La Juventus da un golpe antes de recibir al Sevilla en Europa League

La Juventus, fuera de casa, se seca. En una temporada complicada, los de Allegri solo han marcado 14 goles en 16 partidos jugados fuera del Juventus Stadium en Serie A. Hoy los 'bianconeri' tenían una parada muy complicada en Bérgamo, en el campo de la Atalanta, en su lucha por clasificar a la próxima Champions League. "Con 73 puntos estaríamos clasificados matemáticamente" dijo Allegri unos días atrás.

Visitar Bérgamo es complicado para todos los equipos grandes en los últimos años. Sin hacer tanto ruido como años anteriores, los de Gasperini siguen en la pelea por clasificar a las competiciones europeas. Y si su jugador más destacado llega enfocado y en forma a este final, más razones tienen para soñar: Duván Zapata ha vuelto y la Juventus siempre ha sido una de sus víctimas favoritas, marcándole 8 goles en 16 encuentros.

Allegri hizo algunas rotaciones pensando en el partido del jueves contra el Sevilla, pero no podía dejar pasar esta oportunidad de pasar a la Lazio en la segunda posición y por eso jugadores como Di María o Rabiot fueron titulares. En el banquillo se quedaron Bremer, Chiesa, Vlahovic, Kostic o Bonucci, por poner algunos ejemplos. Intentó dominar la 'Vecchia Signora' en los inicios de partido pero la Dea poco a poco se quedaba con el control del encuentro.

El trabajo de Allegri se ve en el terreno de juego. Esa Juventus que sufría a principio de temporada en defensa desapareció, los del Piamonte ahora son más fiables atrás. Los problemas vienen en la fase atacante, que no están encontrando goles como comentábamos antes. Di María primero y Milik después lo intentaron, pero sus remates se fueron un poco lejos de la portería de Sportiello. Las ocasiones estaban, había que afinar la puntería, algo que también le ocurrió a Scalvini, que pudo marcar de cabeza el primer tanto para el equipo local.

Los últimos 15 minutos del primer tiempo fueron de la Atalanta de manera completa. De Roon, Ederson, Maehle, Pasalic y Koopmeiners cambiaban de posiciones constantemente y Zapata fijaba a los centrales. La Juventus respondía bien al asedio del equipo local, que no podía encontrar la portería de Szczesny con acierto. El último minuto pudo llegar el tanto pero Pasalic desde el punto de penalti mandó el disparo alto. Allegri sufría, Gasperini también. Su Atalanta había disparado 13 veces a puerta pero ninguna entre los tres palos.

El segundo tiempo comenzó con la misma dinámica que terminó la primera, pero la Juve, en la primera que tuvo, marcó. El inglés de 19 años, Iling-Junior, en su primera titularidad, marcó el primer gol del encuentro tras recuperar él mismo un balón, comandar la jugada, ceder a su compañero Rabiot y encontrar el rebote en el área chica. El carrilero zurdo le daba la razón a Allegri y ponía por delante a la Juventus en Bérgamo.

En el minuto 65 de encuentro, Allegri movía el banquillo: fuera Fagioli y Milik, dentro Vlahovic y... Paul Pogba. El francés, casi inédito esta temporada debido a problemas de lesiones, ingresaba en el partido e iba a jugar la mayor cantidad de minutos desde que volvió de sus infortunios. Para la plantilla, el campeón del mundo es importantísimo y tenerlo de vuelta en este final de temporada, aunque no sea en partidos completos, es clave.

La Atalanta dominaba, la Juventus salía de contra intentando marcar el segundo tanto del partido. Allegri veía que sus jugadores de ataque estaban agotados y daba ingreso a Kostic y Chiesa para finiquitar el partido. Los de Gasperini seguían dominando y el ingreso de Muriel le daba más peso en ataque, aunque el colombiano no conseguía encontrar la portería del polaco Szczesny, que todavía no había sido probado.

El serbio Vlahovic tuvo la mejor ocasión para cerrar el partido cuando el cronómetro marcaba el minuto 89. Una gran contra de Rabiot terminó en disparo del serbio, pero Sportiello se mantuvo firme. Una jugada después, Zappacosta remató y el balón golpeó el palo, aunque el portero polaco se había estirado bien.

Los últimos minutos fueron vibrantes en el campo y calientes en la grada. Los 'tifosi' de la Atalanta gritaban contra Vlahovic y el serbio protestaba, pero iba a tener una última palabra porque el delantero marcó en el último segundo. La victoria de la Juventus es importante en lo clasificatorio, pero más importante en lo anímico. El jueves se espera otra batalla ante un experto de la competición como el Sevilla y todos los sentidos ya están puestos en ese encuentro.