Joao Félix, un caso que provoca discrepancias entre Xavi y el tándem Deco-Laporta

La lesión de Raphinha, que podría tener para un mes, y el gran segundo tiempo que protagonizó ante Osasuna, abren la puerta de la titularidad en la final de la Supercopa de España del domingo (se podrá ver en Movistar Plus+ seas del operador que seas) a Joao Félix, el fichaje controvertido que desune de puertas para adentro a Joan Laporta y Deco, por un lado, y a Xavi Hernández, por otro. Es ya conocido que en verano el técnico prefería otras opciones, y que al final fue un fichaje más de club que de entrenador.

El debate quedó guardado en un cajón desde el mágico comienzo del portugués, dotado de una calidad excepcional, pero intermitente, como ha demostrado a lo largo de los cinco meses que lleva ya de azulgrana. Y especialmente después del partido ante el Almería, el último de 2023, donde se produjo un punto de inflexión. Desde entonces, el extremo ha tocado banquillo. No jugó en la primera jornada de 2024 en Las Palmas, fue titular en Barbastro y de nuevo Xavi prefirió a Ferran ante Osasuna... incluso sacó antes a Lamine Yamal. Una situación que torció el gesto de la cúpula directiva.

Enfrentado con Diego Simeone en el Atlético, el jugador emite su luminosidad a ráfagas. Y hay muchos aspectos del juego que quieren Xavi y su cuerpo técnico y que no ha acabado de asimilar, como la presión tras pérdida y la manera de interpretar la posición de extremo izquierdo y de perfilarse. Eso ha provocado que Xavi haya intervenido y le haya 'castigado' justamente después de declarar que la primera parte ante el Almería fuera "inaceptable": Joao fue uno de los damnificados al descanso.

La perspectiva es diferente para Laporta y para Deco, quienes consideran que el talento del de Viseu debe verse en el campo y que tiene todas las condiciones para ser uno de los jugadores más determinantes del equipo. "Cancelo y Félix han estado jugando a un alto nivel desde que llegaron. El club podrá mantenerlos para las próximas temporadas", dijo Laporta el 9 de diciembre, apenas dos semanas antes del enfado de Xavi. Deco, por su parte, fue más frío y comentó que ahora no era el momento de haber de ello porque la prioridad era ganar partidos.

Antes de la semifinal ante Osasuna, el técnico opinó sobre el jugador que "Joao ha sido importante toda la temporada y volverá a serlo", esperando obviamente un cambio, como se pudo ver el jueves en Riad cuando fabricó el 2-0 y dio un rendimiento diferencial. Ese es el futbolista que saben Laporta y Deco que es, aunque lo demuestre a cuentagotas y Xavi se vea obligado a sentarlo. Un punto de desencuentro desde verano que emerge en esta nueva situación donde toda se soluciona con ver al mejor Joao Félix sobre el césped.