvieron en el España-Brasil y el representante del CSD en el partido contra el racismo, Fernando Molinero, se sentó más lejos de lo que le tocaba...". Veremos cuántas ganas tiene Felipe VI de aparecer en algunas fotos comprometidas. Si su gestión se considerara una infracción muy grave, y siempre y cuando se incoe expediente sancionador, la Comisión Directiva del CSD podría suspender provisionalmente a Rocha y no inhabilitarle, por lo que podría concurrir a unas las elecciones. Eso sí, si ganase no podría ejercer mientras dure la suspensión. Y si luego fuera sancionado sería destituido si hubiera llegado al cargo.

Sea como fuera, Rocha tendrá difícil estar en Sevilla. Y si lo está, será con la crítica de nuevo posada en su espalda. El actual presidente de la Comisión Gestora tenía ya más o menos claro a quién dejar su puesto en la misma en el momento en el que dimita como marcan los estatutos. Antes, lo habitual era poner en ese sillón al presidente territorial más veterano de los 23 que hay. Algo que ya le tocó a Marcelino Maté (presidente de la federación de Castilla y León) en diciembre de 2017, cuando Ángel María Villar fue inhabilitado y se abrió un proceso electoral que enfrentó a Rubiales contra Juan Luis Larrea (de la Guipuzcoana). El burgalés fue el más votado por sus compañeros. Entonces, el propio Larrea había hecho de presidente interino desde que Villar entró en la cárcel a mediados de julio de ese año, por lo que tuvo que dimitir para poder presentarse a las elecciones. Eso permitió, entre otras cosas, que Maté presidiera la final de Copa de 2018 entre el Barça y el Sevilla en el Metropolitano (5-0) con el adiós de Iniesta. Pero ahora el modus operandi ha cambiado.

Los próximos presidentes

En estos momentos, siendo lo más lógico, parece improbable que Maté vuelva a repetir. Entre otras cosas porque se modificaron los estatutos y ya no hay votación como tal ni existe la norma de que tenga que ser un vicepresidente el heredero elegido o en su defecto el tesorero (en este caso Eduardo Bandrés). Le tocaría a Maté por veteranía, pero aunque es una voz autorizada y muy tenida en cuenta en la casa ―dicen que el primero por el propio Rocha―, no es demasiado cercano a la corriente que defienden esos asesores que apoyaron el Rubialismo. Maté tiene otros planes mejores para la RFEF y ponerlo ahí sería peligroso para la dirección que se mantiene.

Por este motivo, la libertad de elección le da más margen a Rocha para poner a alguien de su cuerda si es que le da tiempo a materializar este deseo. Y ahí aparece con fuerza Rafael del Amo (federación de Navarra y responsable del fútbol femenino en la RFEF que amagó con dimitir tras la 'Asamblea de la vergüenza' y siguió). La idea original era que la Comisión pudiera votar entre él y algún otro candidato de consenso como Pep Sansó (Baleares), pero las cosas han cambiado mucho internamente desde que se originó esta estrategia. Pero de estos nombres saldría el elegido siempre y cuando FIFA no ponga antes a alguien externo porque, además, el resto de barones no quiere heredar lo que consideran un marrón. La duda es si el sucesor de Rocha, sea el que sea, se estrenará en la final de Copa del Rey de Sevilla que está a la vuelta de la esquina, si llegará hacerlo en la final de la Copa de la Reina (que sigue sin sede) el 18 de mayo o si no llega a tener nunca su día de gloria. El deseo general es que la Federación ya tenga un presidente oficial en la Eurocopa y en los Juegos y la atención se centre de una vez por todas en el terreno de juego y no en el palco.