Y las sonrisas se tornaron en silencios: crónica de un volantazo en la Selección
El aperturismo con los medios se ha visto frenado con dos concentraciones en las que impera la ley del silencio.

Sólo se hablará en la rueda de prensa oficial. Tanto en el caso de Jorge Vilda como en el de las jugadoras. La Selección española ha cambiado sus costumbres, siguiendo con la línea de la anterior convocatoria, en la que tampoco hubo atención a medios por parte de las futbolistas. De hecho, ni siquiera después del partido ante Suecia, ha habido zona mixta. Entonces, (casi) todo cambió. Un grupo de jugadoras reclamó cambios y pidió no volver hasta que estos se produjeran. Vilda tuvo que tirar de hasta 14 caras nuevas con respecto a su última lista. Y se puso fin al aperturismo y cercanía del vestuario de España con los medios de comunicación.
Con este conflicto latiendo más fuerte que nunca se ha dado paso a una ley del silencio que impera entre jugadoras y cuerpo técnico durante las dos últimas concentraciones. Las "sonrisas" (tal y como dijo Vilda), los retos de Tik Tok y las entrevistas en todos y cada uno de los medios que lo pidieran brillan ahora por su ausencia y se han tornado en auténticos silencios. Nadie quiere hablar fuera de la oficialidad. Ni siquiera en el aspecto puramente coloquial. Una seña más de lo delicada que es esta situación.
Sólo hay dos vías para acercarse a esta Selección: las ruedas de prensa oficiales, como la de este jueves de Vilda y Esther, y los 20 minutos abiertos en los entrenamientos. Esto sí que no ha cambiado. Es el único momento en el que los medios pueden ver y hablar con los miembros del vestuario de la Selección. Un hecho que se repite por segunda convocatoria, coincidiendo con la crisis en el equipo español.

Las últimas que hablaron
Estas dos últimas concentraciones de la Selección tuvieron un inicio rocambolesco, por llamarlo de alguna manera. En la primera, la noticia adelantada por Relevo de una reunión entre las jugadoras y el cuerpo técnico, con 23 posteriores reuniones individualizadas entre ambas partes condicionó el transcurrir de la concentración. De fondo, la petición de un grupo de futbolistas de realizar cambios en la preparación, entrenamientos y gestión del vestuario, entre otras cuestiones.
Lo que vino después fue una de las ruedas de prensas más extrañas que se recuerdan. En primer lugar, salió Jorge Vilda, respaldado por todo su cuerpo técnico en la sala. Después, las jugadoras, con sensaciones muy dispares entre una y otra escena. Lejos de su intención, no se transmitió ni calma, ni tranquilidad en ellas. La voz entrecortada y el nerviosismo al hablar de Paredes o la actitud negacionista de Jorge Vilda dejaron un ambiente de preocupación en torno a la Selección.
Junto a Paredes, también hablaron Patri Guijarro y Jenni Hermoso, también capitanas. Y antes de que acabara dicha convocatoria salieron en rueda de prensa otras jugadoras, como Esther, Olga Carmona u Oihane, aunque lo hicieron para hablar de lo puramente deportivo con los partidos de Hungría y Ucrania. Lo que sucedió en las próximas semanas, confirmó aquellas malas vibraciones.
El inicio de la siguiente concentración no fue mejor. Después de que hasta 15 jugadoras enviaran un email para pedir no ser convocadas hasta que cambie la situación, Vilda protagonizó su convocatoria (sin 18 de sus habituales: a las 15 que enviaron el email se sumaban las bajas de Alexia, Jenni Hermoso o Paredes) más complicada. Una lista en la que hubo hasta 14 caras nuevas con respecto a la concentración anterior y que fue seguida de una rueda de prensa cuanto menos tensa del entrenador.
'Las 15', tema tabú en rueda de prensa
"Esto es un ridículo mundial", dijo el seleccionador el pasado viernes. Durante aproximadamente una hora, Vilda atendió a todos los medios evitando hablar de 'Las 15' y otros casos como Alexia, Jenni o Paredes y destacando el dolor que sentía por la 'traición' de sus jugadoras: "No le deseo a nadie lo que estoy pasando estos días", sostuvo, antes de pedir a estas que fueran "valientes" e invitarlas a hablar: "Desde aquí hago un llamamiento a todas las jugadoras que he entrenado. Todo lo que no sea un trato exquisito, les reto a que salgan y lo digan".
Después, se volvió a silenciar todo y hubo que esperar casi una semana para volver a escuchar a los protagonistas de esta historia. Seis días tras los que el seleccionador ha vuelto a la sala de prensa acompañado de una jugadora, Esther González, para hablar del partido amistoso de este viernes (20:30h) ante Suecia.
Ambos atendieron a la prensa desde el estadio El Arcángel de Córdoba, donde se disputará este duelo ante las suecas, con una comparecencia corta -aunque esto fue porque no hubo muchos medios que solicitaron preguntar- y en la que se evitó hablar en todo momento de 'Las 15' o de la crisis en la Selección. "Estoy encantado con el equipo que tengo", sentenció Vilda, que quiso dar carpetazo a la crisis: "Estamos ilusionados. En estos días ha reinado la armonía...".

Aperturismo en la Eurocopa
Todo esto contrasta con el aperturismo a los medios de la Selección antes de la crisis. El último precedente fue la Eurocopa. La previa no fue fácil y estuvo plagada de noticias: desde la lesión de Jenni Hermoso y sus posteriores declaraciones polémicas hasta las ausencias de Nerea Eizagirre y Amaiur en la lista inicial. Y, cuando ni siquiera había empezado el torneo, explotó la bomba de la lesión de Alexia. Sin embargo, la Selección española no alteró su política de comunicación.
Durante el torneo, la Selección se hospedó en la Abadía de Bisham, un centro de alto rendimiento. Ya fuese en rueda de prensa (siempre tenían lugar en la Abadía o en el estadio en cuestión) o de forma individual, la Selección siempre le daba la oportunidad a los medios de comunicación de charlar, tiktokear o twitchear, con las protagonistas.
😍 Hay un equipo de profesionales que son cada día 𝗧𝗜𝗧𝗨𝗟𝗔𝗥𝗘𝗦 en esta #WEURO2022
— Selección Española Femenina de Fútbol (@SEFutbolFem) July 18, 2022
📹 Los periodistas, cámaras, fotógrafos y técnicos que cubren la información de la @SEFutbolFem
💡 ¡GRACIAS POR ACOMPAÑARNOS EN ESTE 𝗖𝗔𝗠𝗜𝗡𝗢!#JugarLucharYGanar pic.twitter.com/E7Ld3tB38Z
Todos los días por la noche, el staff de prensa de la Selección, enviaba un WhatsApp a los medios de comunicación explicando el plan del día siguiente. Dependiendo la cercanía del partido, la atención a los medios de comunicación variaba.
Por ejemplo, en la previa al partido, el día de antes y el posterior, Vilda y las capitanas daban una rueda de prensa y después del partido, la zona mixta. En cambio, el resto de días la atención era individualizada. ¿Qué quiere decir? La Selección te pasaba la lista de las jugadoras que al día siguiente, después del entrenamiento, iban a atender a los medios y el periodista en cuestión pedía a dos jugadoras (la segunda te la daban en función de si había tiempo o no).
Durante los 17 días que duró la concentración de la Selección española, siempre hubo protagonistas y comunicación entre el staff de la Selección y los periodistas. Ni silencios ni volantazos.