SUPERCOPA | BARCELONA - REAL MADRID

Tú a Arabia y yo a Leganés: la última goleada del Real Madrid añade leña al Clásico femenino

Del acuerdo millonario al desastre organizativo, con una rivalidad que traspasa categorías.

Linda Caicedo, del Real Madrid, y Aitana Bonmatí, del FC Barcelona femení, en un Clásico./GETTY
Linda Caicedo, del Real Madrid, y Aitana Bonmatí, del FC Barcelona femení, en un Clásico. GETTY
Mayca Jiménez

Mayca Jiménez

Antes de empezar este texto, pido perdón por recurrir a una de esas comparaciones que siempre evitamos en el fútbol femenino. No es lo mismo el Barça femenino que el masculino. Tampoco el Real Madrid masculino que el femenino. Aunque se comprendan bajo el mismo paraguas y centraliza muchas de sus actividades o problemas -si hay pérdidas en uno, le afecta al otro-. Tampoco cuentan con igualdad la Supercopa masculina y femenina. Y aquí la cosa tiene miga, porque la brecha deja a unos disputando el trofeo español en Arabia Saudí, rodeado de millones y a otras en Leganés, sin apenas promoción y con un desastre organizativo que no suma, sino resta. Tanto que la RFEF anunció la sede y los detalles a menos de un mes de su disputa, con las entradas a la venta unos días antes de que arrancara.

Hasta ahí, todos estamos de acuerdo. Aún así, en esto del Clásico, cuyo nombre se ha traspasado de un categoría a otra por mero interés mediático tras darle una patada al diccionario, la rivalidad cada vez se generaliza más. Más aún cuando las heridas aún sangran. Cuando los aplausos aún llegan portadas. Tres días después de que el Real Madrid destrozara al Barça en territorio saudí, los dos equipos se ven las caras este miércoles (19:00h, La 2) en el fútbol femenino. Con mucho más en juego que mantener el reinado incontestable, en el caso del Barça, y dar la sorpresa, del Real Madrid. O plantarse en la final de la Supercopa para ampliar un dominio histórico o colocar la primera piedra, respectivamente.

El Clásico es Clásico en rivalidad. Y mientras que en el Barça presumen de su equipo femenino, que se ha impuesto en los dos partidos que ha jugado ante las blancas en esta categoría. En el Real Madrid, la pregunta que se repite una y otra vez en los entornos madridistas es siempre la misma: ¿sigue habiendo tanta diferencia con el Barça? Hasta ahora, la respuesta ha sido rotunda. Y lo seguirá siendo aunque haya una derrota que de un auténtico golpe sobre la mesa. El conjunto culé es vigente campeón de Liga, Champions y Supercopa y lo ha ganado prácticamente todo en los últimos años, con dos títulos continentales y pleno en la máxima competición nacional.

Aún así, en la previa de cada encuentro entre madrileñas y catalanas la ilusión distorsiona levemente la realidad para añadir emoción. Si bien es cierto que el fútbol es fútbol, pocos apuestan por una victoria de las de Alberto Toril. Hasta los madridistas más optimistas dudan, aunque no pierdan la fe. Su entrenador ha apostado por el optimismo. Lo contrario sería dar por perdido el partido antes de jugarlo.

El Clásico test de distancia en el fútbol femenino

"Creo que no hay tanta diferencia (con el Barça). Creo que podemos ponerlas en problemas. Tenemos posibilidades y en algún momento llegará la victoria. Quiero que juguemos sin complejos", deseó Toril en la previa del partido, para el que tiene como gran duda a Olga Carmona, una de sus capitanas y estrellas. La lateral sevillana compartió gala en el The Best con rivales en este encuentro como Lucy Bronze, Keira Walsh, Cata Coll o Aitana Bonmatí, nombrada mejor jugadora del mundo.

La mediocentro catalana, que relevó en 2023 a su compañera Alexia Putellas, aún lesionada y baja para el Clásico, como campeona de todo (Balón de Oro, The Best y Jugadora del Año por la UEFA) es la gran amenaza para el Real Madrid. Aunque no la única. En el último partido que enfrentó a ambos conjuntos (5-0, en Liga)Caroline Graham Hansen y Mariona Caldentey hicieron de las suyas junto a Aitana Bonmatí para destruir en varias jugadas a las madrileñas. Es precisamente el infierno que las blancas no quieren volver a vivir.

Toril no es el único que habla de mayor igualdad de cara a este cruce. Jonatan Giráldez avisa: "En estos partidos todo se iguala y ya lo vimos la temporada pasada en esta misma competición". El técnico azulgrana se refiere a la pasada semifinal de Supercopa, en la que blancas y azulgranas llegaron a la prórroga con 1-1, con victoria final para el Barça, que jugó desde la segunda parte con una menos.

Sea como sea, la experiencia y una plantilla superior hace que el Barça llegue con más enteros de llevarse el partido. Las de Giráldez saben que, de ganar, añaden un tímido alivio para quienes lucen el escudo culé sin atender a categorías o sufriendo en ambas por igual. En el lado contrario, la motivación en el Real Madrid se multiplica: primer triunfo ante el Barça, despejar dudas y acercarse a su primer título... Y hasta dar un doble golpe a su eterno rival en apenas unos días. Más que un Clásico.